Eran las cinco de la mañana, hora en que los empleados de la rica familia se levantan a ejercer sus labores, cuando sucedió:
Selena
—¡Aaaaaah! ¡No puede ser… está muerto!
Darian
El cuerpo yacía en el pasillo, cubierto de sangre y moretones. Frente a él, una ventana abierta dejaba entrar la brisa de la noche.
El grito rompió el silencio, despertando a todos. En cuestión de segundos, la gente salió corriendo a ver la escena.
guardia de seguridad 1
—¡Señorita Selena! —exclamó alguien al llegar, respirando agitadamente—. ¿Qué ha ocurrido?
Selena
—Ahh… aaah… ¡No lo sé! —balbuceó ella, con la voz temblorosa.
Cesia
Corrió hacia el cuerpo, sus ojos reflejaban incredulidad.
Varisca
El corazón le palpitaba con fuerza, un escalofrío recorrió su espalda, pero aun así salió de su habitación para ver lo ocurrido.
guardia de seguridad 1
—¡POR FAVOR! —una voz autoritaria intentó calmar a la multitud—. ¡Todos tranquilos y no se acerquen demasiado!
De pronto, una carcajada rasgó el ambiente.
Darian
—Ahg… ah… ajajaj… ¡Jajajaja! ¡Hajajajajaja!
El sonido heló la sangre de todos. Nadie se movió.
Cesia
¿Sigue vivo?
Varisca
Darían… ¿te encuentras bien? —preguntó alguien, dando un paso hacia él.
Darian
Un quejido interrumpió la respuesta.
—Agh… tose, tose… ¡Carajo! Ese ladrón sí que es fuerte…
guardia de seguridad 1
¿Qué? Joven… ¿Usted se topó con el ladrón anoche?
Todos dieron un paso atrás mientras Darian intentaba incorporarse.
Darian
(alzando la mirada con fastidio): ¿No es obvio? ¿Creen que me quedaría media noche tirado en el suelo por diversión?
Varisca
(preocupada, acercándose tres pasos): Pero… pero, ¡ese ladrón no te hizo algo más!
Selena
(apretando las manos): Joven, parece que usted no se encuentra bien.
guardia de seguridad 1
Es verdad. Ve a que te atiendan las heridas y luego nos cuentas qué sucedió.
Cesia
Yo iré a alertar al señor Otoniel de lo sucedido.
Varisca
(titubeante): S-sí… Selena, ayúdame a tratar las heridas de Darian.
Selena
Pero, señorita… ¡Usted tiene que asistir a clases hoy! Déjeme ocuparme de esto.
Darian
Mmm... ya fue suficiente descanso. ¡me encuentro perfectamente bien
Varisca
(con angustia): No, por favor… ¡estás así por mi culpa! Deja que Selena se encargue de tus heridas.
Darian
(esbozando una sonrisa cansada): ¿Qué? ¡Esto no es nada!
Se pone de pie, pero antes de terminar la frase…
Ja, me encuentro bie—
De pronto, su cuerpo se desploma.
Varisca
(gritando): ¡Noo, por favor…! ¡Hay que atenderlo!.
guardia de seguridad 1
¡No puedo creer que el ladrón haya pasado por nuestras narices sin que lo notáramos!
Llevan a Darian hasta su cama y le tratan las heridas.
Darian
Entreabrió los ojos. Frente a él, la silueta de una persona lo observaba.
señor Otoniel
Oh… ya despertó.
Darian
(susurrando para sí mismo): ¿Qué…? ¿Señor Otoniel?
señor Otoniel
Joven, cuéntame qué sucedió.
Darian
Intentó incorporarse, pero una mano lo detuvo.
señor Otoniel
Por favor debe descansar no se levante
Darian
(apretando las sábanas con fuerza, soltando un suspiro): Bien… me topé con el ladrón anoche. Me atacó y no tuve más remedio que enfrentarlo.
señor Otoniel
(pasándose una mano por la frente, con los dientes apretados y los ojos dilatados): ¡No puede ser! ¿Cómo burló la seguridad, a pesar de las cámaras en el exterior?
Darian
Señor, temo decir que se equivoca.
señor Otoniel
(frunciendo el ceño): ¿Eh? ¿A qué te refieres con eso?
Darian
Es simple… ¡No es un ladrón cualquiera! Parece que busca algo. Es posible que haya sido contratado por alguien.
señor Otoniel
(una gota de sudor resbala por su mejilla): ¿Qué…? ¿Hablaste con él anoche?
Darian
(encogiéndose de hombros): Mmm, no me dio tiempo de interrogarlo.
señor Otoniel
(tensando el rostro): Entonces… ¿por qué dices eso?
Darian
(esbozando una media sonrisa): ¿Por qué no hacerlo? Me encontraba durmiendo cuando un ruido fuerte me despertó. La ventana se abrió de golpe.
señor Otoniel
(apretando los labios, clavando las uñas en sus palmas): Adelante… continúa.
Darian
Sí, parecía que sabía que usted me había contratado. Intentó llamar mi atención, y yo, como un idiota, caí en la trampa. Me atacó por la espalda. Logré ahuyentarlo… pero a cambio, ¡recibí la paliza de mi vida!
señor Otoniel
Dijiste que podría haber sido contratado por alguien…
Darian
¿Yo dije eso?
señor Otoniel
Oye... ¡Por supuesto que lo dijiste!
Darian
(riendo débilmente): Ah, cierto. Bueno… si de verdad fue contratado, hasta que consiga lo que busca, nunca dejará en paz a la familia Ortega.
señor Otoniel
(su cuerpo comenzando a temblar): No puede ser… ¿Qué debo hacer? Ese ladrón lleva meses atormentando a mi familia…
Con frustración, el señor Otoniel apretó los puños, desconcertado.
señor Otoniel
Sí… Tal vez si refuerzo la propiedad con más cámaras y agentes de seguridad, podamos atrapar a ese monstruo que nos atormenta.
Darian
¡No!
señor Otoniel
¿Ehh?... ¿Cómo dices?
Darian
Hay dos soluciones más fáciles y menos costosas. Una: dele al ladrón lo que quiere.
Dos: déjeme capturarlo, tal como acordamos en el contrato.
señor Otoniel
¿Qué? ¡Estás loco! Mira cómo te dejó, y tú mismo dijiste que no era un ladrón común.
Darian
Señor Otoniel, dígame… ¿Alguno de sus hombres ha logrado siquiera verlo o ahuyentarlo?
señor Otoniel
Espera… ¿le viste el rostro? hmm.
Darian
Nop, taba todo cubierto de negro.
señor Otoniel
Ahora que lo pienso… ¡sí! Eres el único que se ha enfrentado a él y ha logrado ahuyentarlo.
Darian
Sonrió con alivio.
Señor Otoniel, no necesita contratar más personal. Yo me encargaré de capturarlo.
señor Otoniel
(riendo con nerviosismo): Ja, ja, ja… bien, joven. Pero escúchame… si mi familia llega a estar en peligro más de lo normal, no dudes en decírmelo.
Su expresión se volvió seria.
(mirándolo fijamente): Porque ahora… la seguridad de mi familia está en tus manos.
Otoniel se levantó, caminó hacia la puerta y, antes de salir, lanzó una última mirada a Darian.
Comments