I don't even need your love

Al día siguiente Ian ya podía ver con claridad los alrededores de la habitación en la que se encontraba, la luz del sol entraba por la ventana pero aún así la habitación se veía gris y triste lo cual hacia que perdiera un poco su magia.

Lo primero que hizo Ian fue intentar moverse, lo cual logro exitosamente, pero en cuanto intento levantarse de su cama su cuerpo se debilitó causando su caída al frío suelo.

Ian se quejo un poco, pero aún así logro arrastrarse un poco para reincorporarse en su cama.

–(¿Cuántos días han pasado? ugh...)

Ian respiro hondo, aún no podía calmarse pero aún así no se iba a rendir.

–(no se que tan peligroso sea ese tipo...¿cual es su maldito nombre? ah! si Damián).

Ian no sabía si llorar y patalear o comportarse de una buena vez para sobrevivir en esta situación tan extraña.

–(sobre todo ¿por qué Damián me trata con esa ternura? es tan escalofriante y hace que me sienta horrorizado, su voz es moderadamente ronca y grave, pero aún así da miedo).

Ian hizo lo posible para ponerse de pié, quien sabe por cuantos días su cuerpo estuvo inmóvil pero Ian pudo sentir que fue una eternidad.

Ian camino por toda la habitación, y se dirigió hacia la ventana, en cuanto abrió las cortinas pudo notar que las ventanas tenían rejas gruesas con espacios demasiado pequeños, pero Ian pudo notar que al rededor tan solo habían cientos y cientos de millas llenas de árboles.

Ian recordó las palabras de Damián.

"tampoco esperes escapar y llegar a algún lugar, lo único que lograrás será perderte"

–(¡MALDITA SEA! ¡PUTO LOCO DE MIERDA ME CAGO EN TODO TU PUTO ÁRBOL GENEALÓGICO!)

pronto el sentimiento de angustia dejo a Ian quien ahora solo sentía rabia.

Ian aún seguía muy débil como para hablar, pero aún así sus sentimientos eran imparables y se estaba descontrolado.

Ian comenzó a escuchar los mismos pasos de antes, Ian no se sentía ni un poco asustado, ahora tan solo le quedaba enfrentarse a ese monstruo.

claramente se escuchó como la perilla de la puerta iba girando lentamente, casi como en una película de terror, Damián entró sonriente como siempre a la habitación, en cuanto observo que Ian estaba de pié su cara cambio a una de sorpresa fingida.

–cariño, ¡ahora puedes levantarte bien! ¿cómo te sientes lindura?

Damián camino hacia Ian, haciendo que esté retrocediera unos cuantos pasos.

–no...

dijo Ian con un tono bajo, pero aún así se le escuchaba muy claro por el echo en la habitación.

Damián se acercaba más y más a Ian, ignorando completamente el hecho de que Ian estaba retorciendo para no ser tocado.

finalmente Ian choco con la pared de espaldas.

–(mierda..)

pensó Ian mientras desviaba la mirada para no tener que ver a los ojos a Damián, quien ya se encontraba agarrándolo del mentón.

–Cariño mío, ¿qué pasa? ¿estás enojado conmigo? por favor no lo estés, mi corazón se rompe.

Damian iba acercando más y más su cara a la de Ian.

–¿por qué me haces esto?...

Ian miro hacia arriba para mirar fijamente a Damián, este lo miraba con deseó imparable, al mismo tiempo también demostraba anheló y cansancio.

–oh, ¿no lo puedes ver? me perteneces y siempre lo haz hecho, querido mío ¿no lo recuerdas? tú y yo ya nos conocemos de hace mucho tiempo, incluso estamos casados ¿lo recuerdas? solo mira nuestros anillos...

Damian beso la mano de Ian, Ian quedó petrificado ante las palabras de Damián, no lo podía creer, hasta que miro su mano, pudo notar un hermoso anillo en su mano.

–¡eres un maldito mentiroso de mierda, yo nunca en mi vida te eh conocido, tu solo me raptaste y me encerraste en este lugar!

la garganta de Ian comenzó a doler fuertemente, pero aún así podia seguir alegando por toda una eternidad.

–¿que estás diciendo? eso no es cierto cariño~ ¿a qué estás jugando? parece divertido.

Damián sonrió como si no le importará.

–estás transtornado, ¿con quién me confundes? sea como sea yo no soy la persona con la que quieres imaginar que soy...

Damián dejo de sonreír al instante.

–amor mío...me estás asustando querido, no más juegos, por favor calla un poco o está vez haré que no puedas ni mover tus ojos, no quiero lastimarte oh también me dolerá ¿lo comprendes?

Damian acariciaba la mano de Ian con cierto anheló en el toqué, pero Ian aún asi aparto a Damián, empujándolo con todas sus fuerzas lo cual fue ilógico e inútil por qué eran muy pocas.

–Stellan...querido, no se que hice para herirte...pero quiero que sepas que estaremos bien ¿ok?

Damián beso la frente de Ian.

Ian quedó confundido, ¿por que Damián lo llamo así?

–yo no me llamo Stel-

Damián aclaro su garganta

–Cariño, debes estar agitado, ¿por que no damos un pequeño paseo? debes estirarte un poco.

Damian agarró el brazo de Ian y lo arrastró hasta afuera de su habitación, Ian forcejeaba lo más que podía pero simplemente era muy débil a comparación de Damián.

–¡SUELTAME, SUELTAME, SUELTAME! ¡imbécil!

Ian lloriquo y pataleo pero simplemente Damián no se inmutaba ni un poco, parecía que simplemente le estaba permitiendo a Ian esa clase de trató.

los gritos de Ian resonaban por el gran pasillo de la gran mansión.

mientras tanto Damián cantaba una hermosa melodía relajante.

–querido ¿podrías calmarte tan siquiera por unos cuantos minutos? das un poco de...miedo.

Ian no podía estar más estupefacto ¿el? ¿dar miedo?

–¿me estás jodiendo?

en ese momento Damián volteo, soltando un poco su agarre,justo en ese momento Ian se soltó y corrió lo más rápido que pudo, buscando una salida.

Damián ni siquiera lo siguió.

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