Nombre: Nowaki Kusama, Función; Investigar en el campo de la medicina humana para poder conocer la verdad.

Esas fueron las primeras palabras que aparecieron en mi ordenador el día que fui encendido por primera vez, yo soy uno de los modelos más recientes que han construido, la nueva versión creada por el mismo Kuroda, un modelo superior, con más memoria, más capacidad y velocidad de procesamiento.

El doctor Seiya, un robot con cabellos castaños, ojos grisáceos, un modelo un poco antiguo me explico las cosas básicas de nuestro mundo; nosotros somos maquinas denominadas “robots”, sucesores de los humanos, actualmente los dueños del mundo, nuestra misión es lograr triunfar en donde ellos fallaron, para prevenir la caída de nuestro imperio tenemos prohibido sentir emociones genuinas, sin embargo igual se nos daba cierto grado de libertad, ya que en cada uno de los robots se incluía un chip especial que nos dejaba pensar de forma “independiente”, claro, siempre apegándonos a las reglas, la regla más importante de todas era no crear lazos, nadie sabe realmente que es eso, no obstante a mí me lo definieron como relaciones emocionales con otro individuo ,tal como los humanos hacían.

Según los registros históricos, el relacionarse con otros fue lo que llevo a la destrucción humana, por eso está prohibido para nosotros. Pero para poder mantener la tradición de nuestros antepasados decidieron otorgaron a cada uno un compañero de vivienda, para que no nos rompiéramos por la falta de comunicación, a pesar  de ser maquinas, el sociabilizar aunque sea en un mínimo grado es algo necesario.

Pero yo no le veía el caso, para mí no tiene sentido porque no podemos sentir ¿Qué importa si estamos solos?, daba igual, yo me sentía indiferente a todo, solo quería hacer bien el trabajo para el que me programaron; investigación celular de los humanos, mi trabajo es abrirlos y averiguar más de su historia, debido a que casi todos los registros que teníamos de ella se perdió.

Cuando me dejaron en mi vivienda estaba mi compañero de casa, un hombre llamado Hiroki Kamijou, era castaño, ojos color avellana, delgado, un poco bajo, y se notaba a leguas que era un modelo de hace siglos, a pesar de no poder demostrar emociones el  me pareció muy frívolo, incluso para ser robot, se supone que estamos programados con ciertas normas de cortesía, como saludar o intentar platicar de temas de cotidianidad, pero el solo me miro y se encerró en su habitación, en ese instante sentí un leve disgusto, leí mi chip independiente  y descubrí que me desagradaba mi compañero de cuarto.

Resignado a ignorarnos el resto de nuestras vidas, hice lo mismo que él y me encerré en mi pieza, al entrar vi un pequeño colchón sobre el cual me podía apagar, un closet para mis cambios de ropa, el cual ya poseía en su interior un par de batas de laboratorio con mi nombre bordado en ellas, también tenía un velador para guardar un par de objetos personales, aunque por ley no podía tener muchas cosas, después de todo estábamos programados con el mínimo pensamiento independiente y una casi nula interacción con otro individuo, aun así no éramos completamente diferentes a los humanos; nosotros también necesitábamos comer, descansar, contacto con otro ser y un propósito para vivir.

Yo no sabía mucho de humanos y realmente no me interesa para nada el tema, pienso que es mejor dejar el pasado atrás y seguir con el futuro.

Toda mi primera semana fue igual, me levantaba, iba al comedor que solo tenía dos sillas veía a Hiroki sacar su ración de comida para luego encerrarse en su habitación, ¿De qué me servía el castaño  si no interacciona conmigo? ¿Es que esta defectuoso o qué?, luego me ponía una de mis batas e iba al laboratorio, en donde cortaba las células de los humanos para ver su función, pero esto era realmente difícil, debido a la reducida existencia de muestras, no teníamos ningún material decente con el que pudiésemos trabajar.

 A mí por mi alta capacidad me dejaron a cargo de un equipo, el que estaba lleno de inútiles, no podía asociar como esa masa inútil de tornillos y circuitos  se puede denominar “Robot” si se supone que somos maquinas que representan a la misma perfección, sin embargo mis aprendices eran de lo peor; mi grupo estaba compuesto dos integrantes, el primero era Takano Masamune, un modelo casi tan reciente como el mío, él es un “Hombre” de cabellos azabaches, ojos color miel, el segundo asistente era aún peor, era pequeño, muy bajo, escuálido, cabellos negros, ojos cafés y respondía al nombre de Kisa Shouta, eran un completo par de inútiles,  en estos momentos me definiría como un investigador frustrado o creo que eso soy, según el diccionario frustración es la imposibilidad de satisfacer alguna necesidad y eso era exactamente lo que me ocurría por eso creo que estoy frustrado.

Toda la primera semana mi trabajo avanzo muy poco, y no me interesaba avanzar más en la materia, el tema era inútil, los humanos son una gran pérdida de tiempo y energía,  pero mi chip me lo ordenaba, debía obedecer a mis superiores, esa era la segunda regla, estoy consciente de eso, no obstante aun no puedo procesar él motivo de esa enfermiza obsesión con los seres humanos, su piel da pena de lo débil que es, no posee ninguna aleación de acero, tienes cabellos que no los protegen, son pequeños y son tan frágiles que no sé cómo sobrevivieron tanto tiempo antes de extinguirse.

Bueno continuando con mi narración, básicamente mi primera semana fue lo mismo, después del trabajo llegaba a apagarme sin tener ninguna pista sobre Hiroki, así marcharon las cosas hasta que el profesor Seiya me llamo para hablar conmigo, para una supuesta revisión de rutina, pero él quería saber algo más.

“Nowaki ¿Cómo te has sentido?, ¿No te has apagado repentinamente?, ¿Tus niveles de energía se encuentran bien?” Me pregunto el hombre de cabellos castaños con un tono de voz que no demostraba emoción alguna.

“Si profesor me he sentido muy bien, no me he apagado, mis niveles de energía se encuentran al máximo, y mi investigación aunque va algo retrasada debido a que mis asistentes son algo lentos,  promete mucho, aunque mis compañero no sean los mejores modelos con los que podría estar trabajando” Reclamaba esperando que me cambiaran a un mejor equipo, uno que se adaptara mejor a mis capacidades.

“Entiendo” El mayor se acercó a mí y se sentó a mi lado “Y dime ¿Qué hay de Hiroki?, ¿Cómo te estas llevando con él?” Su pregunta me sorprendió un poco, no me la esperaba ¿Por qué quería hablar del oji avellana?

 “¿Por qué me pregunta de alguien que no tiene nada que ver conmigo, en mi entrevista?” Pregunte subiendo mi nivel de molestia en un 20%.

“Es que él es algo problemático, estoy programado a ser honesto así que te lo diré, tu eres su cuarto compañero de vivienda, todos los otros pidieron un transferencia urgente, no lo soportaron, creemos que tal vez esta defectuoso y esta es su última oportunidad; si falla la convivencia contigo lo vamos a tener que botar por ser un obstáculo para nuestra sociedad perfecta, ¿Lo entiendes?, ¿Te ha dicho algo raro?” Yo negué con la cabeza, pero el profesor me seguía mirando con una cara llena de dudas.

“Usted ha hecho que mi nivel de curiosidad aumente así que le preguntare, si han tenido tantos problemas con él, ¿Por qué no lo botan de una vez?, es lo más lógico que pueden hacer” Dije mientras intentaba leer la mirada de Seiya.

“No podemos botarlo y ya” Soltó un leve suspiro “El, Kuroda, yo y otro par de robots más fuimos denominados la primera generación, somos los primeros modelos que se construyeron y gracias a eso digamos que Kamijo tiene el afecto de los gobernantes, quienes nos crearon a nosotros” Me miro sin vacilar, así supe que no mentía, sabía que eran viejos pero nunca me imaginé que tanto “Además él es el mejor en su trabajo, la literatura, sería un desperdicio si lo botamos” Me dijo con una sonrisa, la cual inmediatamente borro ¿Sonrió?, tal vez su chip de independencia era más libre que el mío.

“Entiendo, entonces por el bienestar de la sociedad tratare de llevarme con él y no causar inconvenientes” Declare fríamente.

“Gracias” Volvió a decir el oji gris “Y cuando lo veas dile que pase a vernos al menos una vez de acá al próximo milenio” Soltó una pequeña risa, este hombre es raro, se expresa más de lo que debería, tal vez los de primera generación tienen ese beneficio, pero Seiya me causa desconfianza, al primer movimiento raro que haga lo reportare con los superiores como defectuoso.

“¿Por qué no se lo ordena usted?, es un superior puede hacerlo” EL “Hombre” me miro sorprendido y con algo de miedo, lo pude detectar gracias a mi sensor.

“Olvida todo lo que dije por favor” Me ordeno con una mirada frívola otra vez, tal como debían ser las cosas.

“¿Es una orden?” Pregunte para estar seguro.

“Si lo es” Me dispuse a irme por la puerta pero antes de que me fuera el me volvió a interrogar una última vez “¿Te ha dicho algo?”

“De hecho él no me ha dicho absolutamente nada” Me di vuelta y volví a contemplar su rostro sin expresión.

“Bien, no te ha causado problemas, por favor trata de no relacionarte con él, Kamijou no es peligroso pero aléjate” Me ordeno el más bajo, luego de eso yo Salí de la habitación tratando de procesar lo que había sucedido.

Esas palabras del profesor quedaron dando vuelta en mis circuitos, claro que me alejaría de él, él era uno de los modelos más antiguos, debía estar lleno de cosas como virus, problemas con sus órganos o cosas así. Aunque no estoy seguro de que virus  habrá entrado en su sistema para que desarrollara esa personalidad tan cerrada y problemática, sin embargo aun así, con su irritante personalidad y todo, debo hacer un esfuerzo por llevarme bien con él, o mejor dicho no meterme más con Hiroki, eso nos ahorraría las molestias a ambos.

Esa noche llegue a nuestra casa y me quede un rato en el comedor, debo admitir que lo que el profesor Seiya dijo causo un poco de inquietud en mí,  subiendo mi nivel de curiosidad a un 70% , por eso trate de toparme con el castaño “por casualidad”, pero sin hablarle, solo quería verlo, observar mejor al sujeto, de ahora en adelante el seria mi nueva investigación a realizar, después de todo yo fui programado para averiguar la verdad de las cosas que me rodean, así que no estoy infringiendo ninguna de las reglas que tenemos.

Me quede toda la noche esperando a que él se dignara a salir de su habitación, lo cual no hizo hasta el día siguiente para tomar su ración de la mañana e ignorarme como hacia todos los días, ese Martes fui a trabajar con la energía realmente baja, estaba consciente de lo pobre de mí rendimiento,  sabía que estaba haciendo un trabajo mediocre en el laboratorio con las células humanas,  pero no podía evitarlo; me interesaba mucho más tener de sujeto de estudio a ese tal Kamijou Hiroki que a una célula humana.

Bueno en resumen mis supervisores se dieron cuenta de que yo tenía baja la energía, así que me llamaron a una revisión, me regañaron y explicaron nuevamente él porque era importante cargar toda la energía, o sino interferiría en la productividad de nuestra perfecta sociedad, maldición, me sentía como un novato, me trataron como si fuera un neófito que no sabía lo que hacía, me enfurecí tanto que no les dije el motivo de mi desvela, aunque ellos no preguntaron, así técnicamente  solo estaba haciendo omisión, si bueno era como hacer trampa en la ley, utilizar cada grieta que tiene y torcerla a mi favor, tal vez me estaba echando a perder como mi compañero de habitación, esos fueron mis pensamientos mientras mis supervisores me interrogaban, al ver que yo no estaba reaccionando decidieron mandarme temprano a casa para que recargara energía porque estaba siendo una carga en el trabajo.

Ese día llegue antes que Hiroki, tenía tanta curiosidad por él, ¿Qué podría haber hecho para que tres robot lo rechazaran como compañero?, aunque entendía más o menos su situación, porque no era muy agradable vivir con él, a pesar de ser una maquina si puedo percibir lo agradable de lo desagradable y también tengo gustos personalizados, como por ejemplo en los colores a mí me gusta el rojo, ese fue un capricho que desarrolle solo, no venía en mi disco, sino que se incorporó con el tiempo, me gusta pensar que yo decidí independientemente ese color como mi favorito, el cual tal vez me metería en más problemas de los que hubiese querido.

Estaba algo distraído con mis pensamientos, pero hubo algo que me llamo la atención, en la habitación de mi compañero pude divisar algo rojo, al entrar sin su consentimiento encontré un pequeño libro rojo, abierto en el velador de Hiroki, lo iba a dejar pero el color de la tapa realmente me gusto y eso hizo que yo quisiera leerme el libro, así que fui al comedor a analizar las secuencias numéricas que tenía, aunque grande fue mi sorpresa porque el libro estaba lleno de palabras e imágenes, este no era un libro de los que tenía registro o acceso en mi base de datos, por eso llegue a la conclusión de que era uno de los libros prohibidos, un libro humano llamado “La llama que arde en el corazón”.

Lo leí hasta casi acabar, era muy intrigante se hablaba de sentimientos tan raros como amor, odio, amistad, y acá los definían tan diferente al diccionario, por ejemplo el amor, en una escena la protagonista junta sus labios con los del hombre para decirle que lo ama, y que no puede vivir sin él mientras ambos compartían un cálido abrazo bajo la lluvia, esas palabras realmente me parecieron dulces, diferentes, lograron captar mi atención, sin embargo  el diccionario que tenemos instalado dice que el amor es un sentimiento prohibido que lleva a la destrucción y que cualquiera que lo llegue a sentir será desechado en el momento, no entendí, ni pude analizar bien esa divergencia que había en ambas definiciones. Las preguntas me empezaron  a atormentar: ¿Cuál era la definición correcta?, ¿Cómo se sentía amar a alguien? ¿Cómo alguien puede llegar a ser lo más importante para ti, incluso más que tui propia vida? O ¿De verdad era un sentimiento que nos llevaría a la destrucción? , además ¿Por qué Hiroki tenía uno de estos libros prohibidos? No sabía que creer, me quede procesando hasta que el castaño llego, y furioso me arrebato el libro de las manos antes de que pudiera reaccionar.

“¿Qué crees que hacer metiéndote en mis cosas?, maquina defectuosa” Esas fueron sus primeras palabras hacia mí, las primeras palabras que me dirigía en toda mi vida, no me pareció que él tuviese ni el chip de la dulzura o cortesía instalada, el oji avellana era realmente grosero, pero la curiosidad que yo tenía por el libro era mucho más grande que mi molestia, literalmente mi nivel de curiosidad era 80% y el de molestia 30%.

“¿De dónde lo sacaste?” Pregunte conteniendo mi rabia por llamarme maquina defectuosa, al menos yo no he vivido siglos.

“No tiene que ver contigo, idiota” Y tras decir eso se fue corriendo a su habitación y cerro con un portazo.

Creo que él tampoco tenía el chip de la tolerancia, estaba tan frustrado ¿Por qué debía vivir con un tipo así?, en ese momento me encontré con una sensación muy desagradable, porque quería saber del libro pero quería evitar a Hiroki y sus insultos, ¿Cómo obligar a alguien tan terco a hacer lo que yo quiero? El no encontrar la respuesta fue algo que me enfureció mucho más así que decidí apagarme para callar todas esas sensaciones desagradables que estaba teniendo

Nowaki Pov

Cuando me reinicie hice una revisión completa para chequear que todos mis signos “Vitales” funcionaron óptimamente, la energía estaba completa, los niveles de productividad, el funcionamiento, todo estaba maquinando al 100%, entonces ¿Por qué siento que hay algo que me molesta? Creo que siento molestia, digo nuestro diccionario la define molestia como; algo que hace perder la tranquilidad o el bienestar, hace que a alguien le resulte más difícil realizar algo. A pesar de tener esa desagradable sensación fui al trabajo, a, pero que inútil manera de perder mí tiempo, yo soy un modelo de última generación, al menos los jefes supremos debería haberme dado un trabajo importante digno de mis múltiples capacidades, no debieron ponerme a trabajar rodeado de ineptos.

Cuando llegue a mi estación de trabajo observe a Takano y a Kisa revisando un par de cultivos celulares, al menos esas montañas de tornillos sabían hacer algo, como ellos estaban realizando las labores menos importantes, las más sencillas, sin ninguna relevancia yo me programe para comenzar con el informe, el trabajo más difícil, relevante y por ende el que consume una gran cantidad de energía.

Mientras avanzaba con la investigación sentí una especie de error, no estaba trabajando a máxima potencia, algo andaba mal conmigo ¿Una falla?, no, descarte rápidamente esa idea por el chequeo que tuve en la mañana, tal vez ¿Sigo con molestias? Pero ¿Qué las causa? Decidí reproducir mis últimos recuerdos para averiguar el origen de mi malestar, no encontraba nada hasta que Hiroki apareció en las cintas con el libro, aa, así que era eso, me molesta no haber concluido con el libro, además aun no descifró por qué él lo tiene si está prohibido.

La misión que me programaron fue encontrar la verdad, y eso es lo que hare, pero no revisando bolsas de carne sin vida, sino que descubriré el misterio detrás de Hiroki, quiero saber el ¿Por qué lo han cambiado tantas veces de compañero de convivencia? y si descubro algo en contra de nuestra ley, lo denunciare a los jefes supremos sin importar que él sea primera generación o uno de los vejestorios más importantes en la literatura.

Ya estaba creando mi plan mentalmente hasta que uno de mis inútiles subordinados apareció sin expresión en su rostro, como era de costumbre.

“Nowaki, tenemos una falla con los cultivos” Declaro el peli negro más bajo lanzándome una mirada fría.

“¿Qué paso?” Pregunte autoritariamente, no me agradaba la idea de que esos ineptos saboteen mi trabajo.

“Yo no los deje congelando anoche, por ende hoy amanecieron muertos” Confeso el azabache, gracias a que puedo analizar muy bien los gestos, por ese pequeño tic en el ojo me di cuenta que oculta algo.

“Y ¿Por qué no los metiste al congelador? Recuerda que soy tu superior y debes obedecerme” Dije lleno de seguridad.

“Lo sé, está en mi chip que debo obedecerlo y tampoco puedo mentir, es que mi compañero de cuarto Ritsu ayer estaba diferente” Confeso algo ¿Nervioso? Si, él estaba nervioso lo disimulaba muy bien.

“Los problemas de tu compañero son sus problemas” Después me acerque al oji miel quedando a centímetros, lo sé porque los medí “No entablar relaciones, eso es lo que dice nuestra amada ley, Takano no me importa que hagas con tu vida personal mientras seas capaz de cumplir con tu trabajo y no infrinjas la ley” Luego sonreí “Si me entero que Ritsu está haciendo algo en contra lo reportare, tu deberías hacer lo mismo”

“Si superior” Proclamo sin vacilar mi asistente, bien, lo dejare en paz por ahora, el contacto es peligroso lleva a la destrucción.

Si un robot empieza a comportarse extraño, deja de ser productivo, comienza a tener  ideas que están prohibidas, a hablar temas vetados, es necesario reportarlo. Una vez reportado la sentencia es desconectarlos, volverlo a fundir y tratar de hacer algo útil con las piezas, es decir, el equivalente a la muerte en los humanos.

Cuando la jornada de trabajo termino me dirigí a mi hogar, al ingresar note que Hiroki aún no había llegado, me sentía bien, él era el causante de mis molestias, estuve todo el día reproduciendo el libro, por ende desarrolle una inmensa necesidad por terminarlo y averiguar el final de la historia, por eso guiado por mi misión de “Conocer la verdad” me infiltre en la habitación del castaño para buscar el libro.

Aunque lo que vi cuando entre alerto todos mis circuitos, su pieza estaba llena de libros, libros de todos los colores, muy viejos, guardados con cuidado, habían pilas de libros, todas de diferentes autores.

Los problema detectados según mis sensores eran dos; primero ninguna de esas obras estaban registradas, es decir, todos son libros prohibidos o libros escritos por humanos y en segundo lugar Hiroki excedió el número de cosas personales que se permitían tener, su pieza está más que excedida del límite, el rompió la ley, y es mi deber denunciarlo, aunque por normas de cortesía debo avisárselo personalmente.

Note que mi molestia se iba del sistema para llenarse con otro simulador de sentimientos, del cual no tenía ningún registro, era algo nuevo, era desagradable, no me gustaba, sin embargo decidí ignorarlo para terminar el libro de una vez por todas.

Me senté en la cama de mi futuro ex compañero de habitación para terminar la historia; cuando finalmente lo hice sentí de nuevo una molestia, el final me había desagradado, me pareció irracional, la historia hablaba del amor entre dos seres humanos, aunque ninguno se lo decía al otro, los años pasaron su amor incremento, hasta que ambos tuvieron que ir a una guerra en la cual murieron sin jamás haber realmente amado, que final más mediocre.

“TU” Me grito el castaño con un aura sombría al verme en su habitación “¿Qué HACES AQUÍ?” Pregunto furioso, sin educación como siempre.

“Vine a despedirme de ti” Sonreí mientras me acercaba al profesor de literatura.

“¿Despedirme?” Susurro bajo con una expresión llena de horror, esa expresión encendió otro nuevo simulador, ahora no me sentía muy bien, busque en el diccionario para averiguar que pasaba, después de buscar unos segundos descubrí que me sentía culpable, igual le reste importancia, no traicionare a mis superiores.

“Sí, soy un modelo de nueva generación ¿Acaso no creíste que me daría cuenta de la ilegalidad de tus libros?, tu rompiste las reglas, es hora de que te fundan” Declare sin vacilar, pero en mi monitor seguía subiendo el porcentaje de culpabilidad, ahora estaba al 40%.

“Hazlo” Proclamo, ¿Acaso estaba roto a algo? ¿Qué clase de máquina de segunda prefiere ser desechado?

“¿No vas a tratar de convencerme de no denunciarte con los jefes supremos?” el más bajo negó con la cabeza.

“Ya tuve suficiente” Musito con un hilo de voz “Suficiente de todo”

“Entonces no te reportare a menos que me expliques las cosas” Proclame, mi nivel de curiosidad estaba al máximo, no podía quedarme así.

“¿Entonces debo explicarte bien mi vida para que me DENUNCIES?” Grito molesto el castaño mientras yo asentía.

“IDIOTA” Grito arrojándome un libro enorme de unas 500 páginas, ya me irrite, oficialmente mi paciencia llego al 0%,  muy enojado lo acorrale contra la pared, aprovechando mi altura, y lo trate de intimidar.

“Me vas a explicar ahora, obedece a tu superior está en el chip” Dije sin vacilar esperando que se asustara.

“¿Mi superior?” Luego de decir eso comenzó a reírse a carcajadas “Niño, le estás hablando a alguien de primera generación, técnicamente yo soy tu superior” Él tenía razón.

“¿Entonces porque no te obedezco?” Kamijou suspiro “Por ciertas situaciones digamos que se me quito esa facultad”

“Explícame más” Murmure lleno de curiosidad.

“Bien, después de tener esta información denúnciame si quieres me da igual” Ambos nos sentamos en la cama, luego Hiroki comenzó a narrar “Somos cuatro los robots de primera generación, Seiya se designó como el primer médico, Kuroda se encarga de crear más robots, Tsukishima se encargaba de mantener viva la memoria y yo el conocimiento, nosotros cuatro fuimos creados directamente por el jefe supremo, sus primeras creaciones”

“¿Tsukishima?” Pregunte al no tener registros de aquel nombre, el oji avellana me miro muy nostálgico y deprimido.

“Él fue mi primer compañero, era uy importante para mí, para todos, pero cometió una falta innombrable, por eso el creador lo mato” Musito con los ojos vidriosos ¿Peor que le pasaba?, entiendo que su chip de independencia sea mayor y por eso pueda mostrar tantas emociones, pero el solo era un compañero más de cuarto, no había necesidad de simular sentimientos deprimentes por su perdida.

“¿Cuál fue el delito?” Pregunte sintiendo como mi curiosidad subía del 100%.

“No te puedo decir eso” Declaro lleno de determinación.

“¿Por qué no?” Seguí tratando de insistir en el tema.

“Porque el jefe me lo pidió personalmente” Si eso era verdad, pues ese otro debió meterse en problemas muy grandes.

“¿Qué tiene que ver esto con los libros?” Lo interrogue algo irritado, quería averiguar tantos de los misterios.

“El jefe supremo mato a los humanos, a excepción de algunos, conservaba a ciertos especímenes que le parecieran interesantes, yo y Tsukishima éramos los designados para vigilarlos además de nuestras tareas ya asignadas, un día un humano me paso un libro, mi chip me indicaba que debía botarlo, pero mi nivel de curiosidad era aún mayor, por eso decidí abrirlo y leerlo” Me miro lleno de seriedad.

“¿Los humanos siguen con vida?” Ahora el gesto de Kamijou era muy doloroso ¿Pero qué virus tienes este modelo tan fallado?

“No, luego de hacer un par de pruebas los mato a todos, no quedo ninguno” Dije con una mirada dolorosa y sincera, él no me mentía. Permanecimos en silencio un rato, el mayor se veía realmente alterado.

“¿Cómo se llamaba el libro que leíste del humano?” Pregunte cortantemente para poder romper el silencio.

 “De hecho es el libro que tú tienes en las manos” Me miro divertido.

“¿Y te gusto el final?” Indague algo molesto recordando lo mediocre y decepcionante que había sido el desenlace.

“Al principio no me gusto, lo encontré bastante mediocre y los personajes me aparecieron burdos, sin embargo después de vivir un par de cosas le encontré sentido al final, los personajes jamás confesaron su amor, pero tal vez ese sentimiento perduraría más allá de la muerte, tal vez no era necesario decir esas palabras porque ambos lo sabían” Su declaración me impacto activando mi sensor de emergencia, ese tipo de pensamiento esta totalmente prohibido para nosotros los nuevos modelos.

“Esa es un extraña forma de ver las cosas” Declare muy serio.

“Lo sé, pero después de ese libro no pude parar, continúe leyendo más y más, necesitaba conocer cosas sobre el mundo humano, me fascinaba todo, hasta que…” Un enorme gesto de dolor apareció en el más bajo.

“¿Hasta qué?”

“No, nada” Declaro con su típica frialdad “Y bueno así es como termine creando mis montones de libros”

“Pero la ley lo prohíbe ¿Cómo puedes tenerlos?” Esto no tiene sentido, no lo puedo procesar bien, Hiroki es como un error en el sistema.

“Mi chip de independencia es mucho más amplio que el tuyo niño, ¿Porque crees que solo somos 4 los de primera generación?” Proclamo con un aire de superioridad “Es una lástima tu jamás leerás las increíbles cosas que yo sí”

“Enséñame” Proclame sin temor, no dejare que este montón de tuercas oxidadas me gane en algo, además es mi deber conocer cosas acerca de los humanos, estoy consciente de que estoy cumpliendo las leyes con trampa, pero en estos momentos mi nivel de curiosidad y mi orgullo son más altos que el sentido de responsabilidad.

“Ja, ¿Por qué debería enseñarte?” Me miro desafiantemente.

“Porque si no lo haces te denunciare a las autoridades supremas” Respondí sin ninguna duda en mi voz.

“Si lo hicieras me harías un favor” De nuevo con ese tema, aa, creo que es hora de recordarle un par de cosas, con la edad ya se le deben haber olvidado.

“Hiroki nosotros somos robots, no sentimos, solo simulamos emociones pero no son reales, por ende es imposible que hayas sufrido en tu vida” El castaño se mordió el labio mientras apretaba fuertemente los puños.

“Tu” Musito para después verme con odio “NO ME VUELVAS A DECIR ESO” Luego me lanzo un libro a la cara “Si yo he sufrido o no, solo yo lo sé, mocoso no te atrevas a declarar algo así sin siquiera conocerme” Grito cubriéndose el rostro.

“Solo digo la verdad, está en mi chip recuerda” Este hombre debe tener unas fallas tan grandes para comportarse así.

“Ahora vete” Me miro dolido “Vete como todos lo hicieron o repórtame, ya me da igual” Después de decir eso salió de la casa.

Hiroki Pov

¿Acaso jamás seré libre?, siempre me atormentaran aquellos recuerdos Tsukishima lo lamento, debí apoyarte, jamás me lo perdonare, ojala ese tal Nowaki me reporte para poder acabar con mi sufrimiento.

Algo dolido fui con la única persona con quien podía contar, mi amigo de los últimas días, décadas, siglos, milenios, ya hace mucho perdí la noción del tiempo, mi amigo de mucho tiempo simplemente diré ¿Qué tiene de importante el tiempo? Nosotros vivimos por siempre, no debería interesarnos, pero ¿Para qué vivir por siempre? Si en mi día a día solo hay dolor y constantes recuerdos que me atacan.

“Hiroki” Me llamo sonrientemente el castaño.

“Seiya, ha pasado un tiempo” Respondí con un tono de nostalgia en mi voz.

“Adelante” Me invito a su consulta, la misma habitación blanca que yo ya conocía, no ha cambiado nada.

“¿Conociste a Nowaki?” Pregunte tratando de llegar rápido al tema, el oji gris solo asintió “¿Qué le dijiste de  mí?”

“¿Yo?” Me dijo inocentemente “Bueno me descubriste, no le conté tu situación, pero si le dije que se alejara de ti, Hiroki no quiero que te reporten, tienes demasiado talento para la literatura, no prives a los nuevos modelos de tu conocimiento” Murmuro.

“Quiero que lo haga” El más alto me miro sorprendido.

“¿Porque?”

“Porque ya no soporto esto, la culpa lleva años, muchos años comiéndome, ya no lo soporto Seiya” Dije con un hilo de voz apenas audible.

“No fue tu culpa lo que paso y si lo hubieras apoyado tu estarías igual de muerto que el” El castaño toco mi espalda tratando de calmarme.

“Lo sé” Musite.

“¿Te va a reportar?” Me miro lleno de preocupación genuina, ahora que lo pienso, no tengo idea de lo que quiere ese arrogante de Kusama.

“No lo sé, pero me dijo que le enseñara, ja ¿Puedes creerlo?” Declare con un tono de superioridad mientras cruzaba mis brazos.

“¿Quiere aprender literatura?”  Pregunto el mayor algo divertido.

“No solo eso, quiere aprender de los libros prohibidos” Después de decir eso solté una risa llena de arrogancia.

“Pues enséñale” Me aconsejo Seiya emocionado.

“Nunca” Proclame cruzando los brazos mientras me recostaba en la incómoda silla del consultorio del castaño.

“Hiroki, a mí no me engañas, tengo un chip de la percepción muy avanzado” Rayos era verdad, el oji gris es el mejor leyendo los sentimientos ajenos.

“Bien, me asusta un poco” Finalmente lo había dicho, se siente como un peso menos, es un alivio poder decirlo.

“¿A que le temes?” Me miro tratando de descíframe de nuevo, aa, el jefe supremo siempre prefiero a Seiya por eso le dio esas asombrosas capacidades para meterse en la mente ajena y saber cuándo alguien miente o no.

“Recuerdas a Ritsu ¿Cierto?” Proclame con algo de temor en mi voz.

“¿El pequeño castaño?” Yo asentí con la cabeza en señal de afirmación “Claro que lo recuerdo, después de todo pasa por lo mismo que tu”

“EXACTO” Grite parándome bruscamente de la silla.

“No lo proceso” Declaro el oji gris con su típica frialdad, él es capaz de leer a todas las personas, menos a el mismo, ese es su gran defecto, a pesar de que es quien más emociones puede simular, jamás las logra entender bien.

“Yo le hice eso a Ritsu, lo arrastre a mi mundo por enseñarle cosas que no debía” Susurre dolido por la situación.

“¿Pero aun trabajan juntos?” Yo asentí nuevamente “le asignaron un nuevo compañero entonces, que complicado” Murmuro el castaño pensando.

“Lo sé, ya soy culpable de tantas cosas, además que Ritsu tenga un nuevo compañero es lo que me preocupa” Declare muy triste.

“Dale a Nowaki una oportunidad para aprender, enséñale, bueno si es que no te reporto ya, y evita que suceda lo de la última vez” Me miro severamente al mayor, causando una leve corriente eléctrica por mi espalda.

“Bien” Musite ya resignado.

“Entonces te deseo suerte Hiroki, deberías venirme a visitar más seguido, a ti ¿Te quedan de las pastillas?”

“Aún no se me acaban, me quedan como para un mes” Dije tratando de recordar la cantidad exacta que me quedaban.

“Visítame en un mes, las tendré lista” Sonrió el oji gris mientras me guiaba a la salida, la cual seguía igual de sucia.

“Oye Seiya” Musite con la cabeza baja “¿Cómo esta Kuroda?” Pregunte algo asustado mientras la mirada del mayor se endurecía.

“El Kuroda que tú y yo conocimos está muerto Hiroki” Declaro con una profunda tristeza en su tono de voz.

“No es cierto, para mi sigue siendo el mismo de siempre” El más alto puso su mano en mi hombro mientras negaba con la cabeza.

“No, el ya no es el mismo, a quien conocimos lo perdimos hace bastantes años” Susurro el castaño con seguridad.

“Ves, otra cosa por la que soy culpable, ojala me haya reportado, si no lo hace, lo hare yo mismo” Me sentía horrible, yo era la causa de tantas cosas, jamás fue mi intención, no obstante de igual forma arrastre a todos.

“No digas eso, sabes que no te culpo por nada, además tú también sufriste mucho” Una mueca se armó en mi rostro al recordar las palabras del oji zafiro.

“No, yo no puedo sufrir, solo simulo emociones” Declare lleno de frialdad mientras me alejaba del más alto.

“Tsukishima jamás pensó de esa forma” Me grito mientras yo corría para no tener que seguirlo escuchando.

Hiroki Pov

“Tsukishima jamás pensó de esa forma”, las palabras de Seiya me daban vuelta una y otra vez, sabía que era cierto, el jamás pensó que nosotros fuéramos simples maquinas sin emociones, pero eso fue lo que lo mato, yo no cometeré dos veces el mismo error, llevo bastante sobreviviendo a mi manera, soy inteligente y a pesar de mi vejez, aprendo de los errores.

Cuando llegue a mi residencia pude divisar a Nowaki molesto, ja, ese niño tonto al fin aprendió a utilizar bien su chip de independencia, aunque su modelo es uno de los que menos libertad tiene, así lo ordeno nuestro supremo líder.

“¿Y bien me reportaste?” Pregunte con indiferencia mientras pasaba de largo, ignorando la presencia del oji zafiro.

“No” Declaro sin vacilar con esa característica frialdad suya “Te dije que no te reportaría si me enseñabas” Yo solté una risa irónica.

“¿Y quién dijo que yo te enseraría?” Lo mire molesto, el mayor se acercó a mi acorralándome nuevamente con la pared.

“Yo lo digo, soy mucho mejor modelo que tú, por eso no puedo dejar que un montón de tuercas me gane” O parece que alguien descubrió la arrogancia, aunque no me sorprende, estoy seguro de que es la única emoción que ahora simulara.

 “Prefiero que me reportes a enseñarte” Nos mirábamos desafiantemente, jamás seriamos compatibles.

 “Yo quiero que me enseñes” Insistía mientras agarraba mi rostro cerca mío, poniéndome muy nervioso.

“¿QUÉ CREES QUE HACES?” Le grite furioso mientras lo trataba de alejar, cosa que por supuesto era inútil, Nowaki es de los nuevos modelos creado con acero inoxidable de la mejor calidad, mientras que yo bueno doy pena.

“Leí esta maniobra en uno de tus libros, dice que es una forma de intimidar, por ende no me separare de ti hasta que accedas” Involuntariamente me sonroje ante su comentario, rayos este es peor que Akihiko.

“SUELTAME” Reclamaba mientras trataba de buscar una salida de su asfixiante contacto.

“Lo hare si me dices ¿Por qué no me quieres enseñar?” Yo suspire ya lleno de resignación, a este niño me molesta mucho.

“¿Eres idiota o necesitas explicación?”  Pregunte con indiferencia mientras el menor fruncía levemente el ceño.

“Yo no soy idiota, soy una maravilla de la última tecnología” Si, la arrogancia es lo suyo definitivamente.

“Si te enseño algo de mis libros prohibidos, estarás rompiendo dos de las reglas más importantes, la primera es que los robots no deben pasar más tiempo del necesario con otro y tu tendrás que pasar mucho más tiempo conmigo si accedo a enseñarte y la segunda es que te estarías enterando de cosas del mundo humano, por eso me niego, si lo haces te convertirás en una especie de cómplice rebelde” El peli negro miro la nada durante mucho tiempo, estaba analizando las posibilidades en su cabeza, aa, ¿Por qué debe ser tan terco y simplemente no se rinde? Además si le enseño tal vez pasara lo mismo que con Ritsu, y no expondré a alguien más a estos riesgos, a vivir como yo lo hago, porque mi estado es peor que la muerte.

“Ya termine de procesar” Proclamo orgullosos “Solo me demore 2 minutos con 43 segundos y 55 mili segundos” Yo solté un bufido ante su comentario.

“¿Y?” Pregunte medio impaciente.

“Rechazo tu teoría” Después de decir eso se alejó de mí y se fue dejándome solo en el comedor muy confundido.

¿PERO QUE RAYOS LE PASA? Me molesto hasta el cansancio para que le enseñara y después se va, debo hablar con Kuroda sobre sus nuevos modelos, cada vez le salen más insoportables, mis pensamientos escaparon sin que yo me diera cuenta, al escuchar el nombre de Kuroda mi mente automáticamente proyecto un recuerdo en mí cabeza.

Flash Back

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“Hiroki me siento muy decepcionado de ti, jamás pensé que serias cómplice de este rebelde” Declaro el líder con un tono de molestia mientras agarraba de los cabellos a Tsukishima, el cual puso una gran mueca de dolor.

“Líder supremo él no lo hizo solo yo también lo ayude” Proclamo Kuroda con un aire de desesperación.

“Como estoy programado para decir la verdad me veo obligado a confesar que yo también me involucre” Confeso Seiya con firmeza.

“¿Así que todas mis amadas creaciones me traicionaron así?” Los tres teníamos la cabeza gacha, me daba miedo verlo a los ojos, porque en ellos solo se reflejaba maldad pura “SON UNA BASURA” Grito aquel hombre furioso “Todos tendrán el mismo destino, la muerte, los fundiré y los hare de nuevo a excepción de ti mi querido traidor favorito” Le susurro al castaño que estaba temblando por el miedo a morir.

“Señor su decisión me parece apresurada” Analizo Seiya con su típica mirada de frialdad, aunque tenía razón, este montón de tuercas está loco, mato a toda la humanidad y ahora nos aniquilara a nosotros ¿Acaso quiere quedarse solo?

“No, ustedes son unos traidores, no se atrevan a faltarme el respeto de esta manera, ahora los desarmare y empezare a construirlos de nuevo pero esta vez no cometeré errores” EL oji verde se arrodillo ante el más alto.

“No lo haga líder, todo fue mi culpa, no le haga nada a Kuroda, todo fue mi idea” El peli negro lo miraba impactado y lleno de tristeza.

“ESO NO ES CIERTO” Gritaba desesperado tratando de liberarse de su pequeña prisión.

“Si lo es, yo me llevare toda la culpa, acepto las consecuencias de mis actos, acepto mi muerte” Declaro firmemente el pequeño castaño, mientras nosotros tres lo mirábamos asombrados ¿Acaso Tsukishima planea echarse la culpa para salvarnos?

“¿Solo fue tu culpa?” Pregunto con una sonrisa sádica el líder, nuestro amado creador, aquel que tenía poder para darnos la vida y quitárnosla.

“Si” Confirmo aún más seguro que antes.

“Hiroki” Mi sangre se congelo al escuchar al más alto pronunciar mi nombre “¿Es eso verdad? ¿Toda la culpa es de este inepto?” Me iba a negar firmemente no quería traicionar al oji verde, pero al mirarlo a los ojos vi que me suplicaba, él quería salvar a Kuroda, él nos estaba tratando de proteger del creador.

“Si, nosotros no fuimos cómplices toda la culpa es de ese robot” Proclame mientras me rompía por dentro, había traicionado a mi compañero de cuarto, a alguien que me mostro tantas cosas nuevas, por primera vez en mi vida sentí que algo se rompía, como si algo se desmoronara dentro mío y nublara mis circuitos.

“Entonces debe ser verdad si lo dices tú” Se acercó a mi prisión para susurrar “Mi estudiante favorito”

“No, Hiroki miente, él no lo hizo solo, por favor no le hagas eso líder” Rogaba el peli negro arrodillado lleno de desesperación.

“Kuroda sabes que no te tengo confianza, por ende creo más en Hiroki” Luego volvió a poner su típica sonrisa sádica.

“No lo haga” Rogaba el mayor mientras veía con desesperación al pequeño castaño el cual soltaba agua de su rostro.

“Kuroda, está bien, no te preocupes” Sonreía el oji verde mientras tomaba el rostro del azabache para susurrarle algo.

“Ahora llevare a cabo tu sentencia de muerte” Después de decir eso nuestro líder se llevó al castaño para siempre.

“Kamijou” Susurraba aun en shock por las palabras del oji verde el azabache “Jamás en la vida te vuelvas a acercar a mí, yo nunca te lo perdonare” Declaro con una mirada llena de odio, rabia, frustración, de todas las cosas que yo había leído alguna vez.

“Perdón, pero sabes que él lo quería así” Dije cortantemente intentando esquivar la mirada del más alto.

“Y tu como un cobarde dejaste que él se llevara toda la culpa” Lo mire asustado por su comentario “Tú eras el compañero de cuarto de Tsukishima, tú fuiste su pareja para vigilar humanos, tu hablaste con las mismas personas que él, te paso lo mismo y aun así él se llevó toda la culpa” Declaro sin vacilar.

“¿Qué tratas de decir? Dilo claramente” Lo mire algo confundido, aunque muy en el fondo ya sabía lo que él me diría

“Tú eres tan culpable como el” Proclamo sin dudar, era cierto yo lo sabía, ambos éramos culpables, pero yo jamás hice los mismo que el oji verde, la verdad quería pero nunca pude transformarme como él.

Fin del Flash Back

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 Cada día de mi vida un recuerdo distinto se proyectaba en mi mente involuntariamente, pero ¿Por qué debía ser ese? Kuroda tenía razón yo fui un cobarde que abandono a su amigo cuando más lo necesitaba, yo era culpable, y lo entendí demasiado tarde, después de muchos años cuando ya no había marcha atrás, realmente lo lamento, jamás podre dejar de sentirme arrepentido por eso, aunque más arrepentido estoy de no haber querido ser como aquel pequeño castaño y quedar a mitad de camino.

“VOLVÍ” Grito cierto modelo muy irritado mientras derribaba la puerta de mi habitación, un momento ¿Derribo la puerta de mi habitación? Mocoso sin respeto hacia sus mayores, es un insolente.

“¿Cómo planeas arreglar eso?” Lo regañe mientras apuntaba furioso a la puerta de plomo que alguna vez  estuvo de pie.

“¿Eh? Arréglalo tú” Sin poder contener la rabia agarre un diccionario y se lo tire en el rostro, sin embargo a este no le dolió.

“NO PUEDO; ES MUY PESADA PARA MI” Grite aún más molesto que la vez anterior mientras el oji zafiro soltaba un par de risitas.

“Jajaja eso es muy pesado para ti, se nota que eres un vejestorio Hiro-san” Reía aun el menor mirándome divertidamente.

“¿Hiro-san?” Pregunte confundido.

“Si, en ese libro leí que a las personas importantes o a las que respetas se les agrega un “San” al final del nombre” Proclamaba lleno de orgullo mientras yo le aventaba más cosas a la cara por ser un irrespetuoso.

“NO TOQUES MIS COSAS SIN PERMISO” Bufe muy molesto “Y ¿Por qué no Hiroki-san?” Lo mire extrañado.

“Porque mi chip me sugirió ese apodo para tener una relación de mayor confianza” Declaro fríamente como la máquina que era “Ahora toma” Después me arrojo en la cara un informe muy pesado.

“¿Qué es esto?” Lo mire enojado mientras ojeaba rápidamente las 400 páginas escritas, o 500 lo deduje por el peso.

“Es un informe que prueba que no estoy rompiendo la ley al pedirte que me enseñes cosas humanas” Empecé a leer el informe rápidamente, pero era tan repetitivo y aburrido que me comencé dormir.

“¿Por qué es tan largo?” Proteste lleno de sueño.

“Como eres de lectura lenta te lo resumiré, no estoy rompiendo la ley porque mi meta por sobre toda las cosas es buscar la verdad, y eso es lo que estoy haciendo, aclaro un misterio, y además debo ser alguien productivo para la sociedad, por eso cumpliré con los objetivos de mi nueva investigación”

“¿La cuál es?” Lo mire un poco confundido por el repetitivo e innecesario discurso que acaba de recibir.

“Buscar la verdad sobre Hiro-san y resolver todos sus misterios” Declaro el oji zafiro lleno de seriedad.

“¿Yo soy tu investigación?” Pregunte muy asustado, no, no, algo anda mal, él no debe darse cuenta de mi gran secreto o de seguro me reporta, y estoy seguro de que el líder al enterarse me hará algo mucho más cruel que la muerte.

“Si, creo que Hiro-san oculta algo y yo lo averiguare” Luego me lanzo una sonrisa llena de arrogancia, si, ese es su sentimiento favorito, ahora estoy seguro.

“Espera…. ¿Escribiste un informe de 400 páginas para decir eso?” El menor asintió orgulloso “IDIOTA” Grite lleno de frustración mientras me paseaba de un lado a otro tratando de controlar mi rabia.

“Y eran 476 páginas para ser exacto” Dijo con un aire de superioridad “Hiro-san ¿Por qué eres tan libre con tus emociones?” Esa pregunta me paralizo, si le respondía él se enteraría y me reportaría de seguro.

“¿A qué te refieres?” Trate de hacerme el desentendido mientras yo evitaba a toda costa su penetrante mirada.

“A que tu chip de independencia está demasiado avanzado” Mi miro entrecerrando los ojos mientras yo reía nerviosamente.

“Eso….es porque llevo mucho tiempo de vida por eso conozco bien cada emoción y mi simulacro es tan avanzado” Nowaki se acercó a mi levanto mi rostro para verme un rato quedándose inmóvil, lo cual me puso muy nervioso.

“Mientes” Declaro “Que no se te olvide con quien estas tratando” Ahí estaba de nuevo su arrogancia, que molesto es este niño, pero, ni modo, él sabía que yo mentía, así que resignado lo propuse un trato.

“Prometo enseñarte, si tu jamás en la vida vuelves a preguntar eso” Trate de negociar, siempre firme ante el enemigo.

“Acepto” Después de eso cerramos el trato con un contrato virtual de 321 innecesarias páginas que solo extendían mucho lo que yo propuse.

Después de aquello iniciamos con nuestras lecciones, las cuales eran realmente intensas, pasamos semanas estudiando en secreto, sin ninguna novedad hasta que un día una visita inesperada trajo consigo un fantasma del pasado.

Ritsu Pov

Me estaba ocurriendo, lo sabía, aquello era mi sentencia de muerte, me estaba pasando lo mismo que a Tsukishima, yo jamás lo conocí porque soy un modelo nuevo, sin embargo Hiroki me conto todo lo que ocurrió, y yo no quiero que la historia se repita, me asusta demasiado, ya, tranquilo deja de pensar en eso o alguien terminara notando tu comportamiento tan sospechoso, debo controlarme de alguna forma.

Cuando salí del trabajo, no había nadie en casa, Takano-san aún no ha llegado, le agregue el “San” por la admiración que yo siento hacia él, ya que este es un modelo muy esforzado que siempre obtiene buenos resultados.

Takano Masamune un compañero de vivienda que me asignaron hace un par de meses, al principio nos llevábamos realmente mal, nuestros gustos al ser muy distintos eran motivo de las contantes peleas que teníamos siempre, por eso fuimos donde el gran jefe a solicitar un cambio, no obstante nuestro líder se negó.

Por eso tratamos de llevarnos bien, de no discutir, de desayunar juntos y así poco a poco nos fuimos acercando, yo sabía que eso estaba muy mal en especial para mi debido a mi delicada condición, pero la compañía de aquel azabache me agradaba tanto que no me quería alejar de el en ningún momento.

Hable de mi condición especial con Seiya, el cual me indico que me alejara de Masamune antes de que fuera muy tarde, eso es lo que he intentado hacer, aunque me es casi imposible, no me gusta tener que estar lejos de él.

“Ritsu ¿Qué pasa?” Suelto un pequeño grito al notar la presencia del mayor ¿Cuánto tiempo llevara en aquel lugar?

“Nada” Dije tajantemente para luego huir a mi habitación, sin embargo antes de que pudiera el oji miel me había atrapado de un brazo.

“¿Nada?, pero si me has estado evitando toda esta semana” Reclamaba algo dolido el mayor mientras me acercaba.

“Takano-san, ¿No ve lo que pasa?” Pregunte agachado la cabeza “Nosotros somos amigos, hemos creado una amistad y eso está prohibido, estamos incumpliendo con la ley” Susurre bajo tratando de no desmoronarme.

“Lo sé” Musito el azabache “Sé que está mal, porque las relaciones nos hacen más débiles, pero tu compañía me hace fuerte” Levante la mirada con mi cara llena de rubor.

“¿Te hago más fuerte?” Pregunte algo atontado por su comentario, ruborizándome aun más al notar mis palabras.

“Si, tu amistad, tu compañía me haces feliz, aunque no podemos sentir, quiero vivir en aquella ilusión de ser feliz” Declaro con una sonrisa.

“Takano-san” Sin poder evitarlo guiado por mis impulsos, me puse sobre las puntas de mis pies y le di un tierno beso en la mejilla, su piel estaba muy fría, era de acero, en ese momento supe que no me amaba.

“¿Qué fue eso?” Pregunto confundido mientras se tocaba la mejilla con los ojos abiertos como platos.

“No fue nada” Musite muy decepcionado, ja, que ridículo y egoísta de mi parte pensar en ser correspondido.

“Pero a mí…” No termino esa frase jamás, el azabache estaba muy en shock acariciándose la mejilla una y otra vez.

“Siéntate voy a preparar la cena” Anuncie con la esperanza de que olvidara aquel beso, rayos, porque leí libros tan cursis.

“Me gusta cuando tu cocinas, me desagrada bastante el sabor de nuestras provisiones” Me elogio el mayor.

“Ya sabes que esta es comida de humanos, en otras palabras estamos cometiendo dos ilegalidades al mismo tiempo” El oji miel soltó una risita.

“Te preocupas demasiado” Dijo divertido mientras yo cortaba las verduras para preparar una deliciosa sopa.

“No lo hago, además ¿Cómo puedes romper las reglas tan fácilmente?” Lo mire de reojo interesando en su respuesta.

“Muy simple, la meta que me fue programada en la vida es: Apreciar cada cosa que nos rodea, y eso hago, yo estoy apreciando tu comida, tu amistad, solo sigo mis órdenes, técnicamente no estoy rompiendo ninguna ley” Lo mire con algo de ira acumulada, el realmente tuerce sus palabras según lo que le convenga.

“¿Y tú como tienes tanta libertad para romper las reglas?” La pregunta que hizo realmente me preocupo.

“Ya sabes de mi error, te lo informaron al momento de ser mi compañero de habitación” Me limite a decir.

“Oye Ritsu” Lo mire mientras seguía con mi labor de cocinar “¿Qué es el amor?” Su pregunta me callo como un golpe en el estómago, sin querer deje de concentrarme y me corte lanzando un pequeño grito de dolor.

“RITSU” Grito el más alto mientras corría hacia mí.

“NO TE ACERQUES” Chille furioso mientras trataba de ocultar mi herida.

“¿Ritsu?” Me miro preocupado, mientras yo preso por el pánico me fui corriendo al único lugar en donde me podrían ayudar.

Corrí por una hora hasta que finalmente llegue a la casa de mi amigo castaño, toque el timbre descontroladamente hasta que Hiroki salió muy molesto.

“Ritsu ¿Pero qué haces aquí? No se supone que nos veamos” Me regañaba el mayor, pero yo no respondía, solo podía temblar “¿Ritsu que pasa?” Me pregunto preocupado mientras me llevaba hasta su habitación.

“Hiroki” Comenzaba a sollozar dejando boqui abierto al oji avellana “Voy a morir como Tsukishima” Declare asustado.

“¿Pero qué disparates dices?” Me intento calmar sobándome la espalda para que respirara con más tranquilidad.

“Moriré” Sollozaba “Mira” Después de decir eso destape mi dedo, el cual había escondido durante todo el trayecto.

“¿Sangre?” Me miro sorprendido, mientras yo asentía desesperadamente sin ningún consuelo, iba a morir.

“Yo lo hice Hiroki, lo lamento, ahora moriré” El mayor me acariciaba suavemente mis cabellos mientras me calmaba.

“Ritsu” Lo mire aterrado “¿Acaso tú te enamoraste?”