Capítulo 9. "¡Nos casamos mañana!".

La expresión renuente de Liz hizo que Harry aún se sintiera un poco incomodo: pero aún no podía decirle la verdad. No podía decirle que la siguió después de la muerte.

Harry se sentó, sintiéndose deprimido, pero igual ya le pertenecía en su vida anterior y nunca pidió su opinión.

"¡Nos casamos mañana!", Dijo enojado.

"¿Mañana?" Liz casi se desmayó. Es muy rápido.

"Pareces infeliz ..."

Harry la agarró la tiró en sus brazos. "No esperaba que este principe se casara con una mujer tan sucia y fea. Solo dios sabe cuántas mujeres hermosas estarán tristes ".

Liz estrechó su mano ferozmente, "¡Déjame ir!"

"Serás mi concubina en el futuro". Susurró Harry con coquetería.

"¡No pienses salvajemente, no dejaré que me toques!", Advirtió Liz.

Liz dejó el campamento militar del tercer Rey, realmente se sintió un poco reacio. Si no fuera forzado, Liz definitivamente no se escaparía. Después de todo, el campamento militar es el único lugar donde puede vivir temporalmente, pero en comparación con la felicidad de toda la vida, debe tomar una decisión….

En su vida pasada fue encerrada por ese hombre demonio. Ella no lo amaba, pero cuando renació siete años a tras se dio cuenta de que todo lo malo que le pasó fue por las conspiraciones de Maddy y su estupidez, aparte amaba a ese hombre demonio, no sabe en qué momento se enamoró de él.

La vida es tan están tan extraña pasó toda una vida huyendo de ese hombre demonio y ahora solo quiere regresar con él.

Liz siguio caminamos por la arena amarilla.

....

Cuando Harry se enteró su rostro estaba lleno de ira, Liz huyó del matrimonio., esta estúpida mujer ama huir de él en ambas vidas, pero no la dejara escapar la traerá de regreso la hará su esposa, le dará una lección y la encerrada en la habitación, se lo advirtió antes de que se fuera a la escuela si volvía a escapar seria castigada.

Harry envió al vicealmirante Liu con soldados a buscar a Liz.

Horas después Liz salió de las dunas de arena y miró enojado a los soldados Ming a lo lejos, gritando en voz alta.

"¡Hey! ¡Date prisa! ¡Es peligroso aquí!"

"¡Liz general!", Liu escuchó el sonido de Liz, miró a su alrededor y vio al delgado Liz en el desierto, así que corrió con los soldados.

Liz gritó en voz alta: "¡Yo, como General, te ordené que regreses rápidamente!"

"Sin embargo, el general tiene que volver con nosotros, de lo contrario no podemos volver con vida, si regresamos de todas maneras el tercer príncipe nos matara", Liu se negó a irse.

"No volveré contigo. ¡Quiero irme a casa!"

Liu dijo "vas a ser una princesa, eres muy bendecida, ¡nuestro señor es un señor guapo que es famoso por ser un hombre heroico!"

"No quiero ser una princesa!"

"General, las mujeres se casarán tarde o temprano. ¡El tercer Rey puede aceptarte, así que no seas terco!"

Liu miró detrás de Liz, se rascó el pelo y frunció el ceño.

"¡Date prisa, deja el desierto conmigo!" dijo Liz enojada.

Después, regresó un soldado se acerco y dijo apurado el tercer rey ¡Estaba demasiado apurado cuando salió y no llevaba agua!

¿No está loco el tercer Rey? Buscarla en el desierto sin agua, ¿no es eso equivalente a matarlo? Entonces preguntó ansioso: "¿Cuánto tiempo lleva el Señor allí?"

"Hace más de tres horas, un clima tan cálido y venenoso ...”

Cuando Liz escuchó que entró en el desierto, había un toque de emoción inexplicable en su corazón. En este mundo sin parientes, en realidad hay alguien que se preocupa tanto por ella, sin importar el propósito , Liz le están muy agradecida.

“Voy a buscarlo!"

Independientemente del sol abrasador, Liz estaba luchando por caminar a través de la gruesa arena amarilla.

Maldito Señor, ¿por qué buscarla, no sería mejor si una mujer fea se escapara? ¿Está realmente dispuesto a casarse con una mujer sucia y fea como princesa?

Si Liz supiera que es este hombre ahora y el de su vida pasada son el mismo no se sorprendería, ya que siempre ha tenido fetiches raros, cuando ella usaba maquillaje tan horrendo el aún así la amaba.

Liz miró el venenoso sol en el cielo y sollozó con tristeza. Si no podía encontrar a ese tipo, estaba realmente muerto. No mueras, Príncipe, cuanto más preocupado estaba.

Si no se encuentran a los tres príncipes, Liz no tiene la intención de abandonar el desierto. El tercer príncipe se aventuró en el desierto por ella, y no había razón para que lo abandonara. La muerte vale la pena, de todos modos, mantenerse vivo en la dinastía Ming no es interesante.

El cielo se oscureció gradualmente Liz estaba desesperada. Correr durante mucho tiempo la hizo casi incapaz de moverse. Miró el agua alrededor de su cintura, forzando su sed, no pudo beber más, debe espere hasta encontrar al tercer Rey, sin agua, no hay nada que pueda hacer.

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