Dejé pasar una semana sin tocar el tema de mi regreso con Alessia, ella se había relajado y volvimos a divertirnos como antes, era sábado y estábamos desayunando mientras me mostraba muy alegre lo que había planeado para que conociéramos los próximos días, me sentía un cobarde la noche anterior luego de hablar con Anna había tomado la decisión de volver el día lunes a primera hora, pero se veía tan entusiasmada que no sabía cómo abordar el tema.
Esa mañana fuimos a conocer el Castillo de Tomar, era un lugar realmente hermoso e imponente que se encontraba en Portugal en lugar llamado justamente Tomar.
caminábamos hacia la entrada tomados de la mano en silencio admirando el paisaje, Alessia llevaba consigo mi cámara fotográfica para capturar cada paisaje que llamaba su atención.
-Esto es realmente hermoso, y lleno de paz… ¿te imaginas vivir en un lugar así? Sería un sueño…-
Me miró con una sonrisa entusiasta esperando mi respuesta, ella no era apegada a ningún lugar, ni a su familia, al contrario de mí.
-Es un lugar magnífico, pero solo para visitarlo, soy un bicho de ciudad, me volvería loco aquí en menos de dos meses-
Dije tratando de que sonará a broma, riendo mientras volvía a tomar su mano.
-Ufff el estrés de la ciudad, ¿en serio? Eso va a matarte antes, ¿qué hay en la ciudad mejor que esto? -
Solté el aire de golpe y entendí que era el momento, si pasaba más tiempo sería más difícil.
-Mi familia Ale… mi familia es mejor que cualquier paisaje del mundo -
Soltó mi mano y se giró para verme directamente a los ojos con su rostro serio.
-¿Por qué quieres volver? Otra vez piensas en eso? Pensé que esperaríamos un tiempo más-
Me lo dijo con seguridad, y yo trataba de recordar cuando dije que esperaría un tiempo, si me pidió unos días… pero no un tiempo.
-Mi hermana y mi sobrina cumplen años en poco más de una semana, y quiero estar con ellas…extraño a mi familia, ya lo pensé mucho, y quiero que el lunes volemos de regreso-
Abrió los ojos como plato y casi ni pestañeaba
-Tomaste la decisión sin siquiera consultarlo… sin siquiera importar lo que yo pienso?-
Bajo la vista y tomó la cámara pasando las fotografías sin siquiera mirarme
-Ya te lo había dicho… siempre te incluí en mis planes, siempre te dije que volvería… solo te pido por favor que me entiendas -
Trataba de hablar con calma, la entendía pero necesitaba volver a casa, si… era egoísta pero como solía decir Anna, sentía hasta los huesos que debía volver.
¿Es por ella verdad? No es tu familia… es ella! Y solo necesitas que te acompañe para servirte de consuelo-
Volteo la cámara y me mostró una fotografía, que hacía mucho no veía pero nunca pude borrar.
-Por Dios Ale!!! Nooo, ya te lo dije mil veces y esta es la última vez que lo digo, ella es mi pasado y tú mi presente, había olvidado esa fotografía-
Lo cual era cierto, la última vez que la observé fue el primer día que llegué a Italia.
Me entrego la cámara de mala gana
-Mejor regresamos, ya no tengo ganas de estar aquí… estoy algo cansada y quiero dormir un poco-
Se giró en dirección contraria y comenzó a caminar, suspire y comencé a pensar que el problema era yo… odiaba este tipo de escenas, por el hecho de que siempre era sincero, podía entender su malestar, pero no podía entender el porqué explicar tantas veces lo mismo.
Llegamos al hotel y se fue directamente a ducharse en silencio, me senté al borde de la cama con mi teléfono en la mano y sin saber porqué, sin ningún motivo aparente le envié un mensaje a Marie.
** Lo mejor es que separemos nuestros caminos, de igual manera siempre podrás contar conmigo, pero es algo que hablaremos en el momento adecuado **
¿Por qué lo hice? No lo sé… fue puro impulso, al segundo que lo envíe me arrepentí, y recordé lo que Alex me repetía desde la universidad " Tus impulsos te llevan a cometer errores "
Alessia salió del baño, y comenzó a cambiarse en silencio, le pregunté si quería almorzar, quizás así podíamos hablar más tranquilos
-Respóndeme algo, ¿prefieres volver junto a tu familia así me pierdas? ¿Elegirás a tu familia antes que a la mujer que ames? Sea la que sea que elijas? -
Para mí fue el límite, ni siquiera Marie había sido capaz de ponerme a elegir entre ellos y ella, si me dijo que buscaba una mujer como mi ,hermana, pero siempre supe que lo hizo para lastimarme y no porque lo pensara, pero ponerme elegir entre ella o Anna, Alex y Emily jamás lo hubiese hecho… y pensé que definitivamente yo tenía una maldición encima. Me puse de pie y la mire sin hacer ningún gesto.
-Si… porque la mujer que ame y me ame jamás me haría elegir… estaría a mi lado y yo al suyo. Así que si tú pregunta es que elijo, los elijo a ellos sin dudarlo, quiero que vengas conmigo, pero esa ya es una decisión que solo tú puedes tomar-
Me di vuelta y antes de salir le dije que iba a almorzar.
Almorcé en el restaurante del hotel, Alessia jamás vino, ni bien terminé subí a la habitación para ver si ya estaba más tranquila y podíamos hablar.
La encontré haciendo su maleta algo molesta, me miro al entrar pero no dejo de hacerlo.
Vuelvo a Italia, mi vuelo sale en cuatro horas, creo que es lo mejor para ambos-
Me acerqué a ella y la tomé de las manos para que dejara de guardar su ropa.
-Me hace bien estar contigo, jamás te mentí, pero necesito volver Ale, no quiero lastimarte, quizás solo necesites tiempo, piénsalo, y si puedes llámame te estaré esperando -
Asintió sin ningún tipo de emoción en su rostro, no me dejó que la acompañara al aeropuerto, solo me besó y se fue sin decir más nada.
Al día siguiente desperté antes de las siete de la mañana, no me sentía aliviado, me sentía algo apenado de que hubiese ido, le escribí para saber si había llegado bien y como estaba, me respondió e intercambiamos un par de mensajes más, le envié mi dirección por si cambiaba de opinión, aliste mis cosas para irme de inmediato, no tenía nada a qué quedarme un día más, al llegar al aeropuerto tuve la suerte de conseguir un vuelo que salía en poco más de una hora, tenía ocho horas de viaje, así que llame a Alex para decirle que iba para allá y llegaría a almorzar con ellos, pero que no me buscara quería darle una sorpresa a mi hermana, así que mi amigo me dijo que me enviaría al chófer de la empresa a recogerme.
Una vez que el avión despegó, sentí ansiedad, nervios, miedo, era una de las pocas veces que sentía miedo de no saber a qué me iba a enfrentar, pero con la seguridad de que estaba haciendo lo correcto.
Al llegar como Alex me había dicho el chófer de la empresa me esperaba, apenas subí maldecí porque olvidé en el hotel el regalo para Emily, así que le pedí al chófer que primero pasará por el centro comercial que estaba cerca de la empresa, había una tienda que solíamos ir con Marie a comprar cosas para la pequeñita.
Baje y cuando estaba por cruzar la calle me quedé helado, Marie… estaba afuera apoyada contra la pared por encender un cigarrillo… la primera cosa que llamo mi atención fue su aspecto, no lucía ni cerca como antes, solía arreglarse, peinar su cabello, maquillarse… todo lo contrario a lo que veía en este momento, no lucía mal, seguía siendo hermosa, pero se notaba que además había perdido peso, y lo segundo que llamo mi atención fue verla que estaba por fumar, había dejado hacia más de cinco años, y solo lo hacía cuando estaba muy nerviosa o triste.
Las palabras de Alex vinieron a mi mente " Al mal paso mejor darlo rápido " y quizás tenía razón, lo que no podía comprender era si el destino se reía en mi cara, o era una puta broma, después de casi un año lejos de todos la primera persona que veía era a ella.
-Pensé que habías dejado ese vicio horrible hace años-
Le dije cuando llegue a su lado, estaba tan distraída que ni siquiera lo notó, pero apenas escucho mi voz, giro su cabeza y me miro totalmente sorprendida, tiro su cigarrillo y me miraba sin decir una palabra ni moverse de su lugar, sus ojos se llenaron de lágrimas y ví como tomo aire de golpe y cerró un minuto los ojos para contenerse, yo no estaba mejor que ella, mi corazón parecía que iba a salirse de mi pecho, lleve mis manos a los bolsillos para que no notará como me temblaban, sin dudas era mi Kriptonita
-Oh ya sabes tengo mis recaídas… como has estado? te ves muy bien-
Me dijo sin siquiera moverse, su voz era más baja que lo normal y se sentía algo nerviosa aunque lo disimuló bastante.
-Estoy bien, gracias, tu luces terrible, perdiste peso? -
Marie soltó una carcajada y juro que derribo todo tipo de barrera que había puesto entre los dos.
-Ya veo que estás bien, tu sinceridad sigue intacta, deberías aprender que jamás se le dice eso a una mujer-
Ambos nos miramos sonriendo como bobos sin decir nada, pero su mirada era distinta, como lejana, hasta que su teléfono sonó, lo saco leyó algún mensaje que le había llegado.
-Me alegra haberte visto, vine solo por unos regalos para Anna y la pequeñita… pero ya vinieron por mí, que sigas bien -
Se giró para irse así como si no pasará nada, estaba loca o que le pasaba? Ni que me hubiese visto ayer, no era una reacción típica de Marie, estaba fría y distante jamás había sido así, no supe decifrar si me dolió o me molestó, yo estaba hecho un estúpido tratando de controlar mis nervios y ella como si nada, en otro de mis impulsos tome su mano para detenerla, se giró a mirarme algo asombrada por mi acción, pero su mirada seguía siendo diferente, triste y decaída, es como si estuviese apagada, ese fuego que la caracterizaba, la fuerza de su carácter no estaba ahí, en otro momento si quería irse y la detenía me hubiese dado una mirada de odio y algún que otro grito.
-Marie debemos hablar no crees? No podemos fingir que nada pasó-
Le dije sin soltarla, mientras ella negaba con su cabeza
-No lo creo Theo, no es necesario ya nos hemos dicho demasiadas cosas, hasta de más… no te preocupes todo estará bien-
Jalo suavemente su mano para que la soltará, y aún así no lo hice.
-Vamos a vernos a diario, vamos a trabajar juntos, nos debemos una conversación civilizada… cenemos esta noche, me lo debes -
Que rayos estaba pasando conmigo, no quería volver con Marie pero tenía dudas, la amaba si… eso no cambiaría, pero de ahí a ser dos extraños había un abismo de diferencia. La ví dudar un minuto, pero bajo su vista, no pudo mantenerla en mí, esa no era Marie, ella era hasta incluso orgullosa y altanera, ahora parecía otra persona.
-Está bien, supongo que una cena no va a matarnos, iré al restaurante que te gusta a las 8 pm, nos vemos-
Solto su mano de mi de una sola vez y comenzó a caminar algo apurada, no volteo a mirar ni una sola vez, solo la ví subir a un automóvil que la esperaba, debía ser su novio o lo que fuera, y ahí quedé parado mirando totalmente confundido… esa no era Marie o tal vez no era la que fue mi Marie, me sentía molesto pero no podía entender porqué, pero sin dudas tenía que ordenar mi vida, y debía seguir adelante, aunque parecía que ella ya lo había hecho, yo estaba seguro que llegó el momento de terminar todo con ella de una vez, pero no podía hacerlo
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Updated 123 Episodes
Comments
Letu
porque no se logran ver las fotos ahora ?????
2025-01-26
0
Jenny Serrano
que hermosa foto de Marie
2024-02-01
1
Jenny Serrano
Theo Marie también a sufrido mucho
2024-02-01
1