CAPITULO 5: EL PUEBLO VAINILLA EN PROBLEMAS.

Tal como dijo papá fueron cuatro días para llegar al pueblo más cercano a lo lejos dude distinguir las grandes casas de dos pisos con estilo oriental mezclado con el estilo europeo, las calles con loza de piedras de color naranja. El pueblo estaba lleno de muchos lugareños comprando productos en muchos de los comercios del lugar, la calles eran muy vistosas, los comerciantes intentaban llamar mi atención pero no podía gastar el poco dinero que poseía todo era para lo más importante, comida y alojamiento. Seguí caminando por esas calles hasta llegar a un edificio de tres pisos en su entrada que decía "gremio de aventureros". Decidí entrar y me llevé una sorpresa estaba lleno de guerreros de distintas razas y magos de todo tipo. El primer piso era una taberna con varias mesas y sillas ordenadas simétricamente, al continuar todos pusieron los ojos en mi como si fuera un bicho raro, de pronto un hombre alto y fornido se acercó.

—Oye chico. Tu no eres de por aquí—

—Soy del valle floreciente —

—Oh vaya. Jajaja enserio? del valle. Te demoraste cuatro días completos ¿Verdad?—

—¿Hmmm? si —

—Bueno. No hay problema muchacho, vé y regístrate como ayudante —

De repente se acercó una bella mujer de 1.60 de estatura, lucía unos ropajes de maga pero con un escote muy pronunciado y unos pechos enormes como melones de la granja de mamá, no pude evitar mirar esos grandes atributos.

—Oye Brunt deja al muchacho en paz — dijo la mujer.

—No dejes que te intimiden, solo es puro músculo y nada de cerebro — continuó.

—Gracias — le respondí con mucha timidez por tanta belleza y amabilidad.

—Mi nombre es Hitomi. Mucho gusto — ella extendió su mano hacia mi.

—Mucho gusto. Me llamo Yan — le respondí muy nervioso.

Al instante hizo una ligera risa y me indicó en dónde podía obtener más información.

Ella era una mujer muy bella con sus ojos de color azul celeste, piel clara, labios rojos muy intensos con un pequeño lunar en su mejilla derecha, su cabello color rojizo muy liso y largo podía adivinar su edad de entre 25 y 30 años, poco después la miré fijamente y me hizo un guiño muy tierno.

—Gracias Hitomi —

—De nada me gustó conocerte. ¿Hmmm? Yan— me respondió con una sonrisa.

Unos segundos más tarde me acerqué al mostrador estaba una chica mitad perro como recepcionista y otras más atendiendo a los otros aventureros que llegaban.

—Buenos días. Puedo ayudarle en algo — dijo la chica.

Miró fijamente mi rostro con fascinación y de pronto se sonrojó un poco, puede que el cambio que sufrí me hizo más atractivo.

—¿Este? mi nombre es estela mucho gusto, vienes como novato —

—Si. Ya se como es esto, voy a registrarme para ganar un poco de dinero —

—Bueno. Hay tareas que tienes que hacer, entre más riesgosas más te pagaremos —

—Okey. Soy Yan el hijo del aventurero Hans —

Todos en el salón gritaron de asombro enseguida miraron dónde estaba con rostros de sorpresa y admiración, de repente estela sonrió y me tomó de la mano.

—Vaya sorpresa el hijo de Hans está aquí — dijo estela muy emocionada.

—Yo sabía que papá era conocido, pero no así — dije un poco confundido.

—¿En serio? tu papá es toda una leyenda por aquí —

No podía creer como era reconocido mi padre en este lugar, mi corazón se emocionó un poco al pensar todo eso. De pronto en el tablón de misiones estaba una hoja con dibujo de la gran serpiente del bosque y había una recompensa por matar a esa criatura.

—Disculpa. Señorita estela. Esa serpiente, yo acabé con ella hace un mes — le dije.

—¡Ah! ¿En serio? Pero tienes que tener evidencias de eso. Cómo la cabeza o la cola, así no podremos pagarte —

—¿Hmmm? lastima — dije todo decepcionado.

Al momento apareció un pequeño duende guerrero y me miró como si me conociera.

—Espera. Tu eres el chico que decapitó a la serpiente de un corte? —

—¿Tú estaba en ese lugar? No me dí cuenta —

—Si. Estabas con una chica demonio. Oh veo que creciste un poco — dijo en duende con una sonrisa.

—Entonces es cierto. Bueno, eres bienvenido al gremio — dijo estela.

Todos en el lugar se emocionaron alzando sus jarrones de cerveza, no me había sentido tan cómodo en un sitio así. Al poco tiempo se acercó el hombre fornido todo ebrio poniendo su mano en mi hombro.

*Hip* —Bienvenido. Disculpa por lo de antes —

—Descuida. Todos podemos ser colegas — le respondí con una sonrisa amistosa.

Hitomi se acercó tomando mi mano, me llevó a su mesa pidiendo varias cervezas mirándome fijamente, analizando mi rostro me hizo una sonrisa.

—Yo conozco a tu padre. Fui compañera de el, hace tiempo — dijo Hitomi con un tono seductor.

Enseguida puso sus manos sobre las mías acariciando de una forma que desconocía.

—Tu padre es muy guapo y además es el mejor guerrero del gremio ¿Cómo está? —

—Está bien. Un poco cansado por sus batallas — le respondí.

—Sabes. Hans y yo compartimos muchas cosas juntos. Pero desde el día que se fué a formar una familia, me he sentido sola — Hitomi seguía acariciando mis manos.

Poco después ella se inclinó hacia mí y pude contemplar de forma magistral sus grandes pechos, puse la mirada hacia otro lado pero ella seguía en esa posición como si insistiera para que la viera, ondulado ese pronunciando escote de derecha a izquierda mientras tomaba su jarron de cerveza. Pocos después todos en la taberna ya estaban ebrios pues ya era tarde pero Hitomi seguía como si nada su resistencia al alcohol es suprema. Por un momento miré mi jarron de cerveza que toda la noche no toqué, ella se me acercó e insistió en que tomara tan siquiera un sorbo, tuve que hacer como si tomara pero no se creía mi actuación.

—Que raro. Un aventurero cada vez que llega se toma una cerveza, pero tú no —

—Es mi primera vez tomando esto —

—¿Oh? ya veo. Entonces pruébala, es lo mejor que hay en este pueblo —

En un instante cambió de puesto y se sentó en mis piernas tomando el jarron con sus manos y lo puso en mi labios. Tomé varios sorbos y a los pocos segundos todos mis sentidos se fueron apagando, mis ojos pesaban y toda mi fuerza se esfumó, fui cerrando los ojos poco a poco hasta quedar dormido "nunca confíes en una maga que acaba de conocer".

Pasadas las horas fui abriendo los ojos poco a poco y el efecto de lo que fué, estaba desaparecido, sin darme cuenta estaba en un cuarto pequeño sobre una cama atado de manos y pies, al mirar hacia el otro extremo de la cama pude darme cuenta que estaba desnudo.

—Vaya, vaya. Al fin despertaste creo que mi hechizo de sueño dejó de funcionar —

Una mujer estaba sentada en una parte del cuarto no podía ver bien quien era pero por su voz pude notar que era Hitomi.

—¿Que vas a hacer o mejor que me hiciste?—

—Descuida, todavía no te echo nada, pero lo que viene, lo voy a disfrutar mucho —

Hitomi al momento se levantó de dónde estaba y caminó hacia mi, tenía puesta ropa interior muy reveladora, sus pezones se podían distinguir por la delgada tela, sus bragas eran muy cortas, sus piernas gruesas y cintura delgada muy sexy "tengo que admitir que tiene un buen cuerpo".

—Tu padre fue un gran amante de los mejores, pero se enamoró de mi aprendiz de maga y me hizo a un lado. y por lo que veo eres el hijo de esa traidora —

—Es muy molesto. la forma como te refieres a mi madre —

—Si verdad. Pero mi mejor forma de vengarme es hacerlo con su hijo — dijo ella mientras se acercaba poco a poco a la cama y se subía tocando mis pies, mis manos y luego mi pecho como si fuera un masaje.

—Por lo que tengo entendido su hijo tiene 17 años. Pero el poder que hay dentro de ti cambió tu cuerpo —

—Espera. Cómo sabes eso? —

—Tengo más de 300 años. Mi experiencia como maga me hace saber. Desde que llegaste pude sentir tu poder —

—¿Hmmm? interesante. Por favor puedes soltarme tengo que buscar a alguien que conozca al explorador —

A los pocos segundos se subió en mí, acariciando mi pelo se inclinó y me dió un beso. Podía sentir sus suaves labios como me besaban de forma que nunca conocí, su lengua y la mía se frotaban entre si y poco después mi entrepierna empezó a levantarse.

—¿Oh? Creo que te está gustando. Bueno, esto apenas comienza —

Sus manos comenzaron a descender hacia mi titán, tocando de arriba a abajo, poco a poco ella bajó su cabeza y su boca tocó esa parte, en un movimiento pude sentir la humedad de su boca.

*Chupar* —Te gusta ¿verdad? A tu padre le encantaba— *Chupar*

A los pocos segundos cambió de posición y se subió encima de mi, poco a poco fue metiendo eso dentro de ella y su interior caliente y húmedo era una sensación indescriptible.

—¡QUE RICO! hace tiempo no sentía esto — dijo Hitomi haciendo una cara de placer.

Sus movimientos me hacían sentir cada vez más placer y por cada subida y baja de sus caderas me besaba y hacía gemidos fuertes.

—Quiero que seas mi amante —

—Muy rico y todo pero tengo que irme. Suéltame de una vez — le dije.

Al escuchar esas palabras ella empezó a mover sus caderas más rápido que al instante ya no pudo más y un líquido viscoso mezclado con orina salió de aquella parte a toda velocidad, mientras un hormigueo recorrió todo mi cuerpo y mi líquido blanco terminó dentro de ella.

*jadeo* * jadeo* —Por lo que acabes de hacer te ayudaré a encontrar a esa persona — dijo Hitomi con voz cansada.

—No voy a hacerte nada después de esto ya que me vas a ayudar —

El amanecer llegó y ella ya no estaba, toda mi ropa estaba en la mesa de noche, decidí vestirme y buscarla para preguntarle en dónde podía encontrar al explorador pero no la encontraba. Llegué al gremio y ahí tampoco estaba, "¿que pasó? Me profanó y desapareció". Recorrí las calles del pueblo buscándola pero nada, al momento muchas personas salieron corriendo del lugar en dónde estaba huyendo de algo. Cinco orcos aparecieron portando hachas de gran tamaño intimidado a todos los lugareños tomando algunos por el cuello preguntando por un pequeño duende guerrero, después empezaron a destrozar varias casas y las pequeñas tiendas causando un gran desastre en el pueblo vainilla "si nadie los detiene todo el pueblo quedará hecho trizas".

Miré por todo el lugar y me dí cuenta que aquel que buscaban era el mismo que me encontré en el gremio, el duende que me vió derrotar a la gran serpiente estaba todo asustado y escondido en un rincón con mocos y lágrimas temblaba de miedo. Y se hace llamar duende guerrero, pero es comprensible es pequeño en comparación a esos grandes monstruos "llegó el momento de salvar su pellejo, de pronto el sepa en dónde está el explorador"...

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