El olor de tu sangre.

El bar exclusivo estaba a reventar. Luces violetas, copas caras y gente demasiado ocupada mostrándose para divertirse de verdad. Paula se pavoneaba en el centro como si hubiera comprado el lugar entero, rodeada de su séquito de risas falsas.

Yo ya estaba en la esquina bailando pidiendo las primeras copas.

Clara, por otro lado, parecía caminar sobre nubes. No dejaba de lanzar miradas furtivas hacia Kael, que se mantenía tranquilo, apoyado en la barra con ese aire de “me encanta que lo notes, me haré el desentendido ”.

—Pareces adolescentes en celo —murmuré, tragando del vaso.

—¿Qué dijiste? —preguntó Clara, roja.

—Nada —respondí, rio—. Solo que deberías tener cuidado con lo que deseas. Los fuegos artificiales explotan bonito… hasta que te queman. Y mi hermano es uno de ellos Clara.

Ella frunció el ceño, pero no tuvo tiempo de replicar. Porque fue entonces cuando lo sentí.

El aire cambió. Como si un hilo invisible me jalara el estómago hacia un punto exacto del bar. Un latido que no era mío, una presencia que heló mi sangre.

Lo vi.

En un rincón elevado, medio oculto por las luces bajas, estaba El, un vampiro puro. Rodeado de mujeres que se inclinaban demasiado cerca, risas melosas, copas tintineando. Su brazo colgaba sobre el respaldo, poseído de una intimidad asquerosa, como si cada una de esas mujeres fuera un juguete reemplazable.

Y aun así, él no las miraba a ellas.

Me miraba a mí.

O mejor dicho, me olía. Lo vi tensar la mandíbula apenas un segundo, como si ese olor lo hubiera atravesado. El olor de mi sangre. De mi magia. De lo que soy.

Mi garganta se cerró. Sentí un fuego en el pecho, un rechazo visceral que me hizo apretar los puños. apartando la mirada " No dejes que te consuma"

—Genial —murmuré en voz baja—. Hoy no es mi día.

Él no se movió. No dijo nada. Solo me observó, como un cazador midiendo la distancia hasta su presa.

Yo aparté la mirada con un gesto brusco y me tragué el asco.

—. El mujeriego perfecto, revolcándose en su harén de plásticas. Qué destino tan inspirador, ¿no?

Clara me miró sin entender del todo, al verme murmurar y fijarse donde aparte mi vista, Ahora:El problema era ese: El maldito Vínculo.

Acababa de encenderse en medio de un bar lleno de humanos. Y esa mirada del Príncipe me decía lo peor: que ya no dejaría de seguirme. Y viniendo de un Vampiro Puro estoy jodida.

– Hermano. Tenemos un problema – susurro a Kael en su oído

Frunció el ceño, mirando la dirección donde venían los ojos, él lo sintió y pude escuchar un leve gruñido como si verme con un lobo muy cerca lo encendiera, el aura cambio a una macabra.

– Es hora de irnos. No es nada bueno quedarnos

– Vamos Clara… Sé que querías venir, pero no me siento bien–

Clara asintió preocupada, pero su mirada se derritió con el agarre de mi hermano" Ay amiga discimula"

– ¿Crees que puede seguirnos?-

– No lo sé, estaba muy ocupado con muchas a su alrededor… Vamos por comer y un helado …

Palmeo su hombro, si mi noche se arruinó que por lo menos termine bien y con el estómago lleno. Kael rodó los ojos y nos fuimos, pero nuestros sentidos estaban más que atentos al nuevo Playboy con cara de asesino.

••

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play