capitulo 2

...*DASHA*...

Cuándo llegamos a Alemania vamos asta uno de nuestros departamentos, acomodamos todo y salimos rumbo a la mansión de los stain.

Cuando llegamos unos guardias nos permiten el paso.

— Hola chicas— Saluda Masón con su típica sonrisa de psicópata.

— Hola Masón— lo saluda Francesca.

— Hola— digo sin ganas de hablar.

— Mucho tiempo Dasha... Me enteré lo que te sucedió...— yo lo interrumpo.

— No hablemos de eso.

— Ok, creo que vienen por trabajo o no?— nosotras asentimos.

— Hola— saluda Pierce, él es más serio es el sociópata o eso es lo que dicen de él y yo opino que si lo es.— Mucho tiempo Dasha.

— Hola, donde esta Adam?— pregunto, entre los tres Adam es al único que considero que está cuerdo de los tres.

— Hola mi pequeña frutilla, tanto tiempo— la última vez que Estuve aquí fue dos días antes de decir que estaba viva y desde ese día no volví a hablar con ellos.— Nos enteramos lo que paso...

— No quiero hablar de eso, como has estado?

— He estado bien, pero ahora que las veo estoy mejor.— dice con su típica sonrisa tierna y llena de Cariño, se puede decir que Adam es todo lo contrario a sus hermanos.

— De que negocios tenemos que hablar?— pregunta Francesca viendo a Adam.

— Hola Cariño— dice con algo de picardía— Quiero hablar a solas de negocios.

— Me parece buena idea— es la toma de la mano y ambos van asta el segundo piso.

— Estás aburrida?— me pregunta Masón al ver como veo a la nada.

— Tienen a alguien para asesinar?

— Uno que otro objetivo, pero lo queremos con vida— dice Pierce.— Creo que tu mayor droga es ver como las personas caen a tus pies sin vida.

— Sí que la cambiaron— Mason analiza con la mirada, es como si pudiera ver mi alma y eso lo hace cada vez que me ve.

— No me cambiaron, solo quería ayudarlos en algo asta que ellos dos se terminen de acostar— digo con mal humor.

— Que carácter, donde quedo la chica de hace algunos años?— pregunta Mason

— No te interesa.

— Me agrada más tu nueva versión, no es tan la Dasha que protegían a todos.

— Esta se preocupa solo en saciar su apetito de sangre— dice con una sonrisa retorcida al igual que él

— Por lo visto ya me analizaron bien, me tengo que ir.

— Estas en Alemania Cariño y nosotros la controlamos, donde crees que vas?

— A buscar a alguien para saciar mi vicio de asesinar— Digo sin importancia.

— Yo quiero ver eso— arguya Mason— Austin!

— Si señor?— pregunta un hombre de unos 50 años cuando entra a la sala.

— Recuerdas al hombre que mandamos a buscar hace unos días— el tal Austin asiente— quiero que prepares los juguetes la señorita Dasha va a jugar con él.

— Si, señor— el Hombre sale.

— Va a ser tu regalo de bienvenida a Alemania.

— Gracias— Yo veo a Pierce quien no deja de analizarme— Ya encontraste lo que buscas?

— La verdad es que si— dice tomando si whisky, yo le saco el vaso y me lo tomo— Que haces?

— Deja de mirarme como si pudieras ver mi alma y tú— Señalo a Mason— No intentes descifrarme.

— Cariño yo ya lo hice y déjame decirte que... Estás muy dañada.

— Lo voy a tomar como un alago— yo me siento sobre Las piernas de Pierce quien me mira sorprendido— Ya te dije, deja de verme.

— Te pongo nerviosa Cariño?— él me aprieta más contra él.

— Quisieras, pero no siento nada en cambio tú— yo me muevo un poco sobre su erección— Si estás sintiendo cosas.— yo me levanto y me acerco a Masón quien vio todo con una sonrisa, yo lo empujó y él cae sobre un sofá repito lo mismo que hice con Pierce— Ya no me mires.

— Conmigo no vas a poder tan rápido cariño.

— Quieres apostar— yo comienzo a besar su cuello y moverme sobre sus piernas— creo que ya perdiste— Digo al sentir a su amigo.

— Señor ya está todo como lo ordeno.

— Ya vamos Austin.— el hombre vuelve a salir de la habitación y yo me levanto, pero antes le doy un último beso a Masón y luego camino hacia Pierce y hago lo mismo.

— Chicos no saben lo sexi que me veo torturando a alguien, quieren ver?— pregunto mientras camino fuera de la casa.

Puedo sentir sus pisadas detrás de mí, es impresionante que ni se movieran cuando los bese a ambos.

— Que comience el juego.

— No quieres saber por qué esta aquí?— pregunta Pierce.

— Yo solo vengo a asesinarlo no a preguntarle su vida o si es o no inocente.

— Me gusta— Dice Mason.

— Bien solo tienes que matarlo él ya nos dio la información necesaria.

— bien, primero comencemos por... su amiguito— yo tomo la tijera para podar los árboles, acerco la tijera y el hombre grita desesperadamente, yo corto rápidamente.— Seguimos por la lengua— tomo uno de los bisturís y lo paso con rapidez por su lengua haciendo que se quede sin ella, al escuchar sus gritos ahogados me da mucho placer.— bien sigamos, ahora que corto?

— Lo que tú quieras princesa roja— dice Masón.

— Me gusta princesa, pero queda mejor reina.

— Eres muy chica para ser reina.

— Tengo 27 no soy tan chica.

— Para nosotros si— dice Pierce.

— Si ustedes lo dice, voy a seguir jugando.

...

Al final solo llegué a cortarle una pierna porque el maldito se murió antes de que llegara a más.

Mi ropa esta llena de sangre y ahora me arrepiento de no haber usado algo más.

Cuando volvemos a entrar a la casa Francesca esta sentada en uno de los sofás junto con Adam.

— Se puede saber que paso?

— Nada nada más estaba borrando a alguien de su existencia— digo sin darle importancia.

— Donde se están quedando chicas?

— En un departamento a una hora de aquí— le dice Francesca.

— Eso es muy lejos.

— Bueno como ya sabes no me gusta estar comprando casas que en un futuro nada más la voy a utilizar una vez.

— Porque no se quedan?— pregunta Adam y veo la como la sonrisa de Mason se ensancha.

— Tú que dices Pequeña frutilla?

— Ya sabes que dónde vos valláis yo voy.

— Ok, pero tenemos que buscar muestras cosas.

— Hay una tormenta muy fuerte afuera, no van a poder conducir.

— Tengo que darme una ducha— digo señalando mi ropa llena de sangre.

— Princesa si fuera por mí te dejaría andar llena de sangre por toda la casa, no te das una puta idea de lo sexi que te ves haci— me susurra Mason.

— Puedes darte una ducha yo te presto una de mis camisas— dice Adam.

— Buena idea, ¿a cuál habitación entro?

— Si quieres a la mía— dicen los dos hermanos mayores de los stain.

— Ve a la habitación que esta al fondo a la derecha— yo asiento y subo asta la ducha, cuando salgo envuelta en una toalla tocan la puerta y es Francesca.

— Toma ponte esto— ella me da una camisa y un bóxer nuevo.

— Gracias, rubia— yo me los pongo con rapidez y bajo asta la sala.— Tengo frío.

— Tengo muchas formas de calentarte princesa.

— Como ya lo dije no siento nada por ti— Mason toma su saco y me lo da— Gracias psicópata.

— Me gusta la palabra psicópata de tus labios.

— Y se pueden escuchar mucho más sexi...— le susurró— Imagínate con mi respiración entre cortada y diciendo asme lo que quieras mi psicópata— digo fingiendo gemidos que solo él puede escuchar— Mmm de tan solo imaginarlo me siento Mmm.

— No juegues con fuego Dasha.

— Porque me puedo quemar? ¿Que pasa si me Quiero quemar?

— No te vas a quemar vas a arder.

— Quisiera ver eso... Pero no contigo— yo me alejo y voy asta donde esta Francesca con Adam.

— Que vamos a hacer?— pregunta Francesca.

— Tenemos que salir a primera hora mañana a Rusia.

— Lo sé o Irina nos mata.

— Mañana es el cumpleaños de su hijo?

— Sí. Francesca para que Estamos aquí realmente?— pregunto— Porque estoy segura de que no nada más me trajiste para esperar a que termines de follar a Adam.

— Estábamos hablando de negocios pequeña frutilla.

— Si, te diría que te creo, pero no soy una mujer mentirosa.— Digo con sarcasmo.— Puedes decirme que hacemos aquí?

— Mejor a eso lo hablamos después.

— Ok.

No quiero estar de insistente porque capas ella solo esta aquí por Adam.

Más populares

Comments

Marleys Sofia Cervantes

Marleys Sofia Cervantes

interesante aquí habra amor

2022-12-03

0

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play