En resumen, para contar una historia romántica de manera efectiva, el autor necesita crear una atmósfera literaria que tenga una sensación visual y escénica al describir las acciones de los personajes y los eventos específicos de la historia. La descripción del entorno no se limita sólo a cómo describir visualmente una escena o ubicación, sino que también se trata de cómo el entorno da forma a los personajes e impulsa la trama.
En otras palabras, la descripción del entorno se refiere al uso de descripciones visuales y atmósferas ambientales para reforzar las escenas y proporcionar una transición fluida del tiempo y el espacio, además de impulsar la trama de la historia. Esto permite que todos los elementos de la historia cuidadosamente preparados se presenten de una manera cautivadora a los lectores.