Él cuerpo dé Simón permaneciá colgado dé su cuellos con los ojos muy abiertos.
Algo extraño sé dibujó en la sonrisa maliciosa dé los guardias. Qué parecía qué disfrutaban ver él cuerpo colgado.
" Atención... Celda 230 Él reo Simón bolivar sé a suicidado.. Atención " Reportaba uno dé los guardias por su radio.
Mientras Simón bolivar colgaba del techo.. Él comandante Martinez era llevado a la enfermería..
Él dolor qué sentía era insoportable y la sangré qué brotaba dé su boca casi hacía qué sé ahogará.
Él comandante llevaba sus manos en su boca y sé retorcía del dolor.
Unas gotas dé lágrimas salían dé sus Ojos.
Durante la noche le habían cortado la lengua y el no pudo hacer nada pará defenderse. Toda la noche sufrió por él dolor, hasta qué durante la mañana fué encontrado por los guardias.
Él comandante estába empapado dé sangré y su cara cubierta dé rojo. Él no podía hablar sólo podía quejarse, intentaba gritar para pedir ayuda pero no le fué posible ser escuchado, yá qué sé encontraba en una celda dé castigó.
Él médico y enfermera lo atendían mientras él guardía le daba la fatal noticia.
" Al parecer tú novio dé celda no soportó él remordimiento dé asesinar a sus amigos y decidió quitarse la vida " lo dijo sonriendo.
Él comandante lo miró horrorizado y con los ojos llenos por igual dé irá, no podía creer qué Simón sé pudiera quitar la vida.
" Cómo lo estás escuchando Mudíto.. Tú novio sé suicidó y decidió colgarse antes qué pagar por sus culpas " Nuevamente repitió él guardía con sarcasmo.
Él comandante no podía hacer nada ni siquiera decir algo. Yá qué sé habían encargado dé qué no volviera. decir una sola palabra.
Pero por dentro sabía qué todo estába ligado y Santiago Montesinos era él culpable dé todo...
Mientras tanto en otro lugar.. María estaba destrozada al ver a su madre muerta dentro de ése sencillo ataúd.
Sólo ella permaneciá sóla en una pequeña sala y daba él último adiós a su madre, su madre había muerto después dé luchar contra una enfermedad y sin tener la posibilidad de curarse.
La madre de María toda su vida fué sirvienta dé Santiago Montesinos.
Pero prácticamente era una esclava dé ése horrible hombre.
María nació en casa dé Santiago y desde ése día su destino sería servir al mismo amó y señor.
La madre de María intentó protegerla a toda costa y no quería qué su hija corriera con la misma suerte qué ella. No quería qué María sufriera.
Ella intentó qué María huyëra dé ése infierno, pero María nunca quiso abandonar a su madre y la acompañària hasta él final.
La madre de María era dé un pequeño pueblo y que por desgracia calló en manos de Santiago Montesinos.
Y ahora María tendría él mismo destino.
" Mamita por favor no me dejes.. Mamita llévame contigo " María sé aferraba al ataúd y miraba a su madre dormida.
María lloraba dejando caer las lágrimas sòbre el cristal del ataúd y en eso Santiago Montesinos entró seguido dé dos dé sus hombres.
" Mis hombres sé encargaran del cuerpo dé tú madre pequeña María. Lamentó decirte qué ahora tú me perteneces y seguirás pagando la deuda dé tú madre, hasta él final dé tus días.. Llevensèla .. " Ordenó Santiago a sus hombres.
" No por favor rengo qué estar con mí madre.. Nooo déjenme " María sé rehusaba a dejar a su madre.
" No té preocupes por ella, yá no puede verte ni oírte, además debes prepararte, té espera una larga noche." Los hombres la tomaron a la fuerza y ella luchaba con sus delgados brazos para soltarse, pero no tenía fuerza pará lograrlo..
Entré gritos desgarradores fué arrastrada hacía un vehículo. Los hombres la arrojaron dentro sin piedad alguna. María era una niña apenas y a su corta edad yá sabía lo cruel qué podía ser la vida en ocasiones, ella lo vivió juntó a su madre.
Pero ... María no sabía qué su infierno apenas comenzaba.
Él vehículo Estubo en marcha y a María le pereció eterno él traslado.
María miraba con sus ojos llenos dé tristeza cada calle por dónde pasaban, no conocía absolutamente nada, pues siempre permanecío en casa.
Ella veía por la ventana a través del cristal, no tenía idea dé qué era lo qué le esperaba.
Sé imaginaba qué sería llevada ha alguna casa pará encargarse dé la limpieza. Su madre le había enseñado y ahora podría hacerlo a la perfección.
Dé pronto Al dar la vuelta en una cuadra apareció una gran y enorme casa para ella era cómo una mansión, lujosa con un enorme estacionamiento y grande jardín.
Lo raro es qué muchos guardias custodiaban la casa en el jardín y otros más en la entrada principal.
Él vehículo sé estaciono.
" Hemos llegado a tú nuevo hogar pequeña María " dijo uno dé los hombres.
" Aquí es dónde trabajaré dé doméstica " contestó María inocentemente.
Los hombres sé miraron entre sí y sonrieron.
" Sí aquí trabajarás dé doméstica " dijo uno dé ellos riendo.
Los hombres bajaron y ordenaron a María que lo hiciera.. Ellos caminaron a la entrada y María con su carita dé niña inocente iba detrás..
" Está pequeña es la nueva adquisición del patrón " dijo uno dé los hombres a los guardias qué custodiaban la entrada.
" Tiene muy buen gustó él patrón, Seguro está niña dara muy buenas ganancias " Contestó él guardia al ver a María dé arriba, abajo.
María era demásiado inocente cómo pará comprender lo que ellos hablaban.
La puerta sé abrió y los hombres empujaron a María.
Dentro parecía un gran salón con todos los lujos qué ella nunca sé hubiera imaginado, llenó dé mesas una barra al fondo y botellas dé alcohol dé todo tipo y una gran barra en medió del salon con tubos qué pendìan del techo a la barra.
La barra iniciaba en una puerta como sí fuera una pasarela para modelos.
María no comprendía qué podría hacer ahí, ésa no parecía una casa dé familia.
Dos escaleras subían al segundo piso una por cada lado del salón y arriba sé podían ver muchas puertas, parecía un hotel con muchas abitacionès.
Según cómo María los había visto en la televisión.
Luego dé unos minutos Una distinguida señora pelirroja salió dé una abitacion.
Miró a María y sé acercó al guardia.
" La envía él patrón, encárgate para su debut está noche " le dijo él guardía.
" Acompañamè niña.. ¿ Cómo té llamas pequeña ? " Preguntó la señora.
"María señora " " Contestó tímidamente.
" Vamos María tenemos cosas qué hacer " Dijo la señora y la llevó con ella...
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Comments
Cinzia Cantú
Santiago tiene que pagar por todos sus delitos. Es un reverendo hdp
2024-10-24
0
Sandra Vasco
q rabia .. espero q sufra de la peor manera...q se arrepienta de todo el mal q hizo a tanta gente inocente solo por ambición..
2024-04-27
3
Lucia Feliciano Falcao
Maldito asqueroso es este hjp de Santiago 🤮🤮🤮.
2023-12-04
1