La sala común de estudios del edificio 5 estaba parcialmente ocupada por los grupos de la clase de estadística. Había mesas redondas, luz natural y máquinas de café en la esquina. Era viernes por la tarde, y todos se habían reunido para comenzar el primer trabajo del semestre.
Naruto llegó con una sonrisa amplia, sosteniendo dos botellas de té helado y una barra de cereal.
Naruto
¡Hinata! ¡Aquí estás!
Se sentó a su lado sin esperar respuesta, extendiéndole una de las botellas.
Naruto
Pensé que te gustaría este sabor. Es de durazno.
Hinata
G-gracias, Naruto.
Respondió Hinata con las mejillas encendidas.
Kiba y Choji también estaban en la mesa, revisando las instrucciones del trabajo. Choji comía papas con calma mientras Kiba bostezaba.
Kiba
Naruto… te recuerdo que vinimos a estudiar.
Gruñó Kiba, aunque ya estaba acostumbrado a su energía.
Naruto
¡Sí, sí! Solo quería tener un momento amigable con nuestra compañera
Dijo Naruto, girando hacia Hinata con una sonrisa traviesa.
Naruto
¿Sabías que cuando estudias con alguien que te gusta, retienes mejor la información?
Hinata soltó una risa nerviosa.
Hinata
¿Q-que te gusta…?
Naruto
El estudio, claro.
Añadió Naruto con picardía.
Del otro lado de la sala, en una mesa más alejada, los cuatro integrantes del grupo de “los genios” ya estaban acomodados. Shikamaru tenía su laptop abierta, Neji revisaba las instrucciones impresas, Sasuke hojeaba el libro con expresión indiferente y Gaara solo observaba a los demás en silencio.
Gaara
¿Cuál era el nombre del rubio?
Preguntó Gaara de repente, sin apartar la vista del grupo de Naruto.
Shikamaru levantó una ceja.
Shikamaru
¿Naruto? Naruto Uzumaki. ¿Por?
Gaara no respondió. Se limitó a asentir, como si necesitara confirmarlo para algo personal.
Sasuke, que había escuchado la breve conversación, giró levemente el rostro. Sus ojos se posaron en Gaara, que continuaba mirando a Naruto con algo muy parecido a… ¿curiosidad? ¿Interés?
Sasuke apretó la mandíbula.
Sasuke
¿Nos vamos a concentrar o no?
Dijo con tono seco, pasando las hojas de su cuaderno con más fuerza de la necesaria.
Shikamaru
Relájate, Uchiha. Apenas estamos empezando.
Comentó Shikamaru, sin levantar la mirada de la pantalla.
Un momento después, alguien más se unió a la mesa. Suigetsu Hōzuki, con su típica sonrisa engreída, dejó caer su mochila sobre una silla vacía.
Suigesu
Qué reunión tan interesante.
Dijo, mirando de reojo a Gaara.
Suigesu
No sabía que aceptaban gente nueva tan rápido.
Sasuke
Este no es tu grupo, Suigetsu.
Advirtió Sasuke sin mirarlo directamente.
Suigesu
Solo pasaba a saludar.
Respondió Suigetsu, sentándose de todos modos.
Suigesu
Además, quería saber si hoy sí vas a responder mis mensajes, Sasuke.
Sasuke
Estaba ocupado.
murmuró Sasuke, sin emoción.
Gaara observó el intercambio sin intervenir. Shikamaru, en cambio, bajó el volumen de su laptop para escuchar mejor.
Neji entrecerró los ojos, aunque no dijo nada.
Suigesu
Me imagino que estabas muy ocupado con tus tareas.
Dijo Suigetsu, bajando la voz con cierta insinuación.
Suigesu
Aunque antes no tenías problema en contestar, incluso de madrugada.
Sasuke le lanzó una mirada fulminante. Shikamaru levantó las cejas, sin sorprenderse del todo.
Sasuke
Deberías irte.
Sasuke
Como dije, este no es tu grupo.
Suigesu
Tsk, tranquilo.
Suigesu
Solo pasaba a ver si seguías siendo el mismo.
Suigesu
Ya veo que ahora tienes… nuevos intereses.
Miró brevemente a Gaara.
Suigesu
¿O nuevos rivales?
Antes de que la tensión escalara más, Shikamaru decidió intervenir.
Shikamaru
Bueno, esto es problemático… Suigetsu, si no estás asignado a este grupo, deberías dejar que trabajemos tranquilos. En serio.
Suigesu
Bah, qué ambiente tan frío. Me voy.
Suigetsu se levantó, pero antes de irse, le dedicó una última mirada a Naruto al otro lado del salón, que reía con Hinata.
Suigesu
Nunca entendí qué tiene ese tipo…
Y desapareció por el pasillo.
Gaara lo observó hasta que se perdió de vista. Luego, con tono neutro, preguntó:
Gaara
¿Él también es amigo de ustedes?
Shikamaru
Supongo que es amigo de Sasuke.
Sasuke no dijo nada.
*
Naruto
¡Entonces es una cita!
Exclamó Naruto, triunfante.
Hinata
¿Eh?
Hinata lo miró, sorprendida.
Naruto
¡Bueno, no una cita-cita! Solo… podríamos ir a comer ramen mañana.
Naruto
El nuevo lugar que abrió frente al parque. Tú, yo… algo tranquilo.
Hinata bajó la mirada, sonriendo tímidamente.
Hinata
Me encantaría.
Naruto se sintió flotar. Por fin algo iba bien.
Gaara observaba en silencio desde su mesa. Shikamaru lo notó.
Shikamaru
¿Te gusta alguna chica de la universidad?
Preguntó, en un tono casual.
Gaara lo miró por unos segundos.
Gaara
Ninguna.
Shikamaru parpadeó.
Shikamaru
¿Ah, no?
Gaara
Soy gay.
Dijo Gaara sin titubeos.
Gaara
Y sí… hay alguien que me gusta.
Shikamaru no respondió de inmediato. Siguió el rastro de la mirada de Gaara.
Estaba viendo a Naruto.
No había duda.
Sasuke también lo notó.
El cuaderno que sostenía en las manos tembló apenas.
Sasuke
Deberíamos retomar los cálculos.
Dijo Sasuke, seco, conteniendo la rabia.
Shikamaru se acomodó la coleta, como si nada pasara. Pero en su mente, el mapa emocional del grupo se acababa de volver peligrosamente complejo.
Sasuke estaba molesto. Gaara estaba intrigado. Naruto… inconsciente. Hinata… en riesgo. Y Suigetsu… un fuego aparte.
La tormenta no solo se acercaba.
Ya estaba aquí.
Y todos estaban empezando a mojarse.
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