Todos tienen un precio.

_ Ven aquí _ dijo Vincenzo con voz profunda, señalando la silla frente a él.

Gio asintió y se acercó, luego dejó caer su trasero en su asiento designado.

Pronto, dos sirvientes vinieron con comida y les sirvieron el desayuno. Gio casi lloró cuando vio toda la buena comida frente a él. Ha pasado muchísimo tiempo desde la última vez que comió decentemente. Ser sirviente en la mansión y la torre significaba que solo comía debes en cuando y no todo era disponibles, ya que aquí eran los más bajos en la cadena alimentaria.

A veces, si el Alfa estaba ocupado con sus deberes de Alfa y tenía que ir a realizar algunos trabajos durante varios días, él podía tomarse un respiro de servirle. Comería lo más cercano y no comería carne asada y alimentos buenos, solo si tenía suerte y los encontraba en la heladera.

_ Tienes que decirle al cocinero qué comida te gusta, para que te la prepare _ dijo Vincenzo mientras levantaba su copa y el sirviente rápidamente la llenó de vino.

_ ¿Eh? _ Gio no esperaba que el Alfa dijera esas cosas. ¿Estaba soñando? Quizás estaba dormido y soñó todo.

No había manera de que el Alfa de la manada Black-moon le pidiera que nombrara sus platos favoritos para que su chef personal pudiera preparárselos...

_ Tengo un paladar exquisito. Quizás él no pueda preparar mis platos favoritos _ dijo Gio. La verdad era que hacía meses que extrañaba la tarta de manzana de su madre. A veces lloraba solo, únicamente de pensar en ello.

Pero... él no debería confiar en ningún alimento del Alfa . Él sólo comería cualquier cosa que él comiera, nada más. ¿Y si lo envenenara?.

_ ¿Estás menospreciando a mi gente? _ El Alfa entrecerró los ojos peligrosamente _ Significa que tú también me estás menospreciando. ¿Estás diciendo que no soy capaz de mantenerte?.

Gio también entrecerró los ojos. No entendía que quería realmente el Alfa de él.

_ ¿Por qué quieres alimentarme? ¿Estás tratando de engordarme antes de sacrificarme como un pollo? _ Gio se burló.

_ Tch...

El Alfa puso los ojos en blanco en respuesta a las palabras de Gio.

_ Estás demasiado delgado para dar a luz a mis hijos. Necesito que subas de peso un poco más.

Gio tiró su vino cuando lo escuchó. Muy bien... parecía que no estaba soñando. Escuchó al Alfa decir lo mismo anoche. Quería que él fuera la madre de sus hijos.

Si no fuera el Alfa encarnado, Gio podría haber considerado su "propuesta indirecta" como algo romántico. Sin embargo, no... él era su enemigo mortal, y no debería permitir que esos encantadores ojos dorados lo desviaran de su objetivo.

Entonces, ¿esto significaba... que hablaba en serio?.

_ ¡Qué descarado! ¿Qué te hace pensar que daré a luz a tus hijos? Sabes que vine aquí para matarte... _ Gio miró fijamente al Alfa con audacia.

Sí, ya no era el hijo de la manada enemiga después de que sus padres fueron atacados por los subordinados de este Alfa asqueroso y su familia fuera destituida completamente, pero aún conservaba su orgullo. No permitiría que nadie lo redujera a un Omega reproductor.

El heredero de la manada Black-moon miró fijamente a Gio y las comisuras de su boca se torcieron un poco como si reprimiera una sonrisa. Después de todo, él era el Alfa . No debería permitir que este humilde sirviente pensara que se había vuelto blando. Por eso contuvo su sonrisa.

La verdad era que este Omega era muy bonito y su puchero y su comportamiento agresivo sólo aumentaban su encanto. Vincenzo estaba herido, pero no lo admitiría. Se aclaró la garganta.

_ Dime tu precio _ dijo finalmente _ Cada uno tiene su precio. No creo que seas tan especial como para no querer nada en la vida.

Gio frunció el ceño.

_ ¿Mi precio? ¡Cómo te atreves!.

_ Puedes decirme tu precio o buscaré otro Omega que cargue a mis hijos y ordenaré a los guardias de la torre que te lleven delante de toda la manada para decapitarte.

Gio : "..."

[Increíble. Este Alfa es demasiado astuto]

Gio se quedó sin palabras. Entonces, él básicamente no tenía otra opción. Era su cabeza o su útero.

Finalmente, suspiró y miró hacia otro lado. Odiaba a este Alfa por imponerle su voluntad. Sin embargo, él era muy consciente de su posición. No estaba en un lugar donde tuviera poder de negociación.

El Alfa podría necesitarlo para dar a luz a sus hijos por cualquier motivo, pero él no podía tentar la suerte. También podría deshacerse de él y encontrar otros Omegas que le dieran hijos, entonces... él podría despedirse de su cabeza con un beso.

[Es mejor simplemente decir que sí por ahora y luego encontrar una manera de escapar]

_ Bien, tú ganas _Gio dejó su copa _Tengo mi precio..

_ Dilo.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***