Mio

Arvan.

"así que para eso querías que investigara a Mariana Cossio?, qué hizo para enfurecerte?" quién acaba de irrumpir en mi oficina es quizás la única persona a la que puedo considerar o llamar amigo, Draco un famoso genio de la tecnología y que además tiene una de las más grandes y exitosas compañías informáticas.

—no te enseñaron a tocar?

Draco: y tu nunca vas a recibirme con una buena actitud?, soy tu único amigo.

—y eso, que?, no se supone que ibas a salir del país?

Draco: así es, pero vine a dejarte un regalo antes.

—escúchame, lo que menos tengo es tiempo para tus juegos.

Draco: de acuerdo, y yo que pensé que te iba a hacer feliz saber que tengo en mis manos toda la información de Noah Montenegro y sus adorables hijos, que por alguna extraña razón, son muy parecidos a ti...—evitó que tomara los documentos, sé que algo quiere, y no es difícil adivinarlo.

Draco: Dime, no fue este mismo omega el que te drogó hace años?

—hay muchas cosas que aclarar en ese incidente, dirás que es estúpido, pero incluso si Noah aceptó ser el culpable, no puedo creerle. —y como era de esperarse, este estúpido comenzó a burlarse.

Draco: espera, tú el gran Arvan Daniel's, estás aceptando que te equivocaste y que hiciste pasar un infierno a un pobre omega, que quizás su único error fue tener mala suerte?

—si lo estoy aceptando, pero eso no sirve de nada, la única razón por la que Noah aceptó ser el responsable es porque me odia y no soporta mi cercanía.

Draco: Arvan, estas enamorado de ese omega? —amor?, jamás pensé ni contemplé si quiera que eso exista, pero...

—no lo sé, no reconozco a la persona que soy cuando esta cerca, quiero que deje de evitarme, qué me permita redimirme, ver a mis hijos, ser parte de la vida de los 3, quiero que todos los que odia y desprecia estén bajo sus pies, sin importar si es mi propia sangre.

Draco: de acuerdo, este lado tuyo no lo conocía, así que por eso es que me pediste investigara todo sobre tu sobrino?, por lo menos ya sé lo que harás con la información que tengo, —adoptó una actitud más seria, nada que ver con su expresión estúpida habitual, cuando está así se vuelve incluso más irritante.

Draco: Arvan, tú lo marcaste?, Noah tiene tu marca no es así?... Es que no encuentro otra explicación a tu actitud, y ya que me aclaraste todo lo que quería saber, aquí está todo lo que pediste, la otra es la carpeta de tu sobrino —tomé ambas, leí primero la información de Noah y mis hijos, no cabe duda, él es increíble, superó todo y tuvo a nuestros hijos, y también se superó así mismo. fue el mejor de su generación.

Mis hijos nacieron el 12 de abril, hace 6 años, un día después de mi cumpleaños, irónico no? Ni siquiera recuerdo que hacia ese día.

Cada cosa que leo, cada evento y momento que me perdí me hacen sentir más arrepentido.

Draco: no es extraño?, un omega tan hermoso debe tener a muchos alfas a sus pies, no habría sido difícil reemplazar tu marca o ¿si?, sin embargo... —ni siquiera lo pensé, lo sujeté fuerte del cuello.

—Noah es mio! —no puedo calmar este impulso, no puedo aceptar esa posibilidad, pero aquí está él para escupirme lo que me martirisa.

Draco: te estas escuchando?, lo violaste!, te odia!, te teme!, y lo más importante cada uno de esos sentimientos lo hace sufrir el doble por la marca que tú le pusiste, no sé si te volviste idiota, pero lo único que haces es causarle más dolor. —eso lo sé, puedo sentirlo, porque me siento de la misma forma, sé que si llegara a aceptarme incluso si fuera un poco no sería un sentimiento real, quizás solo por mi marca que lo obliga a aceptarme.

Draco: dijiste que querías redimirte o no?, solo tienes una opción...

—cállate! —sé lo que va a decir, yo también lo consideré, pero si hago eso, se acabó!, no tendrá un motivo para tan siquiera tenerme presente, y se irá con mis hijos, sin que pueda hacer nada, no quisiera admitirlo, pero tengo miedo, miedo de perderlos para siempre.

Draco: tal vez no te has dado cuenta, pero ellos no son tuyos, ni Noah, ni tus hijos, es más te apuesto a que no saben que existes, su padre no registra, no tienes ningún derecho sobre ellos. —lo sé, y por eso estoy tan temeroso.

—pero son mis hijos, y él mi omega.

Draco: no es así, tal vez son tus hijos, pero no tienes el derecho de ser su padre, si de verdad quieres redimirte, déjalo ir, quitale tu marca, si después de eso, logras qué te acepten, serás en verdad merecedor de ellos.

—déjame solo.

Draco: como quieras, pero si sigues dejándote llevar de esa impulsividad, vas a lastimarlo aun más. —se fue, sé que tiene razón, pero no por eso puedo solo aceptar sus palabras.

Tomé la otra carpeta, y sonreí era más de lo que necesitaba.

Siendo sincero siempre he estado muy aparte de mi familia, así ha sido mi forma de ser y vivir, por eso aunque dirijo las empresas por decisión de mi padre, tengo mis propios negocios, qué suman el triple de lo que todo el grupo Daniel's puede dar.

Y con esto Caled acaba de tirar a la basura, toda la reputación y renombre qué ha ganado a mis costillas, no pienso detenerme ni un segundo, pero antes, tendrá que decirme la verdad.

Esto no es suficiente, un castigo si, pero todavía le falta para ser perfecto,

*

*

Arrojé a su escritorio todos los documentos que llegaron a mis manos, levantó su vista furioso, aunque al verme su semblante cambio, está molesto por lo que pasó con el infeliz de Mauricio, todos en la familia lo están, ojalá, alguno se atreviera a decirme algo a la cara.

Caled: esto no es cierto tío!, lo juro son mentiras!, yo jamás —estaba realmente asustado, no solo había estado usando su posición en la compañía para obtener nuevos proveedores, sino que se atrevió a vernos la cara.

El inútil (qué ahora no lo es tanto) había estado recaudando fondos para una falsa fundación, solo para solventar sus propios vicios, (las apuestas, mujeres y alcohol)

—me crees estúpido?, las pruebas están ahí, el grupo Daniel's no va a pagar ni a respaldarte en tus estupideces, cuando esto se sepa iras a la cárcel, te hundes solo.

Caled: no puedes hacerme esto, tío por favor...

—de acuerdo, dime la verdad de lo que pasó hace años, en la mansión de tus padres.

Caled: ya te lo dije, fue Noah... —lo tomé por el cuello.

—sino quieres que a todos los cargos qué te van a imputar le sume el exilio familiar, y cualquier otro cargo, qué te haga pasar unos años más en prisión y te conviertas en el juguete de algún demente en prisión, dime la verdad, Noah ya me dijo todo, no te atrevas a mentirme.

Caled: de acuerdo, ya entendí, escucha, Mariana odiaba a Noah por como se ganaba a todos a su alrededor, le molestaba que fuera más popular qué ella y que incluso su padre tuviera más esperanzas en él que en ella, así que ideamos un plan, lo hemos hecho muchas veces, era nuestro juego, yo me divertía con los omegas qué le estorbaban y nos burlabamos con todos nuestros amigos de ellos.

Esa noche, Mariana puso algo en la copa de Noah, él no debía estar dando vueltas, pero la droga fue lenta y nos escuchó, decir que teníamos un plan en tu contra.

—ustedes drogaron el agua de mi habitación.

Caled: solo íbamos a dormirte!, lo juro, queríamos hacer una pequeña broma y ya está, dejarte tirado en el pasillo qué parecieras un ebrio, eso iba a herir tu orgullo.

—y que pensaban hacerle a Noah?

Caled: lo mismo que a todos, lo mismo que le hiciste tú —le di un golpe.

Caled: perdón, no sabía que Mariana confundió las drogas, la que Noah bebió era para ti y a Noah le dio la tuya. —maldito infeliz, quería matarlo a golpes, pero eso sería demasiado fácil, esa mujer, no ha tenido suficiente tampoco.

Me fui tengo cosas que atender, además las demandas qué le van a llover, no tendrá un solo centavo para cuando sea su turno de pagar.

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