Akira

Mientras íbamos de camino a casa, regresaron a mi mente aquellos bellos ojos y aquel hermoso rostro, la mirada tan triste y al mismo tiempo tan necesitada de algo, recordé el rose de su mano con la mía, y la forma en que me apretó, aun lo podía sentir en mí, mire mi mano y sentí en mi pecho algo que nunca había sentido, latía con mucha fuerza, latía como si quisiera decirme algo, se sentía tan agitado que parecía haber corrido algún maratón, y solo porque de pronto pensé en ella.

¿Qué me querrá decir?

— Akira, ¿ocurre algo? — pregunto Lea mientras me observaba por el rabillo del ojos, sin perder la concentración del volante.

— ¿Ah? — respondí confusa.

— ¿Qué si ocurre algo? — volvió a preguntar.

— No, no ocurre nada y disculpa hace un rato no estaba escuchando, ¿decías algo? —

— No creo eso de que no ocurre nada, estas muy pensativa — dijo — ¿Qué sucede? —

Ella tenía razón algo me estaba sucediendo, pero el problema era que no sabía exactamente que era, o por que una persona que no conocía en absoluto me podía poner en esta encrucijada. ¿Quién era esa chica?, no, es la pregunta equivocada, en realidad debería estarme preguntando ¿Por qué sigo pensando en ella?

— ¿Ves?, sé que ocurre algo — insistió una vez más.

— No, es que la verdad ni yo sé que está pasando por mi cabeza — le respondí sinceramente, sin dejar de mirar mi mano.

—¿Por qué estas mirando tu mano de esa forma? — pregunto.

— No lo sé — dije, mientras me giraba para mirarla, la vi y tenía el ceño fruncido.

— Yo sé lo que te está pasando, y es que sigues pensando en lo que sucedió en la plaza, esa chica ha despertado tu lado curioso y ahora quieres saber todo de ella ¿no es asi? Akira. — afirmo.

Abrí los ojos como plato, estaba muy sorprendida de que supiera exactamente lo que sentía, pero también era obvio, ella es mi mejor amiga y la que mejor me conoce, podría decir que me conoce mejor que yo misma y sus palabras no podrían ser más acertadas.

— Tienes razón, pero no logro descifrar por estoy tan interesada en ella — le respondí un poco desanimada.

—Tranquila Ki, dale tiempo al tiempo y déjalo que él se encargue de darte la respuesta — dijo.

Dios como podía ser tan sabia, Lea siempre tenía algo que decir, era una chica muy centrada y era muy madura, había tenido una vida muy dura y a diferencia de Emili y yo, ella parecía una mamá que siempre estaba cuidando a sus polluelos, me sentía segura cuando estaba con ella, pero, si necesitaba un consejo solo debía llamarla a ella y me daría los mejores consejos del mundo.

—Tienes razón, intentare darle tiempo al tiempo — le dije no tan convencida, porque quería encontrarla, quería buscarla y quería verla.

— Si no te conociera, diría que tus palabras sonaron poco convencidas — me dijo a lo que me sorprendió aún más.

— ¿Cómo es posible que me conozcas tan bien?, pero es verdad, Lea ¿dime que puedo hacer? La he visto por primera vez hoy, y por no menos de diez minutos, ella ha logrado desestabilizarme completamente, y aun que toda la comida trate de ocultarlo en verdad quería salir y ver si se había ido de la plaza, ¿crees que me he vuelto loca? — exprese.

—No creo que estés loca, es simplemente que eres demasiado curiosa y cuando algo se le mete en la cabeza a Akira no se le sale nunca más — dijo y empezó a reír.

Soy muy curiosa, sí, es verdad, no dejo algo hasta que le busco pies, manos y cola, pero esto era diferente, el sentimiento era distinto, pero no sabía cómo explicárselo a Lea, porque solo de oírlo en mis pensamiento me oigo y parezco una loca, porque este sentimiento, esto que se había clavado en mi mente y en mi corazón, me producía una sensación como si miles de mariposas revolotearan en mi estómago.

El camino a casa se me fue como un relámpago, no me di cuenta en qué momento Lea aparco el coche en el frente de mi casa, si no fuera por su insistente voz que me hablaba.

—Akira, ¿Akira? Hemos llegado a tu casa— gritaba.

—¿Ah? — respondí

— ¿Qué hemos llegado pequeña? —

— Oh, lo siento — dije y me bajé.

— Espera Akira — me grito ella desde el interior del coche.

Me gire hacia ella — ¿Qué pasa?

— Pequeña sabes que lo momentos fugases son para atesorarlos siempre, no le pienses tanto a las cosas y déjalas ir. Ahora debes de concentrarte en tu nuevo comienzo, seguramente este día va ser uno más en tu nuevo futuro. Animo pequeña — dijo, arranco el coche dejándome ahí sin poder responder a sus palabras.

¿Momentos fugases?, no, no quería que fuera un momento fugas, ella, ella era más, sabía que era más, estoy segura que también sintió lo mismo que yo sentí cuando nos miramos.

Esa chica, debía de volver a verla. ¿dejarla ir? Absolutamente no.

— ¿QUIEN ERES? — grite a todo pulmón.

— ¿Te has vuelto loca?, ¿Qué haces gritando en plena calle? — se oyó la voz de mi madre a mis espaldas.

— ¿Ah¡? Ma — respondí con una risilla para disuadirla.

— Olvídalo, entra niña, papá está esperando para que comamos todos junto, tu hermano ha llegado a casa — me dijo y me emocione tanto que entre corriendo a casa sin esperarla.

— ¡Chris!, ¡Chris! — entre gritando a casa.

Tenía mucho tiempo que no veía a mi hermano y lo extrañaba un montón, desde que decidió ir al extranjero no había vuelto a casa, pero ahora algo lo hizo regresar.

— ¡Pequeña cachorrita! — amaba su voz, extrañaba que me llamara asi.

— Hermano, te extrañe un montón, hay tantas cosas que quiero contarte — dije mientras me aferraba a su cuerpo.

— Cachorrita yo también te extrañe muchísimo. — dijo mientras me estrecha en un fuerte abrazo, que en estos momentos lo estaba necesitando un montón, y clave mi rostro en su pecho, aspirando su olor, era mi hermano, mi consuelo y mi lugar seguro — Por cierto, mamá y papá me han dicho que por fin lo lograste entrar en el Master Legenda, ¿es verdad? — hablo mientras me alejaba un poco para verme a los ojos.

— Es verdad hermano, por fin lo he logrado — le dije orgullosa.

—Que orgulloso estoy de ti Cachorrita — dijo y deposito un tierno beso en mi frente.

De verdad que tenía el mejor hermano de todo el mundo, aparte era muy guapo, amable y si muy, muy guapo, él era todo lo que necesitaba para estar tranquila, y ahora mucho más, con el cambio de escuela y con los eventos que están por venir con la familia amiga de nuestros padres, al menos lo tendría cerca de mi para no sentirme sola.

También podía contarle a el sobre esa chica y tal vez pueda hacer uso de sus habilidades como hacker para que me ayude a entrarla.  Que cosas estoy diciendo como puedo usar a mi hermano para encontrar a alguien que solo he vito una vez.

Mejor lo olvidare, sí, mejor lo olvidare.

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