¿Qué es la Trama?
La trama es una serie de acontecimientos que componen la historia, conectados en orden cronológico o lógico, y que tienen un efecto en el desarrollo de la historia. Sus elementos principales son los escenarios, la utilería y las acciones de los personajes, y su núcleo es el comportamiento de los personajes bajo el control de sus deseos (motivación). Una trama completa suele estar compuesta por tres partes: inicio, desarrollo y desenlace. Los buenos escritores pueden hacer que la historia sea única y emocionante mediante el diseño de la trama.
¿Cómo Diseñar una Buena Trama?
Diseñar una trama ha sido un problema recurrente para los escritores, pero se vuelve más fácil de entender una vez que se conocen los principios básicos de las unidades argumentales:
🔸Primer Paso: Crear Eventos
Al diseñar una trama, lo primero que debes hacer es encontrar el impulso que impulsa la historia. Este impulso es a menudo el deseo del protagonista; después de todo, la novela trata sobre la historia de cómo el protagonista quiere lograr algo y alcanzar sus objetivos. Por tanto, encontrar el impulso que surge del protagonista y, en base a ese impulso, crear una serie continua de eventos que ayuden o dificulten al protagonista en la consecución de sus deseos.
🔸Segundo Paso: Conectar los Eventos
La trama se compone de dos o más eventos que se conectan en orden cronológico o lógico y que tienen un efecto en el desarrollo de la historia. Por lo tanto, al diseñar la trama, es importante asegurarse de que los eventos estén conectados y sean útiles. Para permitir el desarrollo de la historia, en el primer paso del diseño de la trama, ya hemos enumerado eventos útiles. Ahora, para garantizar que estos eventos estén conectados, el autor debe considerar el orden cronológico de los eventos, pensar en las causas y consecuencias de los eventos y su peso y urgencia, y colocar estos eventos en una línea de tiempo. De esta manera se crea una lista de trazados sin errores.
🔸Tercer Paso: Hacer que las Tramas sean Interesantes
Por supuesto, una lista de argumentos ordinaria no es suficiente para satisfacer a nuestros lectores. Los escritores excepcionales saben cómo romper las reglas y utilizar las emociones para construir una trama inusual pero razonable.
Opción 1: Reorganización Estructural
En base a las características de la trama, podemos romper las reglas del orden cronológico y lógico, reestructurando la narrativa argumental para fortalecer la conexión entre eventos anteriores y posteriores, logrando así efectos inesperados:
En orden cronológico, mostramos al principio los acontecimientos más importantes para llamar la atención del lector;
En orden lógico, preservamos las causas o consecuencias de los acontecimientos, dejando misterios o pistas para que los lectores puedan especular y reconstruir los hechos, y luego proporcionamos un final sorprendente, inesperado, pero a la vez lógico.
La reorganización estructural de la trama es una habilidad de escritura avanzada. Los autores pueden tener una comprensión básica inicial y, en el futuro, la plataforma proporcionará cursos más detallados sobre el tema.
Opción 2: Crear Conflictos
Si quieres que tu historia sea más cautivadora, crea conflictos continuos y progresivos. Habrá conflictos entre personajes opuestos, conflictos entre extraños que se ven obligados a trabajar juntos, conflictos entre dos partes que compiten por el mismo objetivo, conflictos que surgen de malentendidos sobre las actitudes de los demás... Todo lo que necesitas hacer es pensar detenidamente: ¿Quién? ¿Tendrá conflictos mi protagonista?Con los conflictos vienen las soluciones y con las soluciones vienen los resultados. Independientemente de si son buenos o malos, el proceso de aparición y resolución de conflictos siempre involucrará las emociones de los lectores. Crea conflictos constantes, planifica adecuadamente antes y después de los conflictos y crea una ola interminable de conflictos para lograr el suspenso y la progresión capa por capa que los autores desean al diseñar la trama.
En resumen, la trama de una historia es básicamente el cuerpo de la historia misma. Diseñar una buena trama es como diseñar una serie de líneas auxiliares que se unen en una línea principal, conocida como esquema (línea principal) y esquema de capítulo (líneas auxiliares). Si un escritor ya tiene bien diseñada la trama antes de comenzar a escribir el contenido del primer capítulo, entonces solo le queda la parte de descripción simple.
