capítulo 10- provocación...

La reina estaba molesta, ya supo que el rey hizo que Valentina firmara el acuerdo de ruptura de su compromiso con Alvin, por lo que el rey ahora planea anunciar el compromiso de Frida y Alvin después del festival de aniversario, al menos tiene hasta ese día para que Frida se comprometa con Maximiliam.

Por otro lado, Frida se ha reunido con Alvin, quien le cuenta que finalmente su compromiso con Valentina se ha roto y ahora, pueden casarse tal y como llevan planeando hace dos años cuando se confesaron sus sentimientos y decidieron mantener su amor en secreto. Frida se muestra feliz, aunque recuerda esa noche que vio a Valentina y Maximiliam salir del mismo sitio, lo cual realmente le molesta, porque Maximiliam es el único que no le presta atención y cuando se encuentran, el rubio simplemente es indiferente. Alvin se encuentra con Frida en el jardín.

— después del festival, finalmente podremos anunciar nuestro compromiso.— dice Alvin sosteniendo las manos de Frida entre las suyas.

—¿de verdad? Pero, ¿mi hermana aceptará esto? Tengo miedo de que no se quede tranquila, desde que llegue me culpa por quitarle todo.— agacha la mirada.

— no lo hará, si lo intenta me tiene para protegerla y sus majestad también cuidarán de usted.— Alvin se acerca para darle un beso en la frente.

Pero, desde la ventana, la reina los observa molesta, no puede creer que su hija no tenga aspiraciones más altas y se conforma con un simple estatus de duquesa, así que debe de alejarla de ese chico, no se piensa rendir, su objetivo es que Frida se case con Maximiliam.

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La reina fue en busca de Maximiliam, si le habla directamente sobre un compromiso, podrá convencerlo de considerar a Frida como candidata a esposa, pero se lleva una gran sorpresa al ver que en la sala de té de invitados, estaba Maximiliam acompañado de Valentina.

Esto solo hizo que la reina se sintiera furiosa, no comprende como el príncipe de un imperio tan importante, estaría cerca de Valentina, quien solo es una hija adoptiva. Tras saludar con una reverencia a Maximiliam, observa a Valentina con frialdad.

— veo que ha conocido a la princesa Valentina, mi hija adoptiva.— finge una sonrisa.

— así es, nos conocimos cuando ella huía de unos bandidos camino al reino y debo decir que creí que había encontrado a la más bella hada del bosque.— responde Maximiliam.

Valentina puede notar que esas palabras las dijo con la intención de molestar a la reina, Valentina cubre sus labios con el abanico que lleva en la mano para ocultar su sonrisa.

— claro...es linda, aunque es una pena que sea solo adoptada, lamentablemente aunque tenga estatus de princesa, lleva la sangre de plebeyos.— menciona con enojo.

— no tan lamentable, sus padres quizás fueron plebeyos, pero no cabe duda que fueron personas atractivas si dejaron una hija tan hermosa.— insiste en halagar a la albina.

Esto solo causa mayor enojo en la reina.

— es verdad, aunque su belleza no se compara con Frida, porque no solo es bella, es educada y de buen corazón, será afortunado quien pueda casarse con ella.— observa a Valentina con una sonrisa maliciosa.

— ¿en serio? Espero que un día encuentre a ese afortunado, ¿usted que piensa princesa?—

— pienso que mi hermana ya lo encontró, ayer me reuní con el rey para romper mi compromiso con el joven duque y después del festival se anunciará su compromiso de él y la princesa Frida.— Valentina levanta la mirada triunfante.

La reina se quedado estática al escucharla, nunca imaginó que Valentina le lanzaría un ataque así, justo frente al príncipe de Trois Blanc.

— ¡oh! Entonces debo ser afortunado, usted ha quedado libre.— responde Maximiliam sosteniendo la mano de Valentina y dejando un beso el dorso de esta.

La reina estaba a punto de sufrir un ataque de ira al ver todo eso.

— en realidad a la princesa Valentina ya le hemos encontrado un prometido más adecuado para ella, es un conde, conocido de mi familia.— responde rápidamente.

—¿un conde? ¿Por qué tan poca cosa? Yo creo que su alteza merece más, una belleza como ella, siento que fue hecha para mí. Tal vez deba pedir su mano al rey.—

Valentina se estaba divirtiendo al ver como Maximiliam le lleva la contraria a la reina, quien no sabía ni que hacer y estaba perdiendo la cordura.

— me halaga alteza, y yo, no le diría que no.— responde Valentina.

— de ninguna manera, Valentina no puede casarse con usted, de eso me encargo yo.— grita furiosa la reina.

Tras decir esto, la mujer sale a toda prisa de ese lugar, debe hacer algo rápido, no permitirá que Valentina le quite lo que es de Frida, su hija es la única que puede casarse con Maximiliam.

— alteza, no sabe cuanto se lo agradezco, ahora gracias a usted, la reina tiene más razones para deshacerse de mi.— responde con calma.

— ¿no es eso lo que lo hace más divertido? Mi madre tiene un truco, hacerlos enfadar, para que sus acciones sean más torpes.— Maximiliam muestra una sonrisa burlona. — así que solo le estoy ayudando.

Valentina no dice nada más, pero le corresponde aquella sonrisa, parece que el príncipe es tal como lo describen en la historia, alguien arrogante y lleno de malicia.

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La reina esa misma noche acudió con el rey, para pedirle que rechace el compromiso de Frida y Alvin, porque Valentina esta aprovechando que su compromiso se rompió para ir de ofrecida al príncipe Maximiliam.

— Frida es nuestra preciada hija, no podemos dejar que su estatus baje.— se queja.

— ser duquesa no es un bajo estatus y es un matrimonio asegurado.—

— pero es mejor si mantiene su estatus de princesa y lo mejor sería que fuera una princesa del imperio.—

— es verdad que subiría su estatus, pero no es nada seguro, la reputación del príncipe Maximiliam, deja mucho que desear.— siendo el rey tiene ciertos conocimientos sobre la familia imperial.

— eso lo dejará una vez se case con nuestra hermosa hija, ¿que clase de hombre le sería infiel a nuestra niña? Es hermosa, educada y amable, una muy buena esposa, ella nos dejaría bien ante los emperadores.— menciona emocionada.

El rey se queda pensando, ciertamente sería buena idea pertenecer de alguna forma a la familia imperial, de ese modo su reino resaltaría entre otros.

— majestad, piense bien, nos conviene, no dejemos que Valentina siga de ofrecida, eso solo nos causará mala reputación.— asegura la reina.

— le diré a Valentina que se mantenga lejos de su alteza, ciertamente no puedo dejar que manche la reputación de la familia. En cuanto al compromiso de Frida, lo pensaré, usted sabe que el duque Cremond es un buen amigo mío.—

Y detener el compromiso entre Alvin y Frida, podría ocasionar el disgusto del duque.

— se que hará lo correcto, confío en su buen juicio majestad.—

La reina sabe que no es fácil convencer al rey, pero si lo que ella planea le da más poder, esta segura que logrará convencerlo. Mientras tanto, la reina va en busca de Omar, tiene que hacerle saber el mal comportamiento de Valentina, para que ya deje de estarla defendiendo, es hora de que habrá los ojos y se de cuenta que Frida es su hermana de sangre y es a ella a quien debe proteger y darle lo mejor.

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