Después de que Roberto les enseñara el tatuaje el agente de P.K que le apuntaba bajo su arma para hacerle señas a Roberto con su mano indicando que baje la ventana.
-¿Qué pasa Roberto? -Le preguntó el agente Fernández a Roberto.
Roberto volvió a acomodar su manga tapando el tatuaje para luego abrir la ventana de la patrulla, en ese momento el agente de P.K que le había apuntado desde el otro lado de la puerta del auto patrulla les tira dos bolsas de tela negra a través de la ventana que Roberto acaba de abrir. Las bolsas de tela caen sobre las piernas de Roberto.
-Póngalas en la cabeza. -Les grita el agente de P.k mientras vuelve a apuntarle con el arma.
En ese momento Roberto extendió su mano para darle una de las bolsas a Fernández. Fernández observó la bolsa sin reaccionar, estaba paralizado de temor. Uno de los agentes de P.K que estaba junto a Fernández disparó al cielo haciendo que Fernández de un chillido y fe inclina hacia atrás apoyando su espalda sobre el asiento del auto. El agente apoyó el cañón de su arma sobre el espejo del auto del lado de afuera y gritó que se pusiera la bolsa en la cabeza.
Fernández tomó la bolsa lentamente con una mano temblorosa. Roberto se puso una de lado bolsas negras en la cabeza antes que Fernández quien titubeó un instante antes de ponérsela.
Los agentes que bajaron a Fernández y a Roberto del auto; a Roberto le quitaron la bolsa de la cabeza mientras que cuando bajaron a Fernández de la patrulla fue para meterlo en la camioneta donde iban.
Roberto sonríe cínicamente al relatar eso y luego voltea a verlos de nuevo por lo que Daniel se detiene por temor a que Roberto notara lo que estaba haciendo.
-¿Pero cómo fue que terminó muerto? -Le pregunta Daniel a Roberto.
-Fue cuando llegamos al distrito de almacenes. -Le responde Roberto a Daniel.
La pregunta de Daniel dio pie a que Roberto continuara su relato, algo que parecía recordar sin ninguna culpa ni remordimiento:
Claro que fue algo que hizo del mismo modo que lo recuerda sin ninguna culpa ni remordimiento. Al llegar al distrito de almacenes Roberto descendió de la patrulla junto al agente de P.K que le había dado las bolsas negras de tela que se habían puesto.
Detrás de la patrulla llega la camioneta donde trasladaban al policía Fernández, luego de estacionar la camioneta hacen bajar a Fernández del auto para ponerlo de rodillas en el suelo, frente a él se pone de pie un agente de P.K junto a Roberto.
-¿Qué es esto? ¿Dónde estoy? -Pregunta el policía Fernández.-Roberto ¿estás bien?
-Estoy bien. -Le dice a gritos Roberto al policía Fernández para simular que él también estaba atrapado.
-¿Qué quieren de nosotros? -Pregunta Roberto a gritos simulando que lo tenían sujeto.
-Los trajimos aquí porque necesitamos su ayuda. -Le dice al policía Fernández el agente de P.K. que está junto a Roberto.-Queremos que trabajen para nosotros.
-¿Qué quieren que hagamos?.-Finge preguntar Roberto.
-Para empezar necesitamos que envíen un mensaje. -Le dice el agente de P.K a Fernández.
-No vamos a ayudarlos en nada! -Les grita Fernández mientras intenta soltarse.
-¡Espero Fernández! -Le grita Roberto a Fernández.-Si no los ayudamos nos mataran.
-Intente ayudarlo y persuadirlo de que debíamos ayudar, pero él se negó una y otra vez. -Dice Roberto haciendo una pausa al relato.
Daniel estaba tan impresionado y consternado que no podía terminar de hablar así que Mateo termino su frase:
-Mataste a Fernández.-Le dice Mateo a Roberto.
-Así que si, yo maté a Fernández. -Les responde Roberto con una sonrisa.
-¿Y el incendio?. -Le pregunta Daniel a Roberto.
-Fui yo. -Le responde Roberto a Daniel.- Me dijeron que debía quemar el lugar con todas las personas que estuvieran adentro, pero cuando llegué ya no había nadie.
-¿Ibas a matar mujeres y niños inocentes? -Le dice Daniel a Roberto.-¿por qué?
-Porque es un maldito traidor, bastardo! -Le responde Mateo a Daniel.
-Cerra el orto. -Le dice Roberto a Mateo.
-Habla bien imbécil. -Le responde Mateo a Roberto.
-Cerra el otro dije. -Le dice Roberto a Mateo mientras le da un gancho de izquierda.
Daniel continuó moviendo sus muñecas intentando soltarse aprovechando esa distracción.
Anteriormente, cuando Daniel colgó la llamada que había hecho Roberto volteo a ver a Mateo para decirle:
Roberto pudo escapar de los secuestradores.-Le dice Daniel a Mateo.
-Te dijo dónde está? -Le preguntó Mateo a Daniel.
-Le pedí que me comparta su ubicación, por suerte pudo robar un celular cuando escapó, está en las afueras de la ciudad.-Le responde Daniel a Mateo mientras enciende su auto a toda prisa.- Tenemos que ir a buscarlo.
-Pisa el acelerador entonces y vamos en camino. -Le dice Mateo a Daniel…
Daniel conduce su auto hacia donde Roberto le había indicado.
En el camino se detuvieron en un lugar de comida rápida donde Mateo compró una cubeta de pollo frito para Roberto. En su experiencia Mateo sabe lo difícil que es estar lejos sin nada que pudiera comer y peor aún, ya que Roberto desapareció hace más tiempo que él.
Daniel estaba contento por encontrar a Roberto además de estar muy emocionado por hablar con él y escuchar lo que tenía para contarles. Tal vez Roberto pudo ver la cara de sus secuestradores además de poder decirles donde estuvo encerrado todo este tiempo. Este caso estaba a punto de ser resuelto.
Mateo y Daniel se detienen en un descampado a las afueras de la ciudad de Felotimo. Salen del auto y comienzan a buscar a Roberto, el terreno era bastante amplio con árboles a su alrededor que le recordaban a Mateo el bosque (solo que con menos césped).
-¿Dónde estará? -Le pregunta Mateo a Daniel.
-No lo sé y si no te apresuras no lo vamos a encontrar hoy. -Le responde Daniel a Mateo.
-¿Qué dices? -Le pregunta Mateo a Daniel.
-Qué le pides permiso a un pie para mover el otro.-Le dice Daniel a Mateo.-Tenemos que encontrarlo hoy.
Mateo decide ignorar lo que dijo suponiendo que tal vez desquitarse con él era una forma de liberar su frustración.
Mientras buscan a Daniel alcanza a ver a la distancia a Roberto así que voltea a ver a Mateo y lo llama para avisarle. Mateo voltea con el cubo de pollo frito en sus manos sería a ver a Daniel a pesar de que no le dijo nada realmente le molestó su comentario.
Daniel corre hacia Roberto con Mateo detrás de él. Al estar frente a Roberto Daniel sonríe observando aunque la expresión de Mateo es diferente. Roberto se ve bastante bien para haber escapado.
-¿Estás bien? -Le preguntó Mateo a Roberto.-Vinimos a ayudarte.
-¿Quién los va a ayudar a ustedes? -Le pregunta Roberto a Daniel.
Al terminar de preguntar eso varios agentes de P.K salen de detrás de los árboles y les apunta a Mateo y Daniel con armas AK-47.
-Bastardos. -Susurra Mateo observando a los lados.
-Dame eso.-Le dice Roberto a Mateo mientras le quita el cubo con pollo frito a Mateo de las manos.
Los llevan a punta de arma hacia el cobertizo donde están ahora.
-Judas. -Le dice Mateo a Roberto al pasar junto a él mientras lo llevan.
Roberto lanza una risa burlona al escuchar eso mientras va detrás de ellos.
Ahora Roberto observa a Mateo mientras le toca la mejilla levemente como si le diera una suave bofetada.
-¿Este es mi reemplazo? -Le pregunta Roberto a Daniel en tono sarcástico.-Que graaaan cambio.
-Yo tengo moral y honor tu ni siquiera conoces esas palabras.-Le dice Mateo a Roberto.-A mí me enviaron a atraparte y eso voy a hacer.
Roberto no presta atención a lo que Mateo dice en vez de eso repite "no me interesa" una y otra vez mientras Mateo habla, pero Daniel sí lo escucho y no pudo evitar pensar en lo que dijo.
Mateo levanta la mirada para ver a Roberto.
-Te va a costar caro que te hayas atrevido a tocarme. -Le dice Mateo a Daniel.
-Vos no me toques. -Le responde Roberto a Mateo.
-Estoy atado idiota! -Le grita Mateo a Roberto.-Porque no me sueltas a ver si estando suelto me podés hacer lo mismo.
-Cállate! -Le dice Roberto a Mateo mientras le da un gancho al estómago.
Roberto le da otro gancho en el estómago a Mateo, luego iba a darle un gancho en el rostro, pero uno de los agentes de P.K lo sujeta del brazo.
-Nos dijeron que estaba prohibido lastimarlos. -Le dice al agente a Roberto mientras le sujeta el brazo.
-Bueno, me olvidé. -Le dice Roberto al agente.
-Será mejor que no vuelvas a olvidarlo. -Le dice el agente a Roberto mientras lo suelta del brazo.
-¿Qué tiene de especial? -Pregunta Roberto a los soldados mientras se acerca a ver a Mateo.
Mateo se retuerce intentando soltarse mientras Daniel aprovecha la distracción para continuar moviendo sus muñecas intentando aflojar las amarras.
-¿Quién eres vos? -Le pregunta Roberto a Mateo.
-Soy el patrullero 777.-Le responde Mateo a Roberto.-A sus órdenes jefe.
Roberto toma del cabello a Mateo para no golpearlo.
-Dime quien eres? -Insiste Roberto.
-Soy Batman. -Le responde Mateo.
Roberto le suelta el cabello empujándolo la cabeza.
Katerina Ivanov se encuentra en su oficina de pie frente a su escritorio donde se puede ver un documento con un mapa del mundo donde tiene marcado con una cruz estados unidos y un círculo donde esta Argentina hecho con un marcador rojo. Junto a ese mapa hay otros dos mapas uno de los cuales es de Estados Unidos el cual tiene una cruz en cada estado, junto a ese mapa hay un mapa de Argentina. Ella hace una con marcador rojo sobre la provincia de Buenos Aires la cual estaba rodeada por un círculo rojo, luego levanta su mirada y sonríe con una sonrisa que muestra una mezcla entre diversión y sadismo.
De repente se abre la puerta y se asoma Jelena Ivanov.
-¿Estás ocupada?. -Le pregunta Jelena a Isabella.
-No, no lo estoy. -Le responde Katerina a Jelena.
-¿Hay alguna novedad? -Le pregunta Jelena a Katerina.
-Si, de hecho. -Le responde Katerina a Jelena.-Ese Romenso dijo que los atraparon así que ya deben venir en camino.
-¿Les dijiste que no deben lastimarlos? -Le pregunta Jelena a Katerina.-Quiero que me dé pelea si está lastimado será demasiado fácil.
-No te preocupes fui muy específica con eso. -Le dice Katerina a Jelena.
-Me alegro. -Le responde Jelena a Katerina.
De nuevo en el cobertizo uno de los agentes de P.K se acerca a Roberto Torres.
-Los llevamos? -Le pregunta el agente de P.K a Roberto con su acento ruso.
-En un momento. -Le responde Roberto al agente de P.K.
Roberto se da media vuelta y camina hacia una mesa.
Mateo tiene su cabeza inclinada hacia delante y sus ojos cerrados mientras respira profundamente. Daniel detuvo sus muñecas un instante por temor a que se dieran cuenta. Roberto toma el cubo de pollo frito que había dejado junto a una mesa.
-Primero voy a disfrutar esto. -Dice Roberto con la cubeta de pollo frito en su mano.-Vamos afuera y después venimos a buscarlos aquí hay olor a humedad.
Roberto y los agentes salen fuera del cobertizo y cierran la puerta. Daniel vuelve a mover sus muñecas para aflojarlas.
Mateo Álvarez está con su cabeza agachada y Daniel lo observa mientras lo llama.
-¿Estás bien? -Le pregunta Daniel Sanders a Mateo.
-Eso creo. -Responde Mateo mientras levanta la vista. ¿Pudiste aflojarlas?.
-Ya casi.-Le dice Daniel a Mateo-Gracias por la distracción.
-De nada.-Responde Mateo.
Daniel voltea a ver a Mateo piensa que tal vez no sea el momento indicado para preguntarle eso, pero tal vez no tenga otra oportunidad así que voltea a verlo y le pregunta:
-¿Fue verdad lo que dijiste?.
-Sobre qué?. -Le dice Mateo a Daniel mientras voltea a verlo.
-¿Fue verdad cuando dijiste que te enviaron a atrapar a Roberto?
Daniel no lo sabía, pero estaba a punto de revelarle otro secreto. Un secreto que podría haberlo perjudicado inmensamente de no ser por las cosas que comenzaron a acontecer por el grupo P.K.
-No solo a él. -Responde Mateo observando de forma seria a Daniel.
-¿Qué quieres decir con eso? -Le pregunta Daniel a Mateo.
-Por toda la ciudad se corrió el rumor de que un policía era corrupto y lo peor es que un agente de las fuerzas especiales lo encubría.-Le responde Mateo a Daniel mientras vuelve a ver al frente.-Así que me enviaron a atrapar a los dos.
-¿A mí y a Roberto? -Le pregunta Daniel a Mateo.
-Así es... -Le responde Mateo a Daniel.- ¿Nunca te preguntaste cómo los encontré cuando el clon los atacó?
Mateo voltea a verlo mientras Daniel recuerda ese momento en que él estaba en el suelo y Mateo llegó para salvarlo, por un momento pensó que le mandaron un mensaje, pero acabo de darse cuenta de que eso no podía ser posible. No tenía ningún sentido, ya que si hubieran podido enviarle mensaje a Mateo se lo hubieran enviado a él en lugar de usar el celular de Diego.
-¿Cómo te diste cuenta de lo que estaba pasando? -Le preguntó Daniel a Mateo.
-No me di cuenta. -Le responde Mateo a Daniel.-Yo les puse una etiqueta rastreadora adhesiva en la ropa.
Daniel recuerda el día que se incendió la casa de Diego, cuando él se dio vuelta para ver los restos de la casa Mateo le dio unas palmadas. Cuando Mateo se acercó a eso desde atrás le pegó una pequeña etiqueta rastreadora adhesiva en su chaqueta de jean y le dio unas palmadas para disimularlo. El rastreador es una pequeña etiqueta cuadrada de a penas 3 centímetros por 3 centímetros, la cual tiene sensores y cambia de color para camuflarse al aderece a usar superficie lo que lo hace casi indetectable.
-La misma etiqueta se la puse a Isabella... -Le dice Mateo a Daniel.
-¿Le pusiste una etiqueta rastreadora a Isabella también?, ¿También desconfiabas de ella? -Le pregunto Daniel a Mateo.
-A ella la habían intentado secuestrar, en caso de que fueras tu el asesino tenía que estar seguro de que no intentarías volver a lastimarla. -Le dice Mateo a Daniel.
Daniel no podía creer lo que estaba escuchando ¿enviaron a un miembro de las fuerzas especiales a atraparlo?. Y todo por proteger y encubrir a Roberto, el sabía que tal vez sospechaban de él, pero no se imaginó que todo llegaría hasta que llevaran a alguien a investigarlo. El mismo día que Mateo le puso a Daniel la etiqueta rastreadora espero a Isabella en el puesto 1, hizo tiempo hablando con el policía de turno mientras Isabella llegaba. Al esperar Mateo ya tenía una etiqueta rastreadora en su mano la cual le pegó en la ropa a Isabella al decirle que tuviera cuidado.
Cuando Mateo subió a su auto sacó de la guantera una pequeña tablet la cual encendió. Luego de encender la tablet abrió una aplicación llamada Huntermap la cual era un mapa donde había un círculo celeste el cual indicaba su habitación.
Luego fue a la opción de "ajustes" donde selecciono la opción "rastrear". Al seleccionar esa opción la pantalla volvió a mostrar el mapa con su ubicación solo que ahora habían dos círculos más de color ojo que mostraban las ubicaciones de Isabella y Daniel.
-En un momento vi que te movías a gran velocidad hacia donde Isabella estaba. -Le explica Daniel a Mateo.-Así que fui, por un momento pensé que únicamente pasarían por ahí, pero vi que los dos rastreadores estaban juntos.
Daniel escucha atentamente lo que Mateo está comentando, le parece una gran ironía que alguien que fue a la casa de Isabella ese día con la única intención de arrestarlo terminara salvándole la vida.
Cuando Mateo llegó a la casa de Isabella encontró la puerta abierta de par en par por lo que desenfundó su arma de la funda en su cintura que ocultaba debajo de su chaqueta y fue corriendo con cautela a la pared junto a la puerta al entrar al lugar Mateo se movió con sigilo y cautela. Intentaba mantenerse oculto usando la pared, pasando por la sala al estar junto a la entrada a la cocina pudo escuchar a Isabella suplicando cuando el clon de Roberto iba a cortarle la cabeza así que entró a la cocina rápidamente donde se encontró con el arma de Isabella en el suelo.
De repente Mateo escuchó los gritos de Daniel lo que lo llenó de confusión
-¿Qué estaba pasando?.-Se preguntó a sí mismo en ese momento.
Sea como sea solo había una forma de averiguarlo y no había mucho tiempo así que corrió y pasando a través de la puerta rota pudo ver a alguien de espaldas con una espada en la mano que estaba a punto de atacar a una Isabella que tenía de rastros de polvo y sangre (la que escupió por los golpes en el abdomen).
Sobre su ropa, recuerda haberla visto llorando junto al paredón que dividía su casa de la de su vecino, del otro lado estaba un Daniel lleno de polvo frente a un individuo armado con una espada al que Mateo veía de espaldas.
Recuerda claramente la cara del clon cuando volteo a verlo, así como también recuerda claramente la expresión de Isabella y la cara de Daniel con su pómulo cortado y dientes cubiertos de sangre.
-Cuando los vi a ti y a Isabella en el suelo a punto de ser asesinados me di cuenta de que eras inocente. -Le dice Mateo a Daniel
-Claro, fui a salvarla. -Le responde Daniel a Mateo.
-Ahora lo sé, pero antes no lo sabía -Le dice Mateo a Daniel.-Al ver que ambos rastreadores estaban juntos deduje que ella estaría en peligro, pero pensé que tú querías hacerle daño.
-Porque creerías eso?. -Le pregunta Daniel a Mateo.
-Algo que creían en la central es que te vengaste de Roberto por comprometerte así y decidiste desaparecer creyendo que así te salvarás de la cárcel. -Le responde Mateo a Daniel.
-Así que estuviste encubierto todo este tiempo?. -Le pregunta Mateo a Daniel.-Desconfiando de un compañero e inventando que me ayudarías?
-Exactamente y vi mi error cuando entré a la casa de Isabella y vi que eras inocente -Le responde Mateo a Daniel.-Aun de esta manera no podía correr riesgos.
-Te entiendo. -Le dice Daniel a Mateo.-Yo no quería que esto sucediera e intenté detenerlo varias veces.
-¿Por qué no lo reportaste? -Le pregunta Mateo a Daniel.
-Porque tiene familia. -Le responde Daniel a Mateo.-Y pienso que es algo que tú no pensaste cuando viniste a querer arrestarnos.
-Pienso que en ellos estarían mejor sin alguien de esta manera, Roberto es el que no pensó en su familia para hacer sus negocios-Le dice Mateo a Daniel.
Daniel observa a Mateo y cree en lo que le está diciendo, es lo mismo que Daniel pensaba que tanto su esposa como su hija estarían mucho mejor sin él.
-No creyó ni en su familia ni en las familias víctimas de sus clientes, la diferencia es que esas personas eran inocentes y todo porque tú proteges a un criminal. -Le dice Mateo a Daniel.-Seguramente él te manipulo así que no te culpo, pero está mal lo que hiciste, debiste reportarlo.
-Perdón. -Le responde Daniel a Mateo.-Esto es culpa mía.
-No es culpa tuya que él sea un idiota. -Le dice Mateo a Daniel.
-Pude haberlo detenido y no lo hice.-Le responde Daniel a Mateo.
-No podemos cambiar el pasado amigo mío, pero podemos hacer un mejor futuro. -Le dice Mateo a Daniel.-Aún estás a tiempo de hacer las cosas bien y arreglar todo.
Daniel sonríe y observa arriba a las cuerdas que atan sus manos.
-Ya están flojas.-Le Responde Daniel a Mateo.
Daniel sube y con algo de esfuerzo logra liberar una de sus manos deslizándose entre las cuerdas para liberar su otra mano.
-Genial.-Le dice Mateo a Daniel.
Daniel comienza a desatar a Mateo.
-Esto será difícil.-Le dice Mateo a Daniel.
-Juntos podemos.-Le responde Daniel a Mateo.
Mientras Daniel está desatando a Mateo se abre la puerta del cobertizo. Por la puerta entra Roberto quien ve que Daniel estaba terminando de desatar a Mateo.
-Se escapan! -Grita Roberto a los agentes de P.K que estaban afuera a punto de entrar detrás de él.
Daniel termina de desatar a Mateo mientras entran todos los agentes. Ambos observan que entra Roberto y los agentes comienzan a dispersarse intentando rodearlos.
-Dany, creo que estos montoneros quieren algo de nosotros.-Le dice Mateo a Daniel al ver a todos.-¿Qué dices de eso?
-Digo que les demos con todo lo que tenemos. -Le responde Daniel a Mateo mientras se pone en posición de kick boxing.
-Me quitaste las palabras de la boca. -Le responde Mateo a Daniel mientras se pone en postura de muay thai sujetando en una mano la cuerda en la cual estaba atado.
Los agentes de P.K y Roberto forman un círculo alrededor de Mateo. En total son 10 hombres incluyendo a Roberto por lo que Daniel mueve su mano haciendo una seña a Mateo y ambos se ponen uno detrás de otro o espalda contra espalda.
Mateo y Daniel observan a los 10 hombres que hay a su alrededor. Siendo 10 hombres si se lo dividieran sería 5 contra uno algo a lo que ninguno de los dos se había enfrentado antes.
Daniel avanzó corriendo hacia uno de ellos, al avanzar dio un salto elevando su codo derecho para atacar con un Golpe de codo en el aire (técnica de muay thai) el cual le impacta en la nariz que lo hace retroceder. Luego de golpearlo Daniel gira para dar un gancho cruzado de derecha a uno que avanzaba hacia él y seguir avanzando. Mateo, en cambio, esperó a que uno de ellos se acerque para atarlo y cuando estuvo lo suficientemente cerca lo intercepta con un golpe recto de derecha directo al mentón que hace retroceder al agente, inmediatamente después Mateo se agacha y avanza para esquivar un golpe de otro agente pasando a estar detrás de él.
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