cap 14: Confesiones II

Elena tú me gustas, el corazón de Elena se acelero causando un revuelo en su pecho.

No perdón, no es la palabra correcta tú me... la interrupción del mesero llegando con la orden no permitió que Michael continuara.

La sonrisa queda antes adornaba el rostro de Elena fue reemplazada por una expresión triste y vacía cosa que no pasó desapercibida por Michael, que en su mente maldecia su mala suerte.

Sin levantar la mirada Elena se dispuso a comer aquel plato que se veía delicioso y hermosamente decorado, pero no le era provocativo, pues sentía un sabor amargo en su boca.

Aún con las múltiples advertencias de su madre, se había idealizado otro panorama y lo que tiene enfrente en era lo que ella soñó.

El ambiente se tornó frío en esa mesa, la cena transcurrio en total silencio.

Michael buscaba la forma de entablar una conversación o que Elena le sostuviera la mirada, pero solo consiguió evasivas con palabras frías y cortantes de su parte.

Desanimado pensó en que Elena solo lo veía como su amigo, y aquél mensaje hacía eco en su mente "Eres mi mejor amigo".

Con amargura en su ser, se tomó de un trago la copa del vino, la llenó y de nuevo la bebio.

Analizando la expresión entristecida de Elena quien apenas había probado su comida, pregunto.

No es de tu agrado? si deseas Puedes cambiar a otro plato, dijo acongojado.

Noooo, está rico solo no tengo mucho apetito contestó apresurada y se obligo a comer.

Espesas lágrimas se formaban en sus ojos y amenazaban con salir, por tal motivo no levantó su mirada.

El hombre que amaba estaba frente a ella tan cerca y al mismo tiempo tan lejos.

Su baja autoestima y todas sus inseguridades le jugamos nuevamente una mala pasada, ya su mente le decía que no era suficiente para un hombre así, que era tan poca cosa que él ni nadie podía amarla.

Hace unos minutos se sentía hermosa ahora ya no pensaba que eso fuera cierto, se sintió ridícula y sonrió con amargura mientras su mente le gritaba. Aunque la mona se vista de seda mona se queda.

Recordando como le decían sus compañeras de clase el día de la graduación.

Frustrado Michael sirvió nuevamente vino en ambas copas.

Desearia leer mentes y conocer sus pensamientos le dijo que una sonrisa, sabía que era insegura de sí misma e ignoraba lo que su belleza natural causaba en el y muchos hombres a su alrededor.

Créeme que no quisieras, respondió con amargura.

Nuevamente el mesero interrumpio, retiro los platos y sirvio el postre.

Que lo disfruten dijo y se retiró.

Ni la dulcura del pastel de chocolate quitaba ese sabor amargo de ella.

Michael a pesar de no sé amante el chocolate le quitó un poco de pastel y lo comio.

Hum rico.

Elena sonrio por aquel gesto y las expresiones de Michael que aunque fingía disfrutarlo no era cierto.

Estaba demasiado dulce para su gusto, peso en el pastel de Fernanda ganaría millones si lo vendiera.

Elena lo miro divertida te lo cambio si quieres dijo divertida.

No gracias dijo apresurado haciendo que ella soltara una carcajada.

Cómo mentiroso eres pésimo dijo riendo.

Michael lo miraba embobado, solo lo comería de tus labios penso a verla llevarse un trozo a la boca.

Tomó La cuchara y comió de su mousse de fresa eso postre era más de su agrado y continuo comiendolo.

Elena al verlo disfrutar el postre sintio curiosidad e imitó la acción de tomar un poco de su postre.

Michael al ver la clara intención no lo permitió, sino que con su cuchara tomó y le dio el mismo en la boca.

Hum esto está delicioso.

Ese pequeño gemido lo hizo fantasear con tenerla gimiendo en su cama, sacudió esos pensamientos impuros y sonrió.

Terminaron el postre entre bromas divertidas.

Michael llamo al mesonero para pedir la cuenta, Elena se levantó para ir al baño mientras que Michael pagaba.

Le dio 100 dólares al mesero y una sugerencia de no interrumpir una conversación ajena.

Lo lamento señor, lo tomaré en cuenta para la próxima ocasión respondió con cortesía feliz con su propina.

Elena regresó a la mesa y salieron del restaurante.

Mientras caminaban al estacionamiento dos hombre se quedaron mirándolos con morbo cosa que despertó unos enormes celos en Michael, quien la tomo de la cintura y la rodeo con un brazo, como diciendo es mía no la miren dirigiendo una miraba feroz a los dos hombres.

Elena Inocente de todo solo le sonrió, dándole calidez al corazón del celoso rubio.

Al llegar al auto no aguanto y se acercó más a ella, perdón por esto.

Elena iba a preguntar porque tenia que perdonarlo, pero Michael no le permitió hablar sellando sus labios con los suyos.

La beso con ternura.

La dulzura y el sabor de chocolate estaban presente en sus labios haciendo recordar su fantasía anterior.

Intensificó el beso apretándola a su cuerpo noto que era inexperta y sonrío para sus adentros.

Dejó de besarla cuando le faltaba el aire, sin soltarla pego su frente a la suya y dijo.

Soy el peor de los mentirosos, pero tú eres mi verdad.

Te amo Elena.

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