Flashback
Pedro Emilio terminaba de cumplir con el pedido de unos de los clientes de su padre, su trabajo requería estar de un lado a otro entregando distintos encargos, como mermeladas, medicinas, artesanías, entre otros, es por ello que su padre viajaba mucho para traer los pedidos de sus clientes.
Ya siendo de noche se dispuso a irse lo más rápido posible, se lamentaba que no iba a poder cenar con Teresita y sus padres, quienes se habían convertido en un gran apoyo desde que sus padres se fueron, de vez en cuando Don Teófilo lo acompañaba aunque no entendía mucho de los negocios.
Ese día lamentablemente tuvo que salir solo ya que Don Teófilo se quedó arreglando las cercas de su humilde morada, ya estaban envejecidas y por el fuerte viento se habían caído, estaba realmente agradecido con él, lo apreciaba mucho como a un padre, siempre fue serio y le daba reprimendas de pequeño, pero ahora que se había hecho un hombre amable, lo considera como un hijo.
Además sus días eran tranquilos al estar junto a la mujer que ama, esa mujer dulce y cálida que le brinda su amistad, a quien puede llegar y contarle todo, sus noches se había vuelto una rutina al contarle de sus negocios y lo que sucedía cada vez que un cliente no estaba conforme, ser escuchado y nunca juzgado por ella lo hacía sentir el hombre mas afortunado del mundo, desea casarse pronto y formar una familia.
De repente su carreta se balancea forzando a detenerse abruptamente, se baja para verificar que todo está bien, revisa cada rueda y las dos últimas están sin aire, suspira cansino, se acerca a buscar para cambiarlas, gracias a Dios su padre siempre lo obliga a llevar repuesto por si surge algún inconveniente.
En lo que baja uno de los repuestos siente un golpe en su costado que lo hace doblarse de dolor, su reacción es buscar con que defenderse, ve al suelo una pequeña rama y la toma en sus manos colocándose de pie agitando la rama para defenderse.
Pedro Emilio: ¿que quieres? No tengo nada que puedas robar.
XXX: jajajaja, no vengo a robarte, vengo solo a advertirte.
Pedro Emilio: ¿Advertirme?
XXX: asi es, alejate de la mujer que vive contigo.
Pedro Emilio: ¿De que hablas?
XXX: Teresita tiene otro dueño, así que alejate de ella, sácala de tu casa y no vuelvas a acercarte a ella.
Pedro Emilio: ¿Eres tú Luis José?, no seas cobarde, muestra tu cara.
El hombre sale de la sombra acercándose, su sonrisa siniestra hace que Pedro Emilio sienta miedo, suena sus nudillos y cuello, como si se preparará para un combate.
XXX: te lo advierto niñato (dice con acento desconocido) alejate de la mujer o sino morirás.
Pedro Emilio: no me voy a alejar de mi prometida, ella es mía, pronto sera mi mujer.
Sabía que sonaba como un posesivo, pero no le daría el gusto a nadie de adueñarse de su amada como si fuera un objeto, no dejaría que nadie le haga daño, mucho menos el bruto de Luis José que no supo valorarla.
El hombre se acerca y se enfrenta a Pedro Emilio, este logra darle con la rama, pero se la arrebata bruscamente haciéndolo caer de boca al duro suelo, el desconocido aprovecha y lo toma del tobillo arrastrándolo hasta los matorrales, Pedro Emilio forcejea, lanza patadas dispuesto a liberarse, una vez lo suelta intenta levantarse, pero es pateado varias veces en sus costados.
XXX: está claro que solo deseas morir.
Lo toma del cuello de su camisa acercando su rostro, Pedro Emilio toma con fuerza sus manos tratando de alejarlo, el hombre aprieta su agarre y le lanza una mirada asesina.
XXX: no busques una desgracia, atiende a lo que se te dice, no es bonito morir por una mujer.
Pedro Emilio: esa mujer de la que hablas, es mi mujer, ¡mía!
El hombre en su rabia lo tira al suelo y comienza a darle golpes uno tras otro, Pedro Emilio coloca sus brazos en forma de escudo para amortiguar algunos golpes, le propina patadas hasta que se cansa, su semblante es uno que asustaría a cualquiera menos a Pedro Emilio quien estaba decidido a no dar su brazo a torcer.
XXX: Si en unos días no te has alejado de ella, te buscaré y te mataré, si alguien se interpone lo mataré también.
Se aleja dejándolo solo, como puede se levanta y se va caminando a su casa con mucho dolor, no estaba tan lejos, cruzo algunos atajos y llegó casi a punto de desvanecer del dolor, como pudo abrió la puerta y se dirigió a la habitación de Teresita, necesitaba verla, ella sería la única medicina para su dolor, el solo ver su rostro lo calmaba.
Fin del Flashback.
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Updated 45 Episodes
Comments
Rayza Rojas
dice el dicho "todo malo es cobarde", siempre se amparan detrás de algun pendenciero que por unas cuantas monedas hace el trabajo sucio
2025-02-14
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Carola Videla🇦🇷🇦🇷🇦🇷🇦🇷
que cobarde hdo, ni siquiera dio la cara mando a alguien
2025-01-29
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Rita García
que bárbaro pero eya debe ouedeser porque si no lo van a matar
2024-11-15
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