Episode 1

                                             Capítulo 1

Los primeros rayos de sol hacen su aparición y ya sé lo que me toca hacer. Lenta y perezosamente mis ojos se abren y en cuestión de tres segundos ya estoy caminando hacía, cómo suelo llamarlo : el infierno encarnado, o cómo comunmente le llaman, baño. Dentro hago lo que me toca, cepillar mis dientes, que aunque le pase el cepillo eternamente nunca serán cómo los de Colgate" lavarme la cara, hacer mis necesidades y todo lo que se haga en un baño.

Sí, mi vida es monótona.

Al haber hecho mis necesidades camino al reloj despertador y al ver la hora maldigo mil veces y corro al cuarto de mi hermana. La despierto (o la sacudo cómo mono en carretera) y vuelvo a la mía. Tomo una camisa y ni me preocupo por el pantalón, puedo quedarme el que tengo. Bajo a el garage y o noto que mi hermana Adele hace lo mismo. Ya en el auto Adele manejaba mientras yo reviso en mi computadora un meme de un orangután bebé pintando una banano.

Caray, dibuja mejor que yo.

Pienso con algo de envidia, malditos orangutanes

Así transcurre mi "día a día" un poco monótono, pero está bien, ¡según yo claro! porqué para mis amigos es locura esquizofrenia, sabe Dios que significa.

Suelto un bufido.

A la media hora ya habíamos llegado a Seeker. Ese era nuestro trabajo. Porqué sí, Adele y yo trabajamos juntas. Mis amigos bromean y nos llaman Super Cerebritos ¿porque? Sencillo :

Son unos caradura e infantiles, tal vez tengan problemas cerebrales, pss quien sabe.

Es decir tener 24 y crear a un programa de inteligencia artificial llamado Lucy, que le ganó a tres expertos de un juego llamado world of Destructión y hacer que la noticia fuera viral no es nada, además de que ella es única, por su complejidad podría resolver problemas al instante y tiene un lenguaje propio, lo que resultó ser muy polémico; para ese entonces tenía 23 años, me llamaban la pequeña McCARTHY como "El Padre De La Inteligencia Artificial".

Además, Adele tiene 26 años y no se queda atrás. Me ayuda a desarrollar el lenguaje de Lucy. Eso cualquier ser humano lo podría hacer, es lo más sencillo, de lo más trivial bro.

Pero ignorando todo lo anterior es que no he parado de pensar es en la razón por la que nuestro jefecito bien bonito, Evan Tylor nos ha pedido que vayamos a su oficina a primera hora por un "asunto importante" ese hombre es de temer...

-¡¡Oye Emma¡¡, vamos sal del auto nos quedan 15 minutos para llegar a la oficina de Evan - escucho a Adele.

- ¿Qué crees que sea lo que Evan nos querrá decir? ¿crees que sea algo malo? - mi voz salió preocupada\, más de lo que creí. Siempre me ha importado la opinión de Adele\, porque aparte de mi hermana es mi mejor amiga en todo el mundo\, los otros amigos que tenía eran bien metiches y criticones por demás\, uno se volteaba y ya caían pájaros muertos por los chismes y las brujerías de palabras salían de su boca.

Bueno ni tanto.

- Creo que todo está bien... tú sabes cómo es Evan\, es muy exagerado y le encanta hacernos bromas pesadas ¿Recuerdas esa vez donde fingió que nos despidió? ¡ja¡ parecías un gatito asustado.

Se me escapo una mirada de asesina serial, ese día fue uno de los peores que he tenido, el canalla de Evan papasito Taylor hizo una broma horrenda, casi que me convertía en homicida, puede que al principio fuera a llorar pero si me despedía lo iba a ejecutar. Verán, este trabajo me lo he tomado muy en serio, al llegar me dejo las estupideces y me vengo con seriedades, cómo un agente de la CIA o eso de CIPOL. Al llegar a la puerta principal reviso mi reloj de mano.

-¡Ooh no¡ son las 6:50 ¡run, run, bitch, run, run!

Mis potentes gritos la alertaron y no dudó en seguirme el paso a el ascensor más cercano.  Seleccione el piso 55 y rezando un Padre nuestro esperé. Cuando el ascensor se abrió caminamos por un gran pasillo hasta llegar a una gran puerta blanca. La abrí con mis manos sudadas del nerviosismo y ¡pum¡ todos nuestros compañeros de trabajo posaron su ojos en nosotras. Me imagino que dirás, no es tan malo ¿no? y yo diría al estilo el viejo oeste :

Pobre ignorante. Bueno,eso no se decía en esa época pero imagina que sí.

Si todos, sin excepción, ¡si todos¡ se nos quedan viendo, es malo, dije malo, malísimo.

Nos aproximamos a la enorme puerta gris del fondo del pasillo y cómo un tik nervioso que tenía a veces, llevé mi mano a mi trasero y saqué mi pantis que, se había pegado de mi trasero.

Vaya tik nervioso.

Revisé mi reloj de mano por décima vez, faltaban 50 segundos para que sean las 7:00. Y no, no soy una obsesiva compulsiva, lo que sucede es que este jefe que nos tocó es demasiado puntual. Su lema es: ni un minuto más, ni uno menos; así que aquí estamos Adele y yo esperando a que sean las siete, estaba muy impaciente, y con ganas de patear mear.

La puerta se abrió de golpe y la asistente de Evan, Mikaela nos indicó que ya podíamos pasar. Luego nos dijo que nos sentáramos y salió de la habitación corriendo cómo mariquita.

Cobarde.

Pensé con cierta inquietud. Mikaela no soportaba estar cerca de Evan. Y si quieres saber el porqué, la razón es desconocida, además de ser rarísimo por ser su asistente, tenía que estar de aquí para allá con él, era algo sin sentido.

Volviendo en mí, vi que Evan se nos había quedado viendo con sus azuloootes ojos, ojos cargados de diversión y una sonrisa parecida a la del guasón. Le encantaba hacernos sufrir.

Cómo sea, él era ese característico hombre rubio de revista, ojos azules, tes clara, medía sus unitos ochenta y no podía faltar su cuerpo escultural. Pero su carisma era lo que le daba ese toquesito escultural, perfecto. Era un verdadero espécimen de hombre. Pero solo lo quería a distancia. Verán, el hombre es lo que en todos los países (al menos en los que yo conozco) se le llama Mujeriego, malnacido, bastardo sin gloria... okey olviden el último.

Con ese imponente y musculoso cuerpo se levanto de su silla y se acercó hacia nuestros débiles cuerpecitos, se sentó en uno de sus múltiples escritorios y por fin habló :

- ¡Chicas qué bueno que llegaron puntualmente¡\, las felicito por eso... - la ancha sonrisa que cargaba se apaciguó - Lo que les diré a continuación va para las dos\, ¿bien? - asentimos al unisono robotisadas - Quiero decirles que no ponen todo su desempeño en el trabajo\, he estado observando\, observando todo su entorno\, - un escalofrío recorrió mi cuerpo\, definitivamente ver You me traumó - ¡Pero no sen malpensadas¡ lo digo porque es mi trabajo observar el rendimiento de cada uno de mis trabajadores. Y vi algo que no me gusta ver\, mal rendimiento...

- Pero ev..

- ¿Acaso me interrumpiste?

Interrumpió tajante al escuchar a Adele hablar, con un potente rugido. Los ojos de Adele se aguaron y negó con la cabeza.

A esto los ojos de éste se tornaron más oscuros que antes y su sonrisa volvió a crecer cómo la del guasón.

- Prosigo entonces... he visto unos errores... chicas\, ustedes nunca me han mostrado un solo error - se acercó a mí con los ojos clavados en Adele. Seguro era una especie de táctica para intimidar\, y si era así\, lo lograba al 100% - y... ¡eso me preocupa!\, la verdad es que si no les digo nada esos errores empezaran a crecer\, y se hará hábito para todo el mundo "fallar" lo cual no me lo puedo permitir\, sabiendo ustedes la naturaleza de nuestro trabajo. Emma\, - me llamó sin verme - tu programa de revisión de sistemas tuvo un fallo muy grande\, que sinceramente me dio hasta vergüenza ajena\, ¿cómo pudiste hacer algo tan basura cómo eso? - mis mejillas se coloraron\, y un nudo se instaló en mi garganta - En cuanto a ti Adele\, dijiste que podías con el software de programación\, pero para mi gran sorpresa\, tu trabajo fue mediocre\, ¿porque fue así?\, ¡eso mismo me pregunto yo¡ - Dimos un salto sorpresivo\, - Así que no diré mas para no llorar de decepción\, no quiero volver a ver algo tan mediocre y con fallas ¿entienden? - asentimos otra vez cómo perritas falderas.

Sip, esto fue lo que me omití de Evan, era un tanto agresivo cuando se enojaba, pero si no se enojaba era más buenagente que firulais y los pitufos juntos.

» Pueden retirarse.

Sin esperar otra palabra suya nos fuimos corriendo con vergüenza y decepción de nuestro desempeño. Me sentí cómo un trapo al que usaron para secar una alcantarilla y desecharon cual basura.

Seguramente seremos el hazmereir de nuestros compañeros todo el día. Sería un día largo y malditamente vergonzoso.

Adele y Emma en multimedia.

¿Que les parece?

¿Es malo el libro?

¿Es aburrido?

¿Les parece cliché?

Les aseguro que no les parecerá cliché al paso del tiempo

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Cambio y fuera, que la fuerza los acompañe y chao pescao ¡¡Uwu¡¡

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