Ama
Después del beso me encerré en el baño, no podía creer que hubiera dejado que me besara y para ser sincera me encantó, creo que tengo el síndrome de Estocolmo, creo que me estoy volviendo loca, este hombre me ha tenido encerrada por cuatro años y aun así me atrae, no tarde mucho en el baño estaba muy cansada y quería dormir, cuando salí él ya estaba acostado mirando en mi dirección, rodee la cama y me acosté en él otro lado, cuando lo siento abrazándome, no me resistí igual tenía que acostumbrarme, a la mañana siguiente me despertó ese ruido infernal y entre una cosa y otra Gabriel me pidió trabajar para él, yo acepté gustosa, pues debía aprender mi oficio pues si en un futuro Gabriel me deja libre podría yo misma salir a enfrentar el mundo.
Llegamos a la oficina y el mismo me llevo al área de diseño, estaba muy encantada de estar ahí y mis compañeros eran muy amables, obviamente tenían que serlo si no Gabriel los despedirá.
Miguel y Danna eran los diseñadores principales y la señora María y la señora Ada eran sus asistentes, empecé a trabajar con ellos estaba muy emocionada, aprendí mucho en estas pocas horas también sugerí ideas, era un ambiente bastante cálido, por lo que entendí se acerca un desfile de modas y todos están muy presionados.
A medio día Gabriel bajo por mí al área de diseño, los empleados empezaron a susurrar al parecer este muy poco bajaba aquí.
Gabriel: buenas tardes a todos, disculpen si los molesto, solo vine por mi prometida.
Me quedé con la boca abierta cuando pronunció aquellas palabras, me despedí de todos y me acerque a Gabriel, este sin ningún pudor beso mis labios y me abrazó muy fuerte.
Gabriel: ya te estaba extrañando.
Ana: y yo a ti.
Debía seguir con la farsa así que solo le seguí la corriente, salimos de la empresa según Gabriel teníamos una invitación a almorzar, llegamos a un restaurante muy elegante y entendí el porqué de mis clases de glamour, obviamente ahora debía acompañarlo a todos lados y no podía comportarme como una campesina ignorante.
El mesero dos condujo a una sala privada donde un señor mayor y una joven muy bonita nos esperaban.
Gabriel: buenas tardes, señor Fernando, señorita Alicia, espero no hayan esperado mucho.
Fernando: no te preocupes Gabriel acabamos de llegar.
Alicia: hola Gab tiempo sin verte.
Esta mujer me ignoro por completo y se lanzó a abrazar a mi novio, obviamente no iba a armar un escándalo, ojalá y él se fije en otra y a mí me deje en paz.
Gabriel: les presento a mi prometida Ana Leal, amor ellos son Fernando Marcano y su hija Alicia Marcano.
Ana: un gusto conocerlos, Ana Leal prometida de Gabriel.
Estás últimas palabras las dije mirando a la estúpida esta, con la sonrisa más fingida que pude sacar. Nos sentamos a la mesa y empezamos a platicar, ese señor no me quitaba la vista de encima y ya me estaba incomodando, mientras que la estúpida esa no dejaba de coquetear con Gabriel, este es el almuerzo más incómodo que había tenido.
Fernando: dígame señorita Ana de donde es usted?
Ana: de un pequeño pueblo afuera de la ciudad.
Alicia: jajaja Gabriel te vas a casar con una pueblerina.
Ana: y no me avergüenza decirlo, y a pesar de ser una pueblerina como usted dice me sé comportar y no ando coqueteando con hombres ajenos, Gabriel amor ya me quiero ir aún tengo mucho trabajo.
Gabriel: está bien amor vámonos, señores disculpen mi mujer es más adicta al trabajo que yo.
Salimos agarrados de la mano del restaurante a lo mejor no fue el mejor comportamiento que he tenido, pero no podía dejar que esa mujercita me humillara y de paso le coqueteara a mi novio, pues no lo permitiría estaba furiosa y creo que Gabriel se dio cuenta pues no dijo nada, cuando llegamos al auto me tomo por la cintura, se puso frente a mí y me besó.
Gabriel: te ves hermosa cuando te enfadas.
Ana: quien te dijo que estoy molesta.
Gabriel: a no y entonces eso que fue?
Ana: no voy a permitir que nadie venga a humillarme y menos esa arpía.
Gabriel: sube al auto te voy a compensar este amargo almuerzo.
Ana: no es necesario, además llegaremos tarde a la oficina.
Gabriel: solo serán cinco minutos.
Ana: está bien como diga su majestad.
Gabriel no dijo nada más hasta que llegamos a una heladería, me dio unas instrucciones al chófer y este se bajó del carro, me quedé mirando por la ventana está ciudad es muy grande y bonita me gustaría un día poder caminar por las calles pensé.
Gabriel: pagaría toda mi fortuna por saber que estás pensando.
Ana: entonces no sabes hacer negocios, ya que si supieras lo que pienso te arrepentirás de haber dado tanto por nada.
Gabriel: tú nunca piensas en nada vacío, siempre tienes algo que decir que tiene fundamento.
Ana: no es nada créeme.
La puerta del auto se abrió y el chófer le entrego a Gabriel un par de helados, abrí los ojos como platos pensé que vendríamos aquí para otra cosa más nunca para comer helado, me encantó este detalle.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 41 Episodes
Comments
Maura Pericana
creo que es síndrome de Estocolmo
2024-12-10
0
Zonia Guzman
Yo creo que la alicia es mala y la debió vender o mandar secuestra esa no es propia hermana
2025-01-26
2
MALÚ 2834
De boca hacia fuera
2024-08-01
3