Capitulo 12 "de la universidad"

Giraba la cabeza y miraba a Óscar , nos mirábamos mutuamente, su expresión era un poco complicada.

Durante toda la cena, me desempeñaba bien y no causaba sospechas de El abuelo .

Al salir, Óscar decía. -tu arte de representación está mejorando cada vez más eres mejor actriz -

Su voz era un poco fría, y ahora sabía claramente sus pensamientos y yo no imaginaba. Me paraba junto al auto, y decía sin ninguna emoción, -Gracias a los elogios de nada señor Óscar , me iré-

Ya no me humillaba más.

A punto de irme, el hombre me tiraba del brazo.

Giraba la cabeza y preguntaba. -¿Señor Óscar , hay algo más?-

Sabía que no era un asunto sencillo que renunciaba a una persona que había estado enamorado durante doce años.

Pero, trataba de alienarme más.

Solo de esta manera, no me avergonzaba demasiada cuando él me echaba.

Los ojos de Óscar se complicaban más cuando me veía, se detenía unos segundos antes me decía, -Sube al coche, te

llevo de regreso-

Como decía, no me permitía negarme, asi que se sentaba en el asiento trasero, luego se trasladaba a una posición más

cercana al interior y me daba el espacio en la puerta.

Dudaba un poco, me subía al auto.

-camila está embarazada-

Óscar mencionaba esto tan pronto como subía al auto.

Me dolía el corazón por un tiempo.

Pensaba que era amable, pero quería decirme esto.

-Bueno, ¿entonces?-fingía estar tranquila y le preguntaba. -¿Quieres que nos divorciemos o qué?-

Tal vez fuera mi comportamiento lo que superaba su imaginación, Óscar me miraba con curiosidad durante un buen

rato antes de decía, -Hablemos de eso después del nacimiento del bebé-

Silencio...

Óscar quería enviarme a la villa que me daba, pero le decía al conductor la dirección de carmin.

Estaba a punto de llegar a la casa de carmin, tocaba mi vientre bastante plano y no podía contenerme, le preguntaba,- Óscar , ¿si también estoy embarazada?-

-quieres estar embarazada de un bebé

que no es mío para enseñarle a mi abuelo-

Curvaba los labios y sonreía tristemente, -La píldora anticonceptiva tampoco es 100% exitosa-

Mi pregunta hacía que Óscar parecía nervioso, sus ojos se posaban en mi vientre y preguntaba, -¿Estás embarazada?-

-Adivina-Lo miraba con una expresión sencilla y sin respuesta.

Óscar me miraba sin responder, pero no había alegria en su rostro.

Tal vez esperara demasiada para el bebé tener un padre, así seguía preguntándole, -¿Quieres que esté embarazada?-

El hombre permanecía en silencio.

No lo admitia,

Escondía mi decepción interior, y fingia sonreir con facilidad. -No, te miento, no importa lo estúpida que sea, no voy a

tener un bebé con un hombre que no me ama-

En ese momento, el auto también llegaba a la casa de carmin.

Abría la puerta rápidamente y salía del auto, pero escuchaba al hombre decir algo a mi lado, -Mientras estés en paz, te

prometo que siempre serás la señora , en cuanto a nuestro bebé...esperas más-

¡Una sola frase me confundía!

¿Era un compromiso?

Si lo era.

Pensando en el descuido y el cinismo de Óscar hacia mí antes, ya se comenzaba a cambiar.

Por un tiempo, incluso me sentía que mientras continuábamos, tal vez algún día nuestra relación mejorara.

Pero seguía siendo demasiada ingenua.

Al día siguiente, era fin de semana, trabajaba horas extras en la empresa para hacía imagen de efecto y Antonio venia.

Me explicaba que estaba en un viaje de negocios recientemente, por lo que no estaba en la empresa.

Volvía hoy, queria que lo acompañaba a comprar ropa.

Me ayudaba mucho tanto en el trabajo como en la vida, no tenía motivos para eludir.

ibamos a un gran almacene cercano a la empresa y ibamos directamente a la zona de ropa masculina.

Tenía que decir que Antonio tenia muy buena figura, todas las ropas eran adecuadas por él, era solo que si le decía que

sí, la compraba.

Más tarde, no podía soportarlo más, así que me callaba y dejaba que decidía por si mismo.

Aun así, compraba siete u ocho prendas y dos trajes, y luego se los entregaba todos al camarero en el centro comercial,

que encontraba tiempo para enviarlos a su casa.

Bajábamos las escaleras mecánicas, cuando estábamos en el tercer piso, veíamos el área de productos para bebés y

no podía evitar detenerme.

Antonio me entendía mal y decía, -Espérame-

Entonces, corría al área de productos para bebés y tomaba un osito de peluche morado.

Cuando notaba que necesitaba detenerlo, veía a otras dos personas en otra área vendiendo productos para recién

nacidos...

Óscar y camila .

Ellos dos empujaban un carrito pequeño, comprando suministros para recién nacidos allí.

Estaba lejos, pero todavía podía ver la alegría en los ojos de Óscar .

Parecía que esperaba el nacimiento de este bebé.

-Aquí tienes-Antonio regresaba pronto y me entregaba el oso morado, -¿Viste esto hace un momento?-

Respondía pasablemente. -Sí, gracias- Luego nos apartábamos.

"No puede evitar encontrar a su enemigo" esta frase tenía mucha razón.

Los evitaba en el centro comercial, pero cuando íbamos al restaurante, nos encontrábamos.

Tan pronto como me sentaba con Antonio , el camarero colocaba a Óscar y camila en la mesa frente a nosotros.

-Qué casualidad, ¿no es Antonio que Daniela más echaba de menos en la universidad?- camila nos veía e inmediatamente se acercaba a saludarnos.

Sus ojos eran astutos y ya adivinaba lo que estaba pensando..

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