Ese día desperté igual que otros días, en mi cama con 3 viejas desnudas, me puse de pie, me dirijo al baño, tome una ducha con agua fría, sali prendí un cigarrillo 🚬 me deje caer en mi sofá.
Sonó mi celular (📱) -Dime jefe- conteste, -Te tengo un nuevo jale, (trabajo)- me dijo en tono serio.-voy para haya, está en su casa?- Él sonrió y dijo- Si acabo de llegar del gabacho apúrate, te enviaré lejos una buena temporada- colgamos, y algo me decía que el trabajo que él quería no me gustaría, pero aun así fui. Apague el cigarrillo me cambie rápido, tome mi moto mis gafas y me dirijo a casa de mi jefe.
Al llegar el tenía un cigarrillo en la boca, dimos una chocada de manos y puños,-como te fue en tu viaje - le dije, Él sonrió y me miro serio con su cigarrillo en los labios.
-Héctor iras al gabacho, te quedaras ahí y vigilaras que ella esté bien-. En ese momento ella vino a mi mente, esa mujer de nuevo, él fue al gabacho a verla, pero no nos dijo nada! Apreté los puños y él me miraba aún más serio parecía que quería matar, tome aire y solo le respondí...-Dime cuando quieres que salga?- Él sonrió y dijo,- ella está en una universidad estudiando junto con sus 2 hermanas, no harás mucho solo cuidar que nada le pase, y si algo sucede decirme, te pagaré el doble de lo que ganas en cada vuelta.-
Negué con mi cabeza y después solo le dije,- tan enculado estás de ella?- El enfado arrojo el cigarrillo, se puso de pie y me dijo,-ella es mi dueña Héctor si no lo entiendes, toma tus cosas y lárgate!- no podía creer lo que él decía, pensé que él estaba feliz, solo con saber que ella estaba bien, pero ahora el quería que fuera a vigilar la otra vez.
-Dime qué día salgo?- su cara cambio y dijo - mañana mismo - ok le dije y salí de su casa. Al día siguiente me despedí de mis amigos y me dirigí a USA, tuve que volar en una avioneta y rentar un departamento, lo bueno del viaje es que mi jefe pagaba todos los gastos.
Después de instalarme en el apartamento, compre una moto una BMW deportiva joder, me sentía en la gloria en ella, recién salida de fábrica negra, una belleza, eso si es amor a primera vista no mmds ja ja ja.
AL día siguiente mi jefe me envió la ubicación del lugar donde tenía que vigilar a su amada Ariane Salvatore, una peli negra universitaria, asi que espere sus indicaciones y después me dirigí a la dichosa universidad, llegue en la moto y me mezcle entre los estudiantes era algo fácil para mí, al principio era un nerd, obvio para no llamar la atención de nadie.
Observa todos los días a Ariane Salvatore, me sentaba en una banca fingía leer y observaba cada uno de sus pasos y ubicaciones, y de paso como siempre estaba con sus hermanas me toco mirar todo el desmadre que hacían las 3 locas.
Bailes, fiestas, borracheras un sinfín de locuras, había una de ellas una pelirrubia llamo mi atención, siempre tenía chicos a su alrededor más que las otras chicas escuche su nombre por casualidad, Katia Salvatore.
También estaba la otra hermana Salvatore una pelirroja Melissa.
Y la que después fue mi jefa Ariane.
Dure un mes así, cuidando de la que el jefe decía que era su mujer "El amor de su vida",tonterías, pensé.
Confieso, que me aburría bastante el solo ver, me estaba fastidiando y aburriendo. Asi que llame a mi jefe después del mes.(📱)- Jefe no puedo mas! oh me dejas hacer algo mas,oh renuncio y envias a cualquier gato!- Él se burlo y solo me dijo - has lo que te de la gana solo sigue vigilando - . Colgué el teléfono , con una sonrisa en mis labios, a jugar nenas.
Al día siguiente ya estaba sentado en la misma banca de siempre, la diferencia es que, está vez no iba vestido como de costumbre un p**o nerd, esta vez fui como suelo vestir.
Y oh sorpresa, más de una chica me miraba, y no me reconocían, pensaron que era el chico nuevo de la universidad el chico novedad.Un día antes había comprado un auto deportivo.
¡Baje del auto, y hay estaba Katia Salvatore, sonriendo con amigas platicando con ellas, sonreí y me dije, es hora de jugar, camine hacia ella y sin más ,la bese en los labios con fuerza,la cargue en el hombro, ella gritó - Idiota! ¡¡Suéltame! Y pataleaba, oía los gritos de sus amigas diciendo suéltala, no me gusta que me manden, ella se me antojo simplemente la cogí en brazos, -quien eres?- decía, solo le dije que se callara que era ruidosa y ella seguía gritando,- idiota! ¡Tengo novio! Suéltame!- la chica linda parecía una fiera salvaje.
Abrí el auto, la arroje dentro de la cajuela y gritaba y pataleaba subí rápido y maneje hasta una cabaña a las afueras del pueblo. Al sacarla estaba asustada y temblando, aun así se hacía la fuerte y valiente.
-Una fieresilla eso eres,-le dije en tono serio y la saque,mientras la miraba serio,los ojos de ella cambiaban a veces era tierna su mirada y a veces miraba, que salia fuego de sus ojos,(interesante, me decia a mi mismo, en el pensamiento)
-Déjame idiota quien demonios eres?- decía mientras me miraba con ira y desconcierto en sus ojos. La ignore totalmente sacándola de la cajuela del auto, sus golpes eran como pataditas de gato, la metí a la cabaña, joder no paraba de gritar no se callaba, asi que la lleve a la habitación sin decirle nada la ate a la cama de manos, y me fui la deje hay sola solo recuerdo que le dije.-hay te quedas hasta que regrese, grita! Que nadie te escuchara-. Ella seguía gritando,-quién eres? Ayuda!.
Tome mi auto y fui donde mi entrenador de perros ya tenía listo mi can, mi amado diablo lo mande traer tenía malas mañas, tube que pagar para que estuviera mejor entrenado y solo obedezca mi voz.
Al llegar baje del auto, pague lo del entrenamiento y lo subí al auto, me fui al apartamento de siempre y hay me quede. Ni siquiera recordé que no di ni agua a la chica Salvatore. Al día siguiente me fui a la universidad, había un escándalo por lo de la desaparición de Katia, sus hermanas estaban vueltas locas.
Se terminó mi rutina en la universidad. Me dirijo a la cabaña sin antes haber comprado unas hamburguesas en comida rápida, entre y no se escuchaba nada en la habitación, estaba tranquila para mi sorpresa.
-Fiera- le dije, contesto con sus ojos cerrados -quien eres?- solo le dije HÉCTOR, hizo un sonido con sus labios, abrió los ojos y se llenó de ira.-Quien eres!?- eleve una ceja y volví a decirle - soy Héctor - por alguna razón extraña ella no creía lo que yo le decía, repetía la misma pregunta y yo mi misma respuesta, estaba colmando mi poca paciencia.
-Idiota! suéltame me vas a matar de hambre!- la mire serio y la solté. -corre y te ira muy mal - le dije serio.
Y que creen ? corrio la mendiga,la sujete del brazo la pegue a mi y la bese con fuerza,sus labios fueron mios, la fieresilla me mordió, me araño el rostro asi que sujete sus manos con las mías mientras la miraba serio retando su mirada.
La pegué a la pared de la puerta, sujetando sus manos sobre su nuca, me empujaba, me pateaba, gritaba, parecía una fiera tratando de defenderse de un animal, peor que él! - Idiota!, imbécil! Suéltame estúpido!- gritaba y arañaba, al mismo tiempo que quería morderme, eso hizo que mis instintos, se prendieran más. Así que, eleve su falda, saque mi miembro y sin aviso alguno, la empeine y embestí. Oh~ salió ese sonido de mis labios y gritos de ella - ah~- gritaba creo que le dolió, salió una lágrima de sus ojos, y yo solo pensaba en saciar mis ganas con su cuerpo. La tome como un animal salvaje, sin compasión alguna, mordía su cuerpo manoseaba, toque, todo lo que quise de ella, y la posicione en los lugares que me dio mi gana, era como una muñeca. No pesaba nada, era muy ligera y fácil de manejar a mi antojo.
Ella gritaba de dolor y placer y yo gruñía, al principio sus gritos eran de dolor, después mis oídos solo escuchaban sus gemidos, sus -ah~- le di bastante duro tanto que note que sangro un poco, pero aun así, no me detuve, asta terminarla, y hacer que sus piernas temblaran.
Al terminar corrió al baño duro algo de tiempo, le grite -Sal!- y salió, me miro con odio y dijo -déjame ir ya tienes lo que querías!- la mire serio y le dije que no! Ella enfadó me arrojo uno de mis zapatos, salí y cerré la puerta mire mi diablo y le dije que no se moviera de la puerta, si ella sale él muerde, creo que ella me escucho porque solo escuche un berrinche y un- Idiota!- sonreí ligeramente, pero ella no vio eso.
Me fui! y, la deje ahi!, con el diablo cuidando.Tome el auto, llegue al bar de costumbre pedí una chela (cerveza) la trajo una mesera, luego ,mire que entro la peliroja hablando de Katia por teléfono con Ariane, al parecer estaban preocupadas, sonreí, termine mi chela y me dirigí a ella ,elevo una ceja,- que quieres?- me dijo seria, sin aviso alguno la tome de la nuca y la bese,la desgraciada me tomo del cabello corto y me pateo, pero ya la habia besando 🤣. solo pensé valió la pena.
La loca pelirroja tenía por apodo vampira en la universidad, pero para mí era una pitufina endemoniada, me mando sacar la culera del bar, no sabía que era la dueña del lugar, así que solo salí antes de hacer desmadre en el lugar, y dejarlo patas para arriba, no quiero problemas con mi jefe, solo salí.
Ese fue mi primer encuentro con la vampira(pitufina endemoniada). Al día siguiente en la universidad me coloque frente a Ariane Salvatore, no me reconoció tal vez las gafas, no tengo idea siempre use gafas, ella solo eleva su ceja y dijo -quien eres?- Locas todas hacen la misma pregunta y si digo, Héctor no me creen.
La ignore y seguí caminando, entre en el auditorio y como no había nadie encendí mi cigarrillo comencé a fumar.
Al terminar me fui donde la fiera, tenía hambre así que dijo,- loco! tú me quieres! Muerta - sonreí... y ella se sorprendió - creí que no sonreías- no lo hago le dije serio, pero me has hecho reír, no soy el chico lindo, que cualquier mujer quiere tener, ella cruzaba los brazos y hacia unos pucheros parecía una niña, eso me hacía reír.-tengo hambre me dijo- sonreí le dije -cociná,-hizo cara de disgusto y no acepto.- No comerás entonces - le dije y me arroje en la cama estaba muy cansado. Era de noche así que le dije ,tienes de dos, oh duermes en mi cama, conmigo oh en el piso, y que creen? Se acostó en el piso ja, ja, ja.Joder! Que me trague la risa tapándome con las cobijas, y ella enojada haciendo berrinche,- Idiota!- decía casi siempre.
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