Al llegar a la casa mi padre estaba en la sala se veía un poco pensativo pero sabia disimular muy bien.
Señor Aragón: ¿hasta que llegaron las mujeres más hermosas de esta ciudad como les fue?
Arlet: muy bien padre, compramos los vestidos, el señor Montenegro ha dejado su carruaje a nuestra disposición.
Señor Aragón, es verdad, mi carruaje nos ha llevado a su casa a firmar algunos negocios luego me ha traído aquí.
Arlet, será que por eso se nota pensativo mi padre por los negocios con el diablo, pensaba mientras servían la cena.
Señor Aragón; bueno ballan lávense para que vengan a cenar, subimos cada quien, a su cuarto, yo me dirigí al cuarto de baño a darme una ducha rápida ya que mis padres no les gustaban que llegáramos tarde, me puse algo más sencillo un vestido de encaje color azul, y unas botas a juego con mi vestido.
Al llegar al comedor ya estaban ellos ay.
Señor Aragón: tu fiesta será muy esplendida, no quiero que se limiten con nada, entre más grande mejor, ustedes no se preocupen por el dinero que he estado ahorrando y como ya he serrado algunos tratos mi bolsillo ni sentirá lo gastado. Todas nos quedamos sorprendidas por lo que decía mi padre.
Señora Aragón: es verdad que no nos podemos limitar la clase alta como nosotros debe de echar la casa por la ventada en una fiesta tan importantes no queremos que hablen mal de nosotros.
Arlet: claro madre, y los invitados, yo realizó la lista de todos, era mi momento para invitar al conde Eddy y que pidiera mi mano para formalizar nuestro compromiso, estaba de igual manera emocionada.
Así trascurrieron los días sin darnos cuenta estábamos a una semana de la gran fiesta, al diablo como yo le decía no me lo había vuelto a encontrar, solo a su carruaje en algunas ocasiones, pero a el no.
Un día antes de la fiesta mi padre estaba más nervioso que de costumbre.
Arlet: padre que le pasa, tiene dias que lo notamos algo extraño, dije a la hora de la comida.
Señor Aragón: no pasa nada hija, dijo, al finalizar mañana serás toda una señorita y te presentaremos ante la sociedad, eso me tiene un poco triste porque sé que pronto encontraras el amor y te iras de casa. En el fondo me alegraban las palabras de mi padre, ya que significaba que me dejaría en paz con los matrimonios arreglados y le podría presentar a mi amado sin ningún problema, Eddy era un conde, no tenía tanto dinero como nosotros, pero era noble y yo lo amaba.
El día de la fiesta llego, los invitados comenzaron a aparecer, las familias amas acomodadas llegaron, teníamos una mesa reservada por familia, mis padres les daban la bienvenida y un sirviente los guiaba a su mesa, otros estaban listos para acomodar sus carruajes.
Yo estaba terminado de agregarme cuando tocaron mi puerta, señorita Arlet dice una trabajadora, los invitados ya han empezado a llegar, me pidió su padre que le avisará que ya es hora de bajar. asentí, me peiné con un chongo recogido, a la mitad y el resto del pelo suelto, unos pendientes pequeños y un collar que mi madre me dio. Mis botas eran igual violetas que mi vestido, mi ropa íntima era un poco delgada y picaba un poco generaba un rose en medio de mis piernas, pero me molesto hasta que ya estaba lista, y quitar mis bragas era tener que descambiarme y no tenía más tiempo. Decidí bajar así,
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Comments
Milagros Rodriguez
una revisión de la gramática no está demás, ay: interjección de susto o dolor, ahí: adverbio de ubicación, arreglado en vez de agregado, son pequeños detalles que en la lectura sacan a una de contexto, pero la trama está muy buena
2024-03-16
0
Micaela Mauna
Por qué tantos errores de ortografía?
2023-10-22
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M@rin
se escribe "ahi" 🤭
2023-04-08
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