Capítulo 11

Jessie

Al ver que Aarón me pone la tela negra sobre los ojos al principio me dio un poco de miedo, pero creo que él se dio cuenta de eso porque inmediatamente me dice tranquilizandome.

_ Jessie no tengas miedo._ me dice mientras me sujeta la tela por detrás._ te tengo una sorpresa y necesito que tengas los ojos cerrados._ me susurra cerca del rostro haciendo que un escalofrío recorra mi cuerpo por completo.

_ ¿Sorpresa?..¿para mí?..¿pero porqué?._ le pregunto confundido y un poco nervioso.

Lo escucho como hace un pequeño sonido como si estuviera tratando de no reírse ante mis múltiples preguntas, luego suelta un suspiro y me dice.

_ Solo es algo pequeño y pueda ser que no te guste mí disque sorpresa, siquieres mejor..._ me dice mientras intenta quitarme la manta pero yo con un rápido movimiento lo tomó de la mano evitando que lo haga.

_ ¡Me gustaría verla!._ le digo con una gran sonrisa antes de que diga algo más.

_ ¡Genial!...ahora sígueme con cuidado que yo te guío._ me dice tomándome de la mano con mucho cuidado.

Me guío con mucho cuidado por unos minutos mientras sujetaba mí mano, haciendo que con esta simple acción mí corazón latiera con fuerza, de pronto se detuvo y se paró detrás de mí.

_ ¡Llegamos!..espero y te guste._ me dice quitando la manta de mis ojos.

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Aarón

Hoy desperté con la idea de darle una pequeña sorpresa a Jessie para que pueda olvidar un poco el incidente que sufrió días atrás.

Me levanté y con el poco dinero que tenía fuí a la tiendita de doña Martha y compré algunas cositas como fruta, unos ricos postresitos caseros que ella hace y los vende ahí y un par de refrescos de sabor naranja.

Me dirigí hacia el pequeño bosque montado en mí vieja bicicleta, llevando todo lo necesario para la sorpresa de Jessie, aunque me preocupa un poco que no venga y me deje plantado ya que no le avise y no tengo su número de teléfono para poder avisarle.

La primera vez que lo conocí me dí cuenta que le gustan mucho las flores así que busque un lugar donde hubieran muchas de ellas.

_ ¡Aquí..este lugar es genial!._ exclamo feliz al encontrar una lomita repleta de flores y con una vista abierta hacia la ciudad.

Me dispuse a acomodar las cosas que traía en mí bicicleta empezando por una vieja manta para día de campo con pequeños cuadrados rojos, luego puse las frutas aunque solo eran uvas y un par de manzanas y por su puesto los postres de doña Martha que era dos rebanadas de cheescake ( pastel de queso), algunos dulces y los dos refrescos de naranja.

Ahora solo hacia falta que llegue Jessie, en verdad espero que venga...se que casi es hora del almuerzo en el colegio porque ahí también yo estudiaba y espero que a esa hora venga, estoy cruzando los dedos para que eso pase y no ser plantado.

Después de acomodar las cosas, las dejo ahí y me dirijo hacia el lugar donde nos vimos la primera vez por si él llegará a ese lugar.

Cuando llego me da gusto de verlo ahí contemplado el lago, me acerco lentamente y escucho como suelta un gran suspiro mientras mira el cielo.

_ ¿Porqué ese gran suspiro?..¿en quién piensas?._ le pregunto mientras me acerco un poco más.

_Te..te..esperaba a tí._ me dice nervioso sin voltear a verme y no puedo explicar pero esas simples palabras formaron una sonrisa en mí rostro, me acerque lentamente hacia él y con un pañuelo que traía en el bolsillo se me ocurrió taparle los ojos, pero creo que con esta acción lo asuste.

_ No tengas miedo Jessie, te tengo una sorpresa._ al decirle esto mire como su rostro cambió a uno de sorpresa pero a la vez confundido y ahí fue donde pensé que tal vez había sido un idiota al hacer esto, si claramente él pertenece a otro tipo de vida muy distinta a mía, trate de decirle que estaba bien que no era necesario de que fuera a ver la "sorpresa" pero él me interrumpió diciéndome que la quería ver.

Y al verle la gran sonrisa en su rostro no pude negarme hacerlo, así que lo tomé de la mano y con cuidado lo guié hasta el lugar que había preparado.

_ ¡Llegamos!..espero y te guste._ le digo quitándole el pañuelo de los ojos, me acerco a él para ver que cara tiene y si bien no esperaba que sonriera y saltará de felicidad pero cuando vi como sus anteojos se empañaban y por sus mejillas bajaban un par de lágrimas me asusté y mucho.

_ Jessie perdóname soy un idiota, no fue mí intención hacerte pasar un mal momento, ahorita mismo lo guardo._ le digo mientras camino hacia la manta.

No doy más de dos pasos cuando siento sus brazos temblorosos abrazándome la cintura.

_ Dejalo como esta Aarón..tú sorpresa me encantó._ me dice con su voz entrecortada.

_ ¿Entonces porqué lloras?._ le pregunto confundido y siento como recarga su frente sobre mí espalda mientras me dice con un leve susurro.

_ Por que estoy feliz...yo nunca he tenido uno día de campo en mí vida._ me dice esto mientras siento como sus manos tiemblan sin cesar.

No se si me he encariñado con él porque lo veo solo como yo, o si lo veo como un hermano pequeño al que quiero proteger, pero definitivamente al verlo llorar no lo pensé dos veces me dí media vuelta y lo abraze fuerte contra mí pecho sintiendo como sus manos temblorosas también se aferraban a mí.

_ A partir de hoy todos los días tendremos un día de campo..¿qué te parece?._ le digo aún abrazandolo mientras él solo asiente, agacho la mirada para verlo y puedo ver claramente como se le dibuja una sonrisa, algo que me lleno de alegría.

No puedo creer que una pequeña e insignificante cosa como esta lo haga feliz...pero si es así, entonces cada día le daré una con tal de verlo feliz y mirar esa sonrisa en su rostro..