Capítulo 13. “¡Guardias!”.

Harry regreso a casa y fue directo a su habitación para darse un baño. Tan pronto como abrió la puerta, olió un aroma en la habitación. Alguien estaba en su habitación. Harry encendió la luz de las velas y vio a Yun, es tan tarde, ¿por qué Yun llegó a su habitación?

"Su alteza ..." Yun ocultó sus lágrimas e instantáneamente enrojeció sus mejillas. Parecía haber esperado mucho tiempo. Ella inclinó la cabeza y caminó lentamente. "Esta noche, Yun está aquí para servir a su alteza ..."

"¿Yun?", Harry frunció el ceño.

"Tercer príncipe, Yun siempre tiene a su alteza en su corazón. Yun no pide ser una esposa oficial. Solo quiero quedarme con su alteza de por vida y convertirse en esclava de cama. ¡Mientras su alteza acepte!" "

"Yun, no hagas esto, sabes que el rey ahora tiene una princesa ..."

Harry estaba molesto por su actuación. La sensación de otras mujeres lo enfureció. Sentía que estaba a punto de explotar. ¿Iba a matar esta mujer?, ¿cómo se atreve está mujer frente a él, a subir a su cama?...

"Su Alteza, usted es un rey, no tendrá una sola mujer en su vida. ¡Desea Yun, lo haré voluntariamente!"

"¡Yun!, ¡fuera de aquí!. Dijo Harry, con furia, desgraciadamente se trajo de sus hábitos de su vida anterior, todos sabían que el maestro tenía un caso grave de TOC y estaba disgustado con las mujeres. Solo había una mujer en el mundo que el maestro podía tolerar y esa no era otra que Liz Coner.

Yun siguió parada ahí en la habitación y se tiro en los brazos de Harry, sin reservas.

“¡Guardias!”

“Si, señor”.

“Lleven a la señorita Yun a su habitación, asegúrense que no salga por un mes”.

En la habitación Yun quitó la cobija de la cama con enojo. De todos modos, tendría que atrapar a su alteza, desde la edad de diez años hasta el presente, nunca se dio por vencida. Un día, tarde o temprano, el Señor entraría a su habitación. Después de todo, el Señor es un hombre, el hombre no tiene control sobre la lujuria. Simplemente, si no funciona se deshará de Liz, en la obscuridad, no la culpen por usar medios crueles..

Yun sonrió con maldad y veneno en sus ojos.

A la mañana siguiente, el ama de llaves Liu corrió, vio a Liz, se reunieron y susurró: "¡La princesa, la dama de la lluvia fría y la noble concubina, vino y dijo que llevaría a la princesa al palacio por un tiempo! "

"¿Concubina Hanyu?" Pensando por un tiempo, ¿no era esa una mujer que a Harry le gustaba antes?, si mal no recuerda es la mujer de la que hablan los sirvientes, el emperador robó a la concubina, antes de casarse con el tercer príncipe ¿para qué la hacia ir al palacio? No será ...

En la habitación interior.

"Princesa, ve y cámbiate de ropa. El vestido es más formal. ¡La concubina es muy favorecida! ¡No puedo ofenderla!" Dijo una criada respetuosamente

"¿Ya veo?" Liz se rascó el pelo, no quería ir.

"Vamos, las sirvientas en el palacio no son buenas esperando. Vuelve y habla, estarás bien".

La pequeña sirvienta temía que la princesa rebelde no fuera, deliberadamente aumentó su tono, quería que Liz supiera que iría a ver a la concubina de todos modos esta vez.

Liz regresó a la habitación sin poder hacer nada, su sirvienta la ayudó a vestirse nuevamente, la cambió por una bata azul, se peinó un peinado que se veía bien y usó algunas cuentas. Finalmente, después de pensarlo, se puso el velo y se cubrió.

"¿Por qué está cubierto el rostro princesa?" , preguntó la sirvienta.

"No puedo quitármelo. Todos saben que el príncipe se ha casado con una fea concubina. No sé qué pasará. "

"¡Está bien!" Liz miró la falda. Fue realmente problemático.

"No sé cuántos hombres pueden ser seducidos por nuestra princesa así" La sirvienta frunció los labios y sonrió.

"¡Niña muerta!" Liz se miró avergonzada en el espejo y tomó este velo para hacer que sus ojos parecieran aún más atractivos. No tenía idea de fascinar al hombre, pero aun así sonrió levemente.

Se fue rumbo al palacio asombrosamente.

Este es el palacio real de Ming, se bajó de la silla de manos, siguió a la niña del palacio y miró con curiosidad a cada paso. El gran palacio es más que el palacio real, casi dorado y magnífico. En los tiempos modernos, estos se han convertido en lugares de interés histórico. ¿Quién hubiera pensado que Liz visitaría el verdadero Palacio Ming en persona?

"¡Princesa, sígame!", Le recordó a la pequeña niña del palacio.

"¡Lo tengo!" Aunque Liz lo prometió, no pudo evitar mirar hacia el este y el oeste, después de un tiempo, descubrió que la pequeña niña que estaba delante desaparecía, olvidó mantenerse al día.

De hecho, Liz sabía en su corazón que le gustaba aquí, que podría haber olvidado el amor por un tiempo. No siguió a la pequeña niña del palacio en absoluto, simplemente se paseó por su paisaje favorito con su propia mente.

Liz se perdió en el palacio de la dinastía Ming. Mientras más ansiosa estaba, más no podía averiguar la dirección.

Liz levantó su falda y caminó hacia una glorieta, descubrió que la glorieta era realmente hermosa.

Liz miró casualmente la mesa en la glorieta, su corazón se volvió hermoso de repente, ah, quién es tan bueno, realmente puso frutas, pasteles y vino en la glorieta, el vino es innecesario, frutas y pasteles. Es hora de probarlo.

El palacio es realmente bueno. Incluso el lugar de descanso tiene comida deliciosa. Liz se sentó cómodamente en la silla, recogió una uva y se la puso en la boca, se la comió sin prisa.

Pero en este momento, alguien ya había llegado al mirador: dos eunucos lideraron el camino, seguidos por el emperador, el emperador Roon. Utiliza una túnica amarilla con las manos detrás de la espalda lo hizo fruncir el ceño.

Un eunuco se frotó los ojos con pánico, miró la glorieta increíblemente y tartamudeó.

"¡El esclavo inmediatamente echó a esa mujer!"

El eunuco estaba a punto de dar un paso adelante para conducir a Liz. El emperador extendió la mano y detuvo al viejo eunuco. Hoy estaba de buen humor. Si estaba enojado los días de semana, silenciosamente dejaba a los dos eunucos atrás, el emperador dio un paso adelante. Cuando los ojos se detuvieron en el rostro de la mujer en la glorieta, de repente sorprendidos, como una belleza deslumbrante.

¿Quién es ella y por qué hay una dama tan hermosa en el palacio que ni siquiera lo notó, es su concubina?.

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