El es increíble...

Desperté sintiendo que llevaba años durmiendo... mientras abría mis ojos lentamente y me estiraba en mi cama, las imágenes de la noche anterior vinieron a mi mente...

Mire a mi alrededor y estaba sola, tape con mi antebrazo mis ojos, y pensaba que Alex había huido, era obvio, seguramente pensaría que estaba loca de remate, y después de su rubia demente no tendría porque soportar otra más.

Mientras me decía por lo bajo lo estúpida que era, escuché que alguien aclaró su garganta, rápidamente me senté en la cama y mire en dirección a la puerta de la habitación.

Ahí estaba el , ya duchado, y con ropa casual, que por lo que pude ver no era de mi hermano dedicándome una de sus hermosas sonrisas torcidas.

- Buenos Días hermosa, siempre despiertas murmurando?- hablaba sonriendo mientras se acercaba para quedar sentado en la cama a mi lado.

Rozo mi boca con un dulce y cortó beso

- Te encuentras mejor?- dijo mientras acariciaba con sus dedos mi rostro.

-Alex... yo.. lo siento... no quise, no fuiste tu... - puso su dedo en mi boca para que hiciera silencio mientras depositaba un beso en mi frente.

- Recuerdas? te dije que cuando estés lista, hablaremos, yo voy a esperar, solo no me alejes de ti.

Me arrojé sobre el abrazándolo fuerte, no quería soltarlo, tenía miedo que desapareciera, el me daba todas esas sensaciones increíbles que jamás sentí. mientras permanecimos abrazados solo pude decir

"Gracias"...

Me aleje un poco, ya que estaba confundida, no sabía que hora era, ni por qué Alex ya estaba cambiado, además sentía un poco más de hambre de lo habitual, era Domingo, tenía que almorzar con mi padre y mis hermanos y ni siquiera había revisado mi teléfono.

-Porque llevas esa ropa? Cuanto Dormí? qué hora es- dije tratando de apurarme para levantarme.

El soltó una carcajada, me tomo de la cintura y me sentó en su regazo.

-Tranquila, vivimos a unas diez calles de distancia, me levanté temprano y no quise despertarte, tome tus llaves, fui a mi departamento, me duche me cambié, saque a Chase a su caminata y volví para almorzar juntos- dijo con toda tranquilidad.

- Que hora es!!? mi padre va a matarme, tengo que almorzar con ellos-, me puse de pie de golpe yendo a mi armario a buscar ropa.

-Anna... son las 02 pm, tu padre ya almorzó .. llame a Theo y le dije que saldríamos juntos hoy que no se preocupara- dijo mientras me abrazaba por detrás y apoyaba su barbilla en mi hombro.

me gire entre sus brazos para quedar frente a el, me puse de puntillas rodeando con mis brazos su cuello.

-Eres increíble- y sin más lo besé...

con tanta necesidad, ansiaba hacerlo, sentía como su boca me devoraba, mi lengua jugaba con la suya sin control, sus manos bajaron por mis caderas acercándome a el, podía sentir su erección en mi vientre, mientas un calor se apoderaba de todo mi cuerpo.

Me pegue más a su cuerpo para sentirlo más, mientras el movió sus manos a mi trasero apretándolo, ninguno de los dos podías parar, nos separamos por falta de aire, y enseguida me volvió a besar, metí mi mano bajo su camiseta acariciando su abdomen definido y marcado, estábamos fuera de control lo escuché gemir mi nombre y lleve mi otra mano a su trasero...

Separamos nuestros labios, y ambos jadeabamos sin control, con nuestras frentes apoyada, sentía su aliento cálido y lo único que quería era perderme en el...

-Preciosa, debemos parar, no creo poder controlarme mas- dijo sin abrir sus ojos.

- Alex... te deseo tanto que me da miedo- dije acariciando su rostro con mis dedos.

- Yo me siento igual, eres lo mejor que me ha pasado Anna, no quiero arruinarlo, quiero que confíes en mi- dijo mientras me daba un pequeño beso en la punta de nariz.

Sin ganas nos separamos un poco, sin dejar de mirarnos.

- Ve a ducharte y saldremos a almorzar algo, no quiero que mueras de hambre- de dijo sonriendo.

deje un suave beso en sus labios y gire con una sonrisa hacia el baño.

Una vez lista me dirijo al salón donde Alex me esperaba, me tomo la mano y salimos.

Al llegar abajo, le pregunté si le gustaría caminar, cerca del parque había un puesto de pizzas que me encantaba, el acepto pasando su brazo por mis hombros y yo por su cintura así fuimos hablando y bromeando hasta llegar al puesto.

Una vez que teníamos nuestra comida, fuimos a una banca en el parque debajo de un árbol a comer... tenía mucha paz y por primera vez en mucho tiempo me sentía feliz...

-Alex- dije mientras limpiaba con una servilleta mis manos-

- Si...- dijo mirándome y dando el último bocado a su pizza.

- Quiero contarte algo- dije girando y quedando gente a el sentada como indio.

Se limpio las manos y la boca y giro también quedando frente a frente

- Segura pequeña?- dijo tomando mis manos entre las suyas- Puedo esperar el tiempo que necesites.

Negué con mi cabeza y lo mire fijamente a los ojos, su mirada siempre me trasmitio seguridad y confianza, necesitaba hacerlo o al menos intentar.

- Quiero hacerlo- dije con mi mirada algo triste. -Solo Theo sabe esto, pero quiero confiar en ti-

- Siempre estaré para ti, confía en mí, solo si estás lista- dijo mirándome intensamente.

- Solo déjame hablar, si? no me interrupas-

El solo asintió con su cabeza.

Tome una bocanada de aire y empecé a hablar, era hora de sacar toda esa basura de adentro, y jamás alguien me había dado tanta confianza cómo el, además de Theo claro.

Mientras le relataba lo que había sucedido, no pude evitar que mis lágrimas corrieran, mientras el en silencio, con sus dedos limpiaba mi rostro. No le di muchos detalles, para quitar un poco de dramatismo al relato, pero mientras hablaba, veía como tensaba su mandíbula, su ojos se tornaron oscuros, su rostro estaba rojo y su vista parecía cristalizada.

Cuando termine de hablar lleve mis manos a mi rostro

y me lo cubrí, sentía mucha vergüenza, tenía miedo que el me viera como yo me sentía... rota, usada...

Sentí sus brazos acercarme a su pecho, y abrazarme fuerte mientras depositaba muchos besos en mi cabeza.

- Dónde está el?- pregunto sin emoción en su voz y sin soltarme.

Me separé un poco limpiando mi rostro con mis manos y lo mire con los ojos bien abiertos, su rostro mostraba enojo, furia, era otra persona, hasta desconocida para mí...

- No,noo, no supe más de el- dije tartamudeando- Theo se encargó de todo, y jamás le pregunté nada más.

se levantó y caminaba de un lado a otro revolviendo su cabellos como si fuese a perder la razón, no podía entender si estaba enojado con la situación o conmigo y se sentía engañando.

Me levanté y me pare a un lado, mis lágrimas comenzaban a salir nuevamente.

- Lo siento Alex, se que no soy... - no pude seguir mi garganta se me hizo un nudo y solo baje la vista al piso.

El se giró, puso sus dedos en mi barbilla haciendo que levantará el rostro para mirarlo.

- Jamás vuelvas a pedir disculpas!! no fue tu culpa ni nunca lo será, solo tienes que saber que eres perfecta- dijo volviendo a llevarme a sus brazos y bajando su cabeza al hueco de mi cuello.

- Pensé que estabas molesto conmigo- dije casi en un susurro.

Se separó de mi, tomando mis hombros y bajando su mirada para verme directamente a los ojos.

-Estoy molesto, porque quiero matarlo!! porque te hizo daño y yo ni siquiera estaba ahí, eras una niña Anna, y solo puedo pensar porque no llegaste a mi antes-

acaricié su rostro, y le di un suave beso en los labios.

- Lo estás ahora, y me haces muy bien- dije abrazando su cintura.

Paso sus brazos al rededor de mi cintura, pegandome a el.

-Nadie, nunca más, volverá a hacerte daño, te lo juro con mi vida- dijo y me dió un tierno beso en la frente.

Nos quedamos un tiempo más así, hasta que sentí un escalofrío, era otoño y a veces el viento era bastante fresco.

Nos separamos un poco, me ofreció una de sus sonrisas encantadoras tomando mi mano, y entrelazando nuestros dedos, me pidió que volviéramos a mi departamento.

Caminamos en silencio, sin soltarnos , pero se sentía cómodo... cuando llegamos a mi departamento, note que su teléfono estaba sobre la mesa apagado.

-Alex, le pasó algo a tu teléfono?- dije señalando el mismo.

soltó un suspiro de fastidio y me miro como cansado.

- Stefany no para de llamar ni de escribir, quería disfrutar el día contigo, por eso decidí dejarlo ahí-

-Hay algo pendiente entre ustedes que yo deba saber? algo en lo que yo esté interfiriendo?

- Stefany y yo no somos nada, y tu nunca interferiste en nada-

- Está bien, si tú dices, así será... solo nunca me ocultes nada si? confío en tí- dije tomando su mano.

- No lo haré, quizás quieras saber cosas de ella, pero, es mucho por hoy no crees? tenemos tiempo de hablarlo-

Asentí con mi cabeza, y le sugerí dormir una siesta me sentía realmente agotada, la cual acepto gustoso.

Me atrajo a sus brazos, y beso mi cabeza, mis ojos me pesaban, no tarde en quedarme dormida en cuestión de minutos.

Pero antes de caer en el profundo sueño, lo escuché decir

" Jamás nadie te lastimara otra vez, siempre estaré contigo" ....

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***