La historia de Hall

Hall era un niño con padres muy buenos, él era lo que se conocía como "el niño bien", creció con buenas notas en la escuela, buena educación, siempre fue el alumno ejemplar, nunca le importaron las cosas como el amor, pero un hilo negro llegó a su vida.

Rachell, una chica en contra de las normas, necesitaba un tutor en todas sus materias, si no lograba pasar este curso, sus padres la echarían de casa, dejaría de recibir dinero y se mudaría a casa de sus tíos, fanáticos de la religión. Tan solo de hacerse a la idea que la convertirían en "una niña bien" le daban náuseas, decidió pasar las materias con el mínimo de calificación, sin tanto esfuerzo, y qué mejor persona para enseñarle que, el chico ejemplar.

Rachell: Eh, Hall, espera ahí.

Hall: ¿Rachell? ¿Qué sucede?

Rachell: Necesito de tu ayuda, necesito alguien que me enseñe un poco... Que me ayude más bien... Debo aprobar todas las materias o me echaran de casa.

Hall: Ya veo... Está bien, te ayudaré.

Rachell: ¿Así sin más?

Hall: Sí, ¿por qué?

Rachell: Te daré algo a cambio de que me ayudes

Hall: ¿por qué? yo pensaba hacerlo sin nada a cambio

Rachell: Tranquilo, deberías empezar a pedir cosas o te agarran de su puerquito pensando que puedes hacer cualquier favor, vale, pídeme lo que quieras.

Hall: Oh, no, no, no, no, no, Tranquila, no es que acepte favores de las demás personas.

Rachell: Y entonces, ¿por qué me has aceptado a mí?

Hall: bueno, creo que eres bonita, así que aceptaría cualquier cosa que me pidieras

Rachell: Gracias, jajaja, creo que eres el primero que piensa que soy bonita - dijo mientras se ruborizaban sus mejillas.

Hall: Entonces, te veo el lunes después de clases, en la biblioteca para que estemos con más calma.

Rachell: Vale, muchas gracias.

Llegó el tan esperado lunes para Rachell y Hall, comenzaron a estudiar con Ciencias y matemáticas, las materias más conflictivas

Hall: pues mira X es igual a Y, en este caso quedaría que el número 3...

Rachell: Para, para, para, para, para ahí, Dios, mi cabeza va a estallar y, ¿qué demonios es X y Y?

Hall: Jajajaja, eres muy graciosa

Rachell: Oye, no te burles, ¿acaso hay algo que no sepas?

Hall: Pues verás, no sé mucho acerca del amor y sobretodo, acerca del sexo... Sé que tú podrías enseñarme

Rachell: ¿¡Qué!?

Hall: Jajajaja, era una broma, de verdad eres muy graciosa, mira X y Y...

Rachell: ¿De verdad lo quieres?

Hall: ¿Mmm? ¿Qué cosa?

Rachell: Saberlo... Acerca del sexo...

Hall: Oh, realmente lo decía en broma, pero no tengo ningún inconveniente en hacerlo.

Rachell: pues mira que yo te puedo enseñar - dijo mientras llevaba la mano de Hall a su pecho

Hall: ¿Por qué harías eso? -dijo con una sonrisa sarcástica.

Rachell: Porque te debo un favor y me gustaría agradecerte enseñándote algo yo también...

Hall: Gracias, de verdad, pero preferiría que mi primera vez sea con alguien con quien establezca una relación - quitó su mano y se volteó al libro

Rachell: Ya veo... Entonces... ¿Quieres... ¿Quieres ser mi novio? - preguntó avergonzada y con miedo a que la rechazara.

Hall: Está bien - contestó con una sonrisa y sus cachetes colorados

Rachell: ¿De verdad? No pusiste ningún "Pero"...

Hall: Es en serio, jajaja, ya te lo dije antes, eres muy bonita.

Así fue como Rachell y Hall empezaron a salir.

Rachell logró pasar todas sus materias.

Cuando tenían 3 meses de noviazgo Hall decidió que quería tener relaciones sexuales con Rachell, ella obviamente aceptó.

No tenían relaciones tan seguido, pues Hall era muy reservado con ese tema y Rachell siempre le preguntaba si quería hacerlo.

5 meses de relación.

Hall: ¿Hola? ¿Rachell? Por favor contesta mis mensajes, no he sabido nada de ti, hace ya una semana que no te veo, ni siquiera vas a la escuela, por favor dime si estás bien.

Resulta que Rachell había desaparecido, Hall no la encontraba, le mandaba mensajes, la llamaba, en la escuela no se había aparecido, comenzó a ponerse histérico. Sus padres al notar esto le preguntaron sobre qué le sucedía, éste admitió tener una relación con Rachell, sus padres se lo prohibieron, pues esta chica era mala influencia, pero el no quiso darse por vencido.

Al llegar el miércoles, Rachell apareció como si nada en la escuela.

Hall: ¡Rachell! ¡Rachell! -Gritaba mientras se acercaba a ella para detenerla.

Rachell: ¿Qué pasa?

Hall: ¿Qué pasa contigo? Te desapareces por una semana, no contestas mis llamadas ni mis mensajes, no llegas a la escuela, estoy preocupado por tí, ¿qué sucede? ¿por qué te desapareciste?

Rachell: Lo siento, Hall, mis padres se dieron cuenta de nuestra relación, me dijeron que debíamos terminar

Hall: ¿Qué? ¿Por qué?

Rachell: No lo sé, Hall. Por favor, déjame en paz - pasó de él como si nada.

Hall: No, a mi me pidieron lo mismo, no voy a desistir contigo, Rachell - se puso enfrente de ella de nuevo.

Rachell: No es mi decisión, Hall.

Hall: podemos seguir estando a escondidas, créeme, si aún me amas, por favor... Te lo suplico...

Rachell: Está bien, Hall, pero tenemos que ser muy discretos.

Hall: Si, lo sé.

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