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¿Este Es Mi Cuerpo? Una Segunda Vida Como Chica

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Parte 9

Por la tarde

Estoy en la habitación arreglándome el pelo y me veo algo frustrado por intentar hacerme un peinado.

—Ahg, qué difícil es hacer un peinado; no se porque mi madre dice que sin un buen peinado no me vería linda.

Sigo intentado hacerme el peinado.

Mientras tanto en el presente de Reiko

En la cocina haciendo la cena y cantando en voz baja escucho el timbre de la casa sonar y me pregunto quien será. Llego a la puerta y veo en la terraza a Ishi con su madre; abro la puerta.

—Oh Ishi, señorita Hina ¿qué hacen por aquí?.

—Buenas tardes señora Reiko, vine a visitar a Akina un rato ¿Está disponible? —Dice Ishi sonriendo.

—Si, está en la habitación ¡pase pasen! —Digo sonriendo.

Hina y Ishi pasan y cierro la puerta.

“Hina es madre de Ishi y mi amiga de la infancia”.

—Ishi si quieres puedes ir a la habitación de Akina mientras hablo con tu madre.

—¿Enserio? Bueno un permiso —Dice Ishi sonriendo.

Se va corriendo a la habitación de Akina.

En el presente de Akina

Sigo arreglándome el pelo y me enojo un poco.

—¡Ah! Imposible aunque tenga cuerpo de chica, mi mente sigue siendo de un chico.

En eso no me doy cuenta de que Ishi esta en la puerta viéndome.

—¿Qué estás haciendo Akina? —Dice Ishi algo confusa.

Me sorprendo por su voz y me caigo de la silla por la impresión.

—¡Ishi! ¿Desde cuando estas aquí?.

Ishi piensa y sonríe.

—Desde hace un momento jaja.

—Entiendo jeje —Digo sonriéndole.

Cuando me voy levantando la miro con alegra y corro hacia ella jalando la de la mano y cierro la puerta de mi habitación. Ishi sorprendía y con duda me mira.

—Ishi, yo se que eres una buena amiga pero necesito algo de ti.

Cuando digo eso me voy acercando a ella poco a poco pero Ishi va caminando hacia atrás algo nerviosa.

—¿Qué trata de decir Akina? ¿Qué necesitas de mi?.

—Pues es algo valioso que tienes tu —Digo sonriendo algo malvado.

Ishi se atemoriza un poco y sigue caminando hacia atrás cayendo en la cama.

—¿Algo valioso de mi?.

Ishi se queda pensativa y después reacciona avergonzadose un poco.

—¿Q-q-que estas diciendo Akina? Estamos muy pequeñas para eso y además... Somos... Chicas, es imposible.

Me subo encima de Ishi y se avergüenza más pero yo la miro con duda de lo que dice.

—¿De que hablas Ishi? Yo quiero que me ayudes con mi peinado, ya que tienes talento para la belleza y ese tipo de cosas.

Ishi se queda impresionada y avergonzada por lo que quiero y se tapa la cara dándome una patada haciéndome caer de nuevo.

—¡Ah! Pensé que querías otra cosa Akina.

—¿como que cosa? —Digo con duda.

—¡Nada! Olvidalo boba —Dice Ishi algo enojada.

Yo la miro con duda y luego sonrió levantándome.

—¿Entonces si me ayudaras?.

—Si boba —Dice Ishi arreglándose.

Me siento en la silla y Ishi comienza a explicarme como hacerme las coletas y otro tipo de estilos.

Horas después

Ishi y su madre se despide y yo de ellas igual. Me miró el pelo y noto que esta lindo como me lo dejó Ishi.

—¿Te gusta ese tipo de estilo Akina? —Dice mi madre sonriendo.

Emocionado mirándome en el espejo reaccionó y me pongo algo sería.

—S-si, esta bonito no me quejo.

Mi madre sonríe cerrando la puerta y en eso llega mi hermana Aoi y mi abuela.

—Te vez muy linda Akina —Dice mi abuela sonriendo.

—Gracias, abuela —Digo algo sonrojado.

Aoi me abraza y yo a ella.

—Estas linda hermana —Dice Aoi sonriendo.

acarició la cabeza de Aoi sonriendo.

Más tarde por la noche

Acostado en mi cama me siento algo emocionado por el día de mañana que el sueño no me da y quedo mirando por la ventana de mi habitación la luna.

—Qué hermosa luna...

—Akina...

Cuando digo eso escucho la voz de una mujer y pienso “de nuevo esa voz, ya la había escuchado antes y creo que la conozco”. Cuando la escucho de quedo dormido entrando en sueño.

En el sueño

Estoy flotando en el agua y veo el cielo estrellado por la noche.

—Qué bonito.

—Akina... —Dice la voz misteriosa.

Pienso “esa voz de nuevo”. Busco por los lado y no veo nada pero de repente me volteo mirando en el fondo de mar y veo una luz azulada iluminando el fondo de mar y me concentró en esa luz viendo a una mujer durmiendo en el fondo y pienso de nuevo “¿Quien es esa chica? Por lo que veo se parece mucho a mi”.

Cuando intento ir me dice una voz.

—No vengas, todavía no es el momento Akina.

Me quedo sorprendido, ya que ella sabía que estaba mirándola aunque este dormida.

—¿Quien eres? —Digo dudoso.

—Pronto sabrás quien soy, por ahora despierta para que encuentres a Kairi y a Alex —Dice la voz.

Fuera del sueño

Me despierto y noto que ya es de día; miro por la ventana y el viento de la primavera sopla siento su viento pensando “hoy es el dia”. Me levanto y me voy a bañar y cepillarme. Me arreglo y cuando estoy listo me voy al primer piso viendo a mis padres desayunando.

—Buenos días, papá y mamá.

—Buenos días hija —Dice mi padre sonriendo.

Mi madre me trae el desayuno dándome los buenos días también.

—¿Ya estas lista para ir a la escuela Akina? —Dice mi madre sonriendo.

—Si, estoy emocionada por ir —Digo sonriendo.

Mis padres sonríen y comienzan a desayunar igual. Mientras desayuno miro por la ventana de la casa viendo las personas pasar y una lagrima se me sale.

Mis padres se dan de cuenta y me mira preocupados.

—Hija ¿pasa algo? ¿Te sientes mal?.

—No, no es nada. Solo sentí nostalgia pero no se porque —Digo dudoso y me limpio la lagrima.

—¿Estas segura? Si no te sientes bien puedes ir mañana a la escuela —Dice mi madre.

—Estoy bien madre, tranquila no es nada —Digo sonriendo.

Mis padre se dejan de preocupar y siguen desayunando.

—Qué madura eres hija a pesar de tu edad pareces una adulta —Dice mi madre mientras agarra mi mano.

Yo la miro y le sonrió.

—Pero sigo siendo una niña.

Horas después

Mis padres llevándome a la escuela; me quedo mirando el bosque y sonrió pensando “siento que en esa escuela encontraré a Kairi y a Alex”. Después de unos minutos estoy en la entrada de la escuela y veo a muchos niños entrando. Mis padre me toman del hombro y los miro.

—Espero que disfrutes de tu primer día de clase Akina.

Yo sonrió y los abrazo.

—Gracias papá y mamá. Nos vemos más tarde.

Me voy entrando a la escuela y sin darme cuenta mis padres dejan de sonreír preocupándose un poco cuando entro.

Cuando ya estoy dentro veo a muchos niños hablando entre ellos y suspiro pensando “mi primer paso, aquí depende de como socializo y que tan agradable soy pero daré todo de mi. No quiero volver entrar a esa oscuridad”. Con los ánimos altos y sonriendo comienzo a acercarme a mis compañeros y comienzo a hablar un poco con ellos y noto que le agrado mucho y que mis esfuerzo están dando frutos. Cuando estoy hablando con unas compañeras veo a una niña sentada en un columpio leyendo un libro y pienso “esta sola no me agrada mucho, me voy acercar”. Me acerco a ella.

—¡Hola! Un gusto.

La niña me mira y se sorprende mucho que le esté hablando.

—¿Quien eres? —Dice la niña algo apenada.

—Bueno te vi sola aquí y quise acercarme a ti para hablar un rato —Digo sonriendo.

La niña se pone sería de nuevo y lee su libro. Yo la miro medio sonriendo y pienso “¿me acaba de ignorar?". Intento hablar otra vez con ella.

—¿Qué libro lees?.

La niña me mira de nuevo enojada.

—Oye y tu ¿Quien eres-.

—¡Akina!.

En eso Ishi le interrumpe acercándose a mi y me abraza.

—Ishi...

Sin darme cuenta la niña del columpio cierra el libro y se levantada mirándome impresionada.