Llegamos a casa de mi padre después de haber pasado semejante susto de muerte, él me dijo que me calme que habrá sido una persecución policial.
-Persecución policial?.- pregunto a los gritos
-Y desde cuando la policia no usa uniformes y anda vestida toda de negra?.- le digo bastante alterada a mi padre que hace como si le hubiera contado que comí demás, ni se inmuta, eso no puede ser que sea una persecución, tenía pinta de que se escapaban de alguien, para mi padre está acostumbrado a esto.
-Tranquila hija, no paso nada!.- tan tranquilo me lo dice, ¿o sea que me tiene que pasar para que esté alterada?, entre en un estado de crisis y nadie se acercó, después de no sé cuanto tiempo apareció mi padre, y ya se me había pasado, me las tuve que arreglar sola.
Para mi que mi padre no prende palos santo se los introduce en algún lado, tanta calma me asusta, entramos y el prende las luces, la entrada ya es un sueño, ¡vaya casa!.
-Que hermosa casa tenes Viejo, lastima que vivas al otro lado del mundo, y venir a verte queda tan lejos!.- le digo nostálgica, mirando todo a mi alrededor, ¿en que trabaja para tener esta casa?, ya sé mi próximo destino para trabajar, ja, ja.
-Ya te dije que te vengas a vivir conmigo.- me dice tan tranquilo como siempre, siii lo dijo muchas veces, pero no, mis hermanos, mis abuelos, no, no, solos no los dejo.
-No es tan fácil tengo una familia allá que me espera, me necesitan, ya lo sabes.- le digo sensible con los ojos cristalinos, como duele el pecho.
Mi padre me abraza y me largo a llorar, justo ahora se me cruzan tantas cosas que me hace mierda, y para completar, pongo un pie y me reciben lluvias de balas, tampoco esperaba al presidente, pero otro recibimiento, una crisis y me las tuve que arreglar sola, todo un tema soy.
-Tranquila hija anda a tu habitación y después baja a cenar.- dice mi padre mientras se retira a algún sitio de la casa, parece una mansión esto, que grande es!, semejante casa para una sola persona, ahhh no cierto que vive la bruja, y sus sanguijuelas.
Subo y lo confirmo, esta casa es inmensa, 4 habitaciones en el piso de arriba, las paredes color crema con muebles negros, ¿cuadros?, Vaya no sabía que le gustaban los cuadros, aunque convengamos que estamos en el país de los grandes pintores y escultores. En fin me voy a mi habitación, no soy de préstarle atención a los detalles, colores de una casa, adornos y eso, prefiero usarlo con las personas o con lo que a mi realmente me gusta, siempre tuve ese problema, me saben preguntar: ¿cómo era la casa?, ¿cómo estaba vestido?, que se yo, jamás miro eso, todo se me pasa por alto, pero si algo me gusta le pongo toda la atención, eso sí, un escaneo completo, ¿cómo el chico del aeropuerto Luna?, ¿Qué?...
A UNOS KILÓMETROS EN OTRO LUGAR
-SE NOS ESCAPO!!.- grito furioso, pateando todo a mi alrededor, que inútil soy, giro mi rostro y miro a Vitto, él fuma esos habanos tan particulares de él, le dije eso y no sé enoja, me mira como si nada.
Vitto es como mi padre, cuando la adicta de mi madre me largaba a la calle para que yo haga cualquier trabajo, ella se acostaba con mis amigos por cualquier estupefaciente.
Y un día cayó Vitto en persona (siempre manda a sus matones a resolver sus 'problemas')llego a mi casa buscando al bastardo de Leone mi hermano, como no lo encontró, mi madre se arrodilló y le pidió que le dejara dar placer por un poco de coca, Vitto se quedo en mi casa hasta que mi hermano regresará, no la toco, él dice que mi madre siempre le dio asco, por lo visto la conoce de antes.
Cuando llegue mi madre le estaba dando atención a Fizz mientras Alessio se encontraba detrás de ella y Vitto se fumaba un habano sentado en el sillón sucio que teníamos. Ese día Vitto me miro nego con la cabeza y me llevo con él, fue mi salvación, ya estaba cansado de los cintos, los puñetes, las noches de no comer, de dormir afuera por los gritos y gemidos de esa hija de perra, Leone siempre se escapaba, cuando volvía y no le daba nada, lo dejaba inconsciente a patadas, yo me metía lo salvaba y corría a pedir auxilio, pero las personas te ignoran, no sé les mueve una fibra de su ser al ver niños golpeados, llenos de sangre, desnutridos y sucios.
-Tranquilo hijo mío!.- dice Vitto mientras se toma su Wisky tranquilo, yo lo miro y tiene un aire Al Paccino, pero con cabello cano, esa voz ronca de tanto fumar.
En eso entra la ramera de Vitto la querida Chiara, con un vestido blanco apretado al cuerpo y un bronceado artificial, como sus pechos y labios, no me da buena espina esa mujer algo se trae entre manos y pobre de ella si lo averiguo, siempre está metida demás, quiere estar al tanto de todo, y me molesta.
-Hola Max como va?.- pregunta con esa voz aguda que odio tanto escuchar. Mientras se dirige hacia Vitto, quien ya empieza a ponerse cómodo con la ropa.
-Qué vamos a hacer Vitto? Ahora toda la policía Aeronáutica tiene nuestras grabaciones, donde se nos ve.- digo enojado mientras veo como Chiara empieza a bajarse el vestido.
-Ya le digo a Aria que interfiera en las grabaciones del Aeropuerto y borre esas cintas.- dice Vitto mientras baja sus pantalones para que Chiara se prenda como si fuese su comida, ella me mira mientras su cabeza sube y baja, ¡es tan patética que me da repulsión!.
-Okey Vitto me retiro, ya vi suficiente.- le digo mientras Chiara está entretenida con Vitto, él larga una carcajada.
Bajo y veo quien está en la mansión, este hogar me preparó a lo que soy hoy en día, unos pasos atrás mío me hacen girar.
-Qué harás esta noche Max?.- me pregunta Lucca con un cigarrillo de marihuana.
-Qué tienes pensado hacer?.- le pregunto mientras me dirijo a la puerta.
-Qué te parece una orgia?.- me pregunta con los ojos rojos como el Diablo.
-Ya tenes las mujeres? O hay que salir a buscarlas?.- le pregunto mientras me enciendo un cigarrillo de marihuana yo también.
-Nos están esperando ya!!!- me dice mientras salimos de la casa, ríe como demente.
La adrenalina corre por mi sistema y Lucca es un gran amigo mío, mi mano derecha, nos cubrimos la espalda uno con otro, su vida fue tan miserable como la mía, es mi amigo de la infancia, él y yo salíamos a buscar las sobras de comida de los bares, escapabamos de la policía, el día que mi madre me pego abriendo mi espalda, me acompaño hasta el hospital ganándose una cachetada de un oficial, (de grande se las cobró), ese día fuimos a dormir a su casa su cama era cartón, tuve fiebre, se quedó toda la noche despierto, por milagros su padre no apareció, los días siguientes era dormir en la estación de trenes, Vitto a mí me salvo y al tiempo le pedí que lo sume a él, sino su padre se iba a encargar de exterminarlo, y aquí estamos hoy ambos, más sanguinarios que nunca, sé que a su padre lo tiene en el sótano de su casa, con la hija de nuestros enemigos, Lucca se volvió más loco que yo.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 33 Episodes
Comments