cap 8: Enfrentamiento y supuesto cambio

🌹🌷Susana Cepeda🌷🌹

Regresamos a casa de Salome, aun no podía asimilar todo lo que estaba pasando con mi padre no lograba entender cómo era posible que mi padre estaba perdiendo el patrimonio que con tanto esfuerzo el y mi madre habían levantado durante tantos años.

De algo estaba completamente segura y era que tendría que hablar con mi padre el necesitaría ayuda profesional para poder superar esta adiccion.

Ahora podría entender el porqué de las discusiones entre mis padres no era por otra mujer sino por las deudas de juego, mi padre estaba despilfarrando todo nuestro patrimonio.

Esa noche me fue muy difícil dormir, mi preocupación de que papa nos llevara a la quiebra, sumado el miedo y la incertidumbre de cuanto dinero perdería esta noche.

Me desperte temprano, apenas pude dormir un par de horas, mi ojeras me delatan.

Tome un baño, me vesti rapido, no espere que estuviera listo el desayuno, subi a un taxi y me fui a casa.

Al llegar mi madre se encontraba sentada en la sala con la mirada perdida se notaba que habia llorado, sus ojos estaban hinchados y rojos.

-Madre buen día, mi padre se encuentra en casa.

-Antonella que haces tan temprano, pensé que pasarías el día entero con Salomé.

-Madre ya lo sé todo, no tienes que fingir que no está pasando nada.

-Hija perdóname por no hablar con sinceridad, pero es algo delicado lo que ocurre, tu padre nos está llevando a la quiebra si sigue así pronto estaremos en bancarrota comenzó a llorar.

-Madre llorar no va a ayudarnos en nada, debiste habérmelo dicho cuando lo supiste, no ahora sabes que pierde grandes cantidades cada noche y preferiste callar y dejar que siga envuelto en ese círculo vicioso, y no conforme con eso, te encierras a llorar, no vas a trabajar, no te arreglas ya ni duermes, pareces zombi, dime donde está la mujer fuerte y decidida, la coreógrafa estricta a la que todos admiran y conocen como mano de hierro, levántate y toma las riendas o nos iremos a bancarrota.

No quería sonar dura con ella, mucho menos faltarle el respeto, pero alguien debe hacerle ver que debe actuar no ser una espectadora más.

-Tienes razón hija, no puedo dejar que todo se caiga en pedazos, lo peor es que el dinero, hasta el que yo gano está en una cuenta en conjunto. -Dijo mi madre cabizbaja.

-Vez mami son errores que debiste solucionar desde el principio, todo tu trabajo, años de esfuerzo lanzados por la borda, caminaba de un lado a otro con frustración.

-Llama al banco y concreta una cita, vas a crear una cuenta particular y pasas el dinero que quede en la cuenta.

-Hija no quiero que tu padre se enoje y quiera el divorcio dijo asustada tomando mis manos.

- Mama entonces prefieres quedar en la calle, que estar separada de papa, esto es insólito, sabes mami yo amo a mi padre, pero él necesita ayuda y si no se la brindamos, todos sufriremos las consecuencias.

-Tienes razón mi amor me abrazo muy fuerte.

- Vamos debemos enfrentar juntas a papa, pero primero hay que ponerte hermosa, que se dé cuenta de que está perdiendo a su familia por bruto.

Fuimos mi madre se dio una ducha rápida, se vistió hermosa como la reina que es, le ayude a alisar su largo y sedoso cabello negro, la maquille para ocultar esas ojeras, se veía regia a sus 46 años sigue siendo una mujer hermosa.

Salimos de mi habitación, rumbo a la de mis padres, donde mi padre dormía, sin ningún signo de arrepentimiento.

-Despierta padre tenemos una conversación pendiente, dije fuerte abriendo las oscuras cortinas para que la luz del sol entrara por las ventanas.

Se levantó molesto profiriendo un monto de maldiciones .

-Mejor cállete y escúchame, sentencio mi madre furiosa. -La miraba y sonreía a mis adentros esta si es la imponente Sonia Ortiz.

-Escúchame muy, pero muy bien Gabriel de Jesús Cepeda, esta situación tiene que parar, nos estás llevando a la quiebra, ya nuestra hija también lo sabe, no te da vergüenza que tuvo que seguirte y le encontró apostando todo nuestro dinero, el patrimonio que con tanto esfuerzo hemos adquirido todos estos años, para que nuestra hija y sus futuros hijos vivieran cómodamente, para no preocuparnos cuando nos retiráramos, todo lo estás despilfarrando a manos llenas y nos estás arrastrando a la miseria junto a ti, te desconozco, donde quedo el hombre del que me enamore aquel que se preocupaba por el bienestar de su familia.

Mi madre se desahogó, pude ver la decepción en sus ojos, yo también le dije muchas cosa a mi padre, pero principalmente le hice ver que tiene un problema de adicción al juego y debe ir a terapia.

En todo momento mi padre mantuvo la cabeza gacha, acepto todas las condiciones que le hicimos, incluso me pidió que buscara a un psicólogo para comenzar a tratar su adicción al juego.

Prometimos acompañarlo en el proceso y es lo que haremos, sé que no será fácil, pero estaremos para él, seremos su soporte.

Días después mi padre comenzó a ir a terapia, se le notaba ansioso el médico le receto unas píldoras para la ansiedad, mi madre y yo lo acompañábamos a cada terapia.

Mi madre hizo lo que dije y abrió una cuenta personal donde paso el dinero de la cuenta en conjunto.

Mi padre ya no salía en las noches, volvió a la oficina y se hacía cargo de todo, estábamos felices y aliviadas.

Todo era una cortina de humo, los relojes de marca de mi padre desaparecían uno a uno, al igual que el dinero de la caja fuerte que era para solventar cualquier emergencia.

Sospechabamos que seguia apostando, pero en que momento, si de noche no salia.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***