Dame una explicación Einar.- la mujer se cruza de brazos y nos mira a los 2, él se ríe y blanquea los ojos, en serio, como usa todo a su favor, te produce desequilibrio mental.
- No tengo que darte ninguna explicación.- me mira y frunce sus hombros, ¿por qué me mira a mí?
- Claro que sí, hemos estado juntos por años.- lo señala con un dedo.
- Sí hemos estado juntos, también estabas embarazada, y después resulta que no había ningún bebe, y así hasta que te cegaste por el dinero, y me fuiste infiel con mi amigo, yo ahora tengo muchísimo y él está en la ruina, ¿por eso has venido?.- se ríe de lado y pone sus manos en mis rodillas, me guiña un ojo, ella por su parte tira una silla y grita.
- Estás demente, no sé de qué hablas, deliras!.- esta roja de vergüenza y odio, aprieta sus puños de rabia.
- Siii muy loco estoy! Ahora te voy a pedir que te vayas y no vuelvas, mi mujer y yo estamos ocupados.- le extiende la mano para que se retire, antes de salir tira unos adornos que había y sale dando un portazo.
- Quién es?.- parezco mi abuela de curiosa.
- Un ser despreciable que se atravesó en mi camino.- vuelve a reír y busca mis labios, nos besamos y me carga hasta la habitación.
- Cierra la puerta no quiero más intrusos.- estoy tirada en la cama y él de píe, sale de la habitación y yo aprovecho para ponerme un conjunto de encaje, medias de red, porta ligas, abre la puerta y me ve, sus ojos se abren como plato, y me repasa todo el cuerpo con lentitud, trago grueso y me muerdo el labio, Él se va acercando y se va desnudando, es hermoso no se puede discutir eso!, cuerpo perfecto, piel perfecta,rostro, todo, no tiene un defecto, bueno alguno debe tener, ¡es humano y hombre!, se tira en la cama y me hace el amor por horas, hasta que me arde todo.
- Agua por favor!.- tengo sed, calor, estoy despeinada, sudada, colorada, impresentable, caigo a la almohada y él se levanta por agua, me levanto al baño a hacer mis necesidades y me sale sangre.
- Ay nooo!!!! ¿Estoy lastimada o me vino?.- limpio todo, y decido ir a buscar en mi bolso unas toallas higiénicas, me pongo la ropa interior y vuelvo a la cama, cuando entra abre los ojos de sorpresa.
- Un pequeño percance sucedió.- hago una mueca y estiro la mano a recibir el vaso, me lo da y se va al baño, al rato sale bañado con una toalla en la cintura, busca un bóxer se lo pone y viene a la cama conmigo.
- Estas bien?.- esa voz por dios!, me agarra de los brazos y me pega a su pecho.
- Sí, sí, todo está bien, ¿te puedo hacer una pregunta?.- paso los dedos por su torso.
- La vas a hacer lo mismo.- su mano acaricia mi brazo y cabello.
- A qué te dedicas?.- levanto la vista y lo miro, se queda un rato en silencio, moviendo los dedos de sus pies.
- Comercio, agricultura, ganadería, rentas, todas las cabañas que viste ellos me alquilan.- habla por encima, no ahonda en el tema.
- Yo soy modelo de ropa interior, y estudiante de Historia, mi meta es viajar y escribir sobre todo, hoy por hoy me tocó el tema Vikingos, luego Egipto no sólo las pirámides si no donde habitaron los esclavos, India sus especias, creencias, ahondar en lo no común de los libros, salirme un poco.- río ilusionada.
- Si veo que eres de salirte un poco, desafiar las normas.- me da una nalgada y yo me río luego frunzo el ceño.
- Se respetar los límites, ya te lo dije, no tenía ni un día aquí, pregunte a un nativo y esto me dijo, se que lo prohibido llama la atención pero si mi vida esta en riesgo jamás lo haría, ¿acaso tú nunca rompiste las reglas?.- lo miro profundamente.
- Todo el tiempo lo hago.- jamás corta su contacto visual.
- Y por qué me castigaste a mí? Soy mujer con haberme interrogado tú alcanzaba.- relamo mis labios y él me mira, como intentando descifrarme.
- Sabía que no eras una amenaza, simplemente fue una lección para que veas que todo trae sus consecuencias.- toma mi rostro.
- Que consecuencias?, si yo no hice nada!.- elevo mis hombros.
- Los teléfonos te alertan cuando un lugar está prohibido o no?, tu atravesaste lo mismo.- intenta reír, yo me pongo roja de vergüenza acerca mi rostro y me besa, no cortamos el beso hasta que mi teléfono suena, me quedo sin aire, puede ser Martín, me enderezo y empiezo a temblar, lo tomo y veo que es un número privado, es él atiendo pero no hablo.
- Hola Renata!.- esa voz que odio escuchar.
- Qué mierda quieres?.- aprieto el teléfono con fuerza.
- Por qué esa forma de tratarme? No te alegras de escucharme?.- ríe como loco.
- No! Deja de molestarme.- respiro con fuerza.
- No te conviene colgar, entra a mensajes y fíjate la foto.- pongo en altavoz y entro, varias fotos de Leila en un boliche esta hablando con un chico.
- No es linda? Más linda se va a ver cuando la droga que le puso mi amigo en su bebida haga efecto, ¿Qué crees que le va a pasar cuando mañana despierte desnuda?.- se me resbala de las manos, y empiezo a llorar con bronca.
- Estas enfermo Martín, ve a ver un psiquiatra.- aprieto los puños, busco el número de mi amiga y la lleno de mensajes, hasta el punto de desesperarme.
- No te va atender! La música no te deja escuchar!, o podemos hacer un trato, donde yo tire su bebida y ella se vaya por sus propios medios a su casa!.- se siente ruido, están en el mismo sitio, esta fuera de sí.
- Te voy a denunciar, lo juro.- estoy sentada en el suelo, ¿que mierda voy hacer?.
- Bueno que la policía llegue rápido,JA, JA, JA.- esa carcajada de enfermo que tiene, Einar intenta tomar mi teléfono y yo lo alejo, tapo el auricular...
- Más daño le va a hacer si se entera que estoy con alguien.- apoyo mi rostro en el colchón y grito, de bronca he impotencia.
- Dame, déjame que lo rastreo.- me susurra en el oído, yo levanto el rostro y se lo cedo.
- Dónde estás?.- a ver si me dice algo, Einar esta con otro teléfono en su mano, ni enterada que tenía.
- Por qué?.- creo que se dio cuenta.
- Para ir Martín, para que va a ser?.- suspiro fuerte.
- Venir?.- su voz denota desconfianza.
- Acaso no quieres eso?.- mi voz empieza a temblar.
- En el mismo boliche de siempre, donde veníamos juntos, donde venis con tus amigos, aunque no lo creas yo voy a cada sitio que me recuerde a ti.- yo blanqueo los ojos y hago mueca de desagrado, tomo el teléfono y escribo la ubicación, él se levanta de la cama y sale de la habitación, yo lo miro sin entender nada.
- Iré!.- suspiro, claro que es mentira, pero necesito que se lo crea.
- Mentira, estas de viaje!.- ¿cómo lo sabe?.
- Ya volví.- hablo en susurro, tengo que hacerle creer todo.
- Voy donde estas!.- necesita un medico urgente.
- No, porque es en la casa de mi madre, voy yo, y luego vamos a tu departamento o simplemente hablamos ahí.- no levanto la voz.
- A mi departamento.- las arcadas se me suben a la garganta, venía tan bien, hasta que el verme en el gimnasio se complico todo.
- Okey, pero que Leila no nos vea, si no le dirá a mis padres.- uso esa voz que tanto le gusta y se cree todo, ahora soy yo la que usa esa psicología.
- Me encanta cuando te pones así de traviesa! Ponte ropa interior de encaje y ven con algo de cuero.- lo da por sentado que haremos algo, se siente que está bebiendo, no se emborracha tiene control, yo si me ponía ebria y él no, es tan astuto.
- Bueno, llevaré ropa me quedaré a dormir contigo.- suspira contento, cree que ganó.
- Quédate bastante días, la pasábamos bien Rena, nos entendemos en la cama, haré todo lo que me pidas, te dejaré tener el control, te trataré bien, prometo poner de mi parte, si me das una oportunidad voy a cambiar.- típicas frases de él, siempre le di miles de oportunidad hasta que me di cuenta que esta desquiciado y nunca va a cambiar.
- Nos vemos después.- cuelgo, me empiezo a pegar en la cabeza, hasta que unas manos me detienen, no me había percatado en que momento entró, levanto mi rostro y lo miro y empiezo a llorar con fuerza, me alza en brazos y me pone en su pecho, parezco una nena con su padre.
- Tranquila!.- besa mi cabeza, y acaricia mis brazos.
Martín está demente, ya se obsesiono conmigo, no acepta que nos separamos, su nivel de locura lo tiene cegado.- sorbo por mi nariz sin dejar de llorar.
- Venía bien, hasta que hace una semana me lo volví a topar en el gimnasio que voy, no ha dejado de perseguirme, las otras noches intento secuestrarme, sobreviví de milagros.- tapo mi rostro y vuelvo a llorar, recordando no sé que hubiera pasado si no escapaba, me duermo en su pecho, esperando que mañana sea un mejor dia, me debe estar esperando que llegue, en cuanto pasen las horas y no este ahí me llamará o se presentará en la casa de mi madre, no puedo volver Einar también agarro cierta obsesión conmigo...
Me despierto sobresaltada y tomo mi teléfono, no tengo ninguna llamada perdida, miro a mi lado y la cama esta vacía, ¿dónde se fue?, decido levantarme, me doy una ducha y me cambio, bajaré a desayunar y me pondré a hacer mi proyecto, llevo mis cosas abajo y decido prepararme café, abro mis apuntes y la puerta se abre de golpe entrando la misma mujer su ex, sus manos las trae atrás de su espalda.
- Veo que sigues aquí ramera!.- se acerca donde estoy, yo me pongo frente suyo dejando la mesa como distancia.
- Yo no soy ninguna ramera!.- agarro mi taza despacio y la atraigo hacia a mí.
- Claro que lo eres! Te acuestas con un hombre casado!.- trae sus manos al frente y tiene una navaja larga, me pongo blanca como el papel y tomo mi taza.
- Él no está casado con nadie.- intenta agarrarme, está loca me quiere asesinar, estira para clavarme y yo le revoleo la taza pegándole en su rostro.
- QUÉ HACES?.- grita como loca, cuando toma mi brazo y le hace un corte, le estampó con un cenicero en su cabeza, se desmaya al instante, guardo todas mis cosas y salgo corriendo, corro por todo el camino buscando la salida, recuerdo por donde entre,sigo corriendo sin mirar atrás, cuando ya no puedo más, paro un taxi y le pido que me lleve hasta el aeropuerto, una vez llegamos le pago y corro adentro.
- Hola un vuelo a Gudvangen.- mi voz está agitada por correr, la mujer al otro lado abre sus ojos como plato, sin entender nada, me entrega el boleto y veo que en 10 minutos sale, voy directo a abordar, subo y me siento en mi butaca, mi corazón late de forma agitada, mi brazo está manchado de sangre, una vez él avión despega me levanto voy al baño, curo mi herida y me cambio de ropa, vuelvo a mi asiento y cierro los ojos buscando la calma, ¡que loco están los ex!
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 36 Episodes
Comments