Desperté en un lugar muy afable.
Todo el lugar era de color blanco. Olía a depresión y esperanza; era el hospital de mi hermano.
Al parecer me habían puesto un suero que me provocaba mareos. Me quede inmóvil por un momento .
Sentí que me observaban, después que me tocaban.
Percibí un calor especial. Estoy desorientada, sinceramente. No me moví desde que desperté.
Salieron lágrimas de mis ojos y recordé todo, recordé que Jacob ... instantáneamente la tristeza invadió mi ser.
Tenía que estar con él y no perder el tiempo aquí.
Me levante y la puerta se abrió. Es mi hermano que rápidamente se acerco a mí y me empujo hacía mi cama.
Yo me negué .
- Amber necesitas reposo hermana por favor colabora — dijo intranquilo
- Patrick, Jacob me necesita , necesita que le lleve al hospital de mi amigo...
- Esta internado aquí con los mejores especialistas. Nada le pasará, eso te lo prometo.
Sentí que parte de mi alma en estos momentos más duros, regresaba a mí otra vez. Sentí que el amor y el apoyo de mi hermano regresaba a mí, sentí que no estaba sola en esto, que la única persona que no me abandonaría seria mi hermano y de eso estoy segura nuevamente .
- Gracias — solloce
Lo miré y lo abracé; él me correspondió, sentí una liberación, un peso menos de encima y estaba muy feliz a pesar de estar triste. Suena extraño pero es lo que siento.
- Te apoyaré en lo que digas, te aconsejaré para que las cosas te salgan bien porque ya no quiero que sufras.
- Necesitaba saber eso; Patrick, hermano no me gusta estar distanciada de ti.
Patrick se aleja de mí, me contempla unos instantes con lágrimas en los ojos y me abraza más fuerte.
- Siempre unidos Ami
- Siempre unidos Pat
Patrick y yo hacemos nuestro cruce de dedos en señal de promesa me mira y cambia su semblante, me dice lo siguiente.
- Ahora explicame ¿Por qué estoy aquí? — me limpio las lágrimas con los dedos
- Has sufrido una descompensación y al parecer es porque te estás mal alimentando y los nervios — se limpia las lágrimas con su pañuelo.
Me quedé totalmente paralizada, no puedo creerlo, con razón el corazón se me quería salir del pecho y los mareos.
Patrick me mira y me acaricia.
- Pero yo he tomado consecuentemente mis medicamentos — me quedé sin aliento
- Sabes que tú salud es lo primordial Amber.
Ahora que todo está tan reciente puedes recaer. Por ahora estás a prueba de ver como vas. No te confíes.
- Yo no quise — dije intranquila — perdona, estaba tan devastada y estresada por lo que pasó con Jacob... pero sí tomé mis medicamentos, ¿No entiendo? ... no quise recaer otra vez .
- Te haré unos análisis — suspiró — no dejare que nada malo te pase nunca, ahora recuestate y descansa por favor antes de que te desmayes.
- ¿A qué te refieres?
- Tranquila, ok, todo estará bien si sigues mis consejos, solo descansa
- ¿Y Jacob? — pregunté preocupada
- Jacob esta bien, y le estamos haciendo tomografías y viendo que podemos hacer.
Podrás verlo cuando estés mejor ok.
- Ok — dije desganada
Me recuesto y él me da un beso en la frente, lo admiro irse y me inquieto más. No puede ser que me haya descuidado tanto.
Demasiada preocupación ha hecho que decaiga y mi corazón aún es débil.
Se pronuncian con un golpe a la puerta y no sé si decir; que entren o quedarme callada.
Entonces observó sigilosa que se abre la puerta
- Hola hermosa — dijo Leonardo
Logré contestarle con una leve sonrisa.
Viene hacía mí y me acaricia la cabeza, yo sólo diviso .
- Has dejado de lado tu salud por él.
Ya ves lo que pasa si no te cuidas.
A veces sueles ser impulsiva.
Lo aniquile con la mirada, ¿Qué se creía?
o sea me trataba como una niña pequeña ¿Acaso tengo el rostro de inútil?
En ese momento solo me dio ganas de que se retirara de la habitación .
- ¿Cómo te atreves a decirme eso? — respondí con cólera — sabes que estoy asustada por Jacob y que quiero que se recupere porque no lo quiero perder.
Lo amo y siento que fue por mi culpa todo lo que paso ...
¿Sabes lo que significa ese sentimiento de culpa? ¿Eh?
Mis latidos eran más fuertes y rápidos cada vez lo sentía en mi corazón .
- Calmate Amber
Hubo ese momento incómodo, un silencio y una tensión que ni con cuchillo se podía cortar; se me llenaron los ojos de lágrimas y él se veía asustado .
- Perdóname no quise que te molestaras
- Leonardo no quiero ver a nadie — se me quebró la voz mientras desvíe la mirada.
- Solo quería saber como estabas ... no era mi intención que te pusieras así.
Entra mi hermano y nos observa detenidamente, al saber lo que pasaba le pide amablemente que se retire y me deja sola.
Agarro mi cabello y me lo tiro hacia atrás me toco el pecho, aún estoy alterada, solo necesito dormir ...
- Ya nadie ingresará ¿De acuerdo?
- ¿Puedo ver a Jae?
- Esta estable, cualquier cosa te avisaré
- Ok. Me siento aún poco mareada.
- Te daré medicamentos para que se te pase; además estas exaltada eso es todo, descansa.
- ¿Papá y mamá no han venido a verme?
- Papá iba a verte pero Leonardo se metió, ahora ya nadie va a entrar, te están abrumando y no es bueno para tu salud.
- Sí por favor — dije más tranquila
- Te dejo, cualquier cosa llámame
Me entrega un celular que no era mío y lo deja en una especie de mesita de noche; cierra la puerta .
Me sentía ansiosa, como cuando haces algo malo, te atrapan y no tienes escapatoria ...
Siento que alguien me mira una vez más y me da escalofrío.
Es mejor que me recueste a dormir un rato, sé que Jae esta bien y bueno... sino estoy bien no puedo ayudar al amor de mi vida .
Me sumergí en un mar de recuerdos; comienzo a rememorar cuando cantaba en la casa y Jacob me admiraba como si fuera la estrella más brillante.
Aun recuerdo su sonrisa y sus bromas pesadas hacía mí, eso me enojaba pero de igual manera me sacaba una sonrisa ... También recuerdo cuando estábamos plantando diferentes tipos de flores (me gustaba la jardinería y a él también) decía que yo era una rosa blanca, la más hermosa rosa de todas; yo lo contemplaba y veía sus mejillas color carmesí, sus rulos alborotados y sus ojitos celestes, felices, brillando como el mar del caribe .
Cerré mis ojos intentando regresar el tiempo, cuando lo besaba y acunaba su mandíbula con mis manos.
O cuando recostaba mi rostro en su pecho, amaba sentir los latidos de su corazón. Amaba cuando no me decía nada a pesar de que le incomodarla la presión.
Solo quería estar conmigo.
Cuando lloraba porque me discutía con mi familia (en ese entonces mi empresa ya no era totalmente mía) él me daba aliento y me decía "tranquila, duerme conmigo yo te protegeré, mi corazón va a hacer que calme al tuyo y mi amor aliviara tus penas".
"Juntos haremos lo imposible para que no suceda eso" ...
"Tú estarás bien mientras este vivo y aun así te cuidaré si ya no estoy contigo, en donde quiera que estés, no lo olvides".
Desperté ya que los sentimientos estruja an mi pecho de nostalgia, mis ojos se llenaron de lágrimas, tome una bocanada de aire y suspire; estaba totalmente asustada y al recordar eso me daba miedo pensar que ya no estaría conmigo .
Sentí otra vez que alguien me ve desde algún lugar de la habitación y esta vez me levante solo un poco y miré al rabillo del ojo. No vi nada; miré a todos lados.
Estaba empezando a ponerme paranoica.
- Jacob, por favor despierta, abre tus ojitos, quiero ver la luz que destella de ellos, me estoy quedando ciega sin ti ...
Nada tendría sentido si te vas ...
Dios por favor no te lo puedes llevar por favor ... haz que regrese, por favor.
Llorando repetí esas palabras para que se hicieran realidad y tratando de consolarme a mí misma.
Comencé a rezar, a hablar con Dios, a preguntarle si estaríamos bien, agradecerle por todo lo bueno. Decirle que me libre de toda mala suerte y bueno pedirle mejor dicho, suplicarle que por favor Jacob abra sus hermosos ojos y regrese a ser el mismo de antes .
Terminé de rezar; le pedí fuerzas extras para soportar esto. Sé que me escucha, siempre lo hace. Lo amo tanto que confío en él.
Mi Jacob, quisiera estar contigo en donde quiera que tu mente esté.
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