Complicaciones

Los nervios se apoderan de mí, así sin más. Sofi, que estaba mirando su teléfono, escucha el ruido que hace mi mano al tocar el borde de metal de la cama.

- “Qué pasa Morgan? “. --Su cara no me tranquiliza.

- “Nada,… “. --Me intento calmar, respiro, pero mí cabeza duele.

- “Llamaré al médico". --:Lo dice seria pero.....

- “No!.....No quiero pastillas, se me pasará, solo ya, ya!!”.

- “Es porque no ha llegado French aún?". --Me sujeta la mano, pero sin quererlo aparto la mía.

-;“No, no es eso,… no lo sé… además, vendría en la noche y ahora llegará?". --Las dudas se apoderan de mí. Desaparece por trabajo, llegará tarde, ahora pronto.. Dios, más dudas no.

Ella me mira, parece que mí cara me está delatando.

- “Su trabajo, al igual que el mío, tiene estas cosas”.

- “Joder, Sofi, y debo fiarme de que podrá manejar la situación conmigo así? Ahora solo está Shila con vosotros, es más fácil, además sabe cuidarse y es obediente, pero yo no, no soy así”. --Acabo de darme cuenta, que llevo tanto tiempo solo, haciendo las cosas a mí manera que no confío en que esto salga bien, solo veo agujeros oscuros, otros que me trataran como marionetas para atarme con sus hilos, para hacer lo que ellos creen que está bien pero no.

- “Morgan, enserio, estás poniéndote nervioso porque empiezas a ver cambios en tu vida muy bruscos. Es normal, pero los cambios son buenos”.

- “Los cambios me han llevado a estar aquí “. --Mí corazón se acelera, me cuesta respirar, pero no quiero más pastillas que me hagan ser un cordero. No, me quedaré dormido, volveré a despertarme y a decir que sí…

-;“Mejor no te levantes, llamo al médico antes”. --Insiste, demasiado. Me levanto, sin apoyar el pie, joder... el corsé, me molesta.

-:“No!!! Solo necesito salir a tomar el aire, solo y ya”.

- “Como vas a bajar así, mírate!!! “. --Se calla de repente, como si se diera cuenta que esa frase sobraba.

Me da la risa nerviosa, bajo la cabeza, los ojos se humedecen. Me ha herido en lo más profundo. -- “Escucha, ha parecido mal pero no era eso lo que quería decir”. --No me convence, y sigo hacia la puerta dando saltitos.

- “Me ha quedado claro Sofi, muy claro”. --Salgo de la habitación. Mierda, no está la silla. Pero necesito salir y sigo hasta el ascensor. Sofi va a una distancia detrás de mí. Llega el ascensor, entro, ella quiere entrar pero.....

-;“He dicho solo, y te ahorro la amenaza, ya la digo yo.... ' Quieta ahí o llamo al médico, o a la enfermera, o al psiquiatra?' … “. --Se cierra y no ha entrado.

Tengo suerte que la gente no me mira mucho, es un hospital después de todo. Llego a la salida. Aire puro, el corazón sigue acelerado pero respiro mejor. Busco alguien que pueda invitarme a un cigarro. Solo veo a un hombre de unos cincuenta y tantos. Le pregunto y me da uno. Por cortesía no me alejo y me cuenta su vida. Vaya, accidente de tráfico, alguien se saltó el semáforo y las piernas rotas. Me pregunta por mí, digo que una pelea… Jajaj es gracioso, me dará la charla porque soy muy joven para pelearme así. Tiene un par de nietos pequeños y les dice que no hay que pelearse.

Que majo él, pero la vida es más que eso.

Acabo el cigarro, me disculpo porque me tengo que marchar.

Una de las cosas que me enseñó Ron es la disculpa por tener que dejar a alguien con la palabra en la boca. Joder, tanto le decepcioné para acabar así? Y lo mismo con Crik. Me ofrecí, el servicio era gratis. Al final, no se donde están. En la cárcel? Me culparán por ello?

Pensando he llegado a la habitación. Sofi me mira cuando llego pero paso de decirla nada ni de mirarla.

- “Hueles a tabaco”.

- “Sí “. --Me estiro en la cana, paso de hablar y miro al techo borroso que veo ahora. Mierda.

Todo está en silencio. Se oye algún que otro paso pero nada más. Me acuerdo de la naranja. La cojo, y me doy cuenta que no la podré pelar fácilmente.

-;“Te ayudo”. -- Intenta cogerme la naranja, pero no quiero, ya me ha humillado bastante. No insiste, se vuelve a sentar en el sillón.

Como puedo, pelo la naranja aunque me ha llevado tiempo. Uff, está algo ácida pero da igual. Alguien viene. Por una vez, espero que no sea French.

- “Hola, Vengo a deciros que la muestra de las cacas ha salido bien. Algo de sangre por el esfuerzo”. --La enfermera sosa, borde. Jajaja después de esto con Sofi, hasta ella parece maja.

Me levanta la cara. Me mira fijamente.

- “Cuando le ha dado un ataque de nervios?”. --No se si me pregunta a mí o a Sofi.

- 'Hace unos minutos”.

- “Vamos no me jodas, no me puedo poner nervioso porqué si?!!". --La enfermera borde me enseña algo.

-;“Mírate aquí “. --Me muestra mi muslo izquierdo. Lo tengo arañado. Me sorprendo, que hacen ahí esos arañazos??.

- “Hay muchas maneras de expresar los nervios y esto, te acaba de delatar”.

-;“JAJA, vaya, con la bata esta que llevo encima usted ha visto los arañazos? Venga!!! Ya los tendría y lo usa para esto”. --No tengo ni idea de lo que pasa.

-;“Los tics nerviosos es lo que tienen y tu has bajado hasta abajo rascándote el muslo”.

- “Lo que tu digas”. --Sigo con mí naranja, pero me la quita.

- “A las 9 vendré a hacerte una analítica. Y te daré la medicación. Voy a informar de esto, porque no puedo darte nada ahora sin autorización “.

- “El psiquiatra ya me ha dicho que me pasará más veces, no es nada nuevo”. --Ella me mira, pero no desafiante, sino como si leyera a través de mí.

- “Si quieres te cuento la de chicos que acaban suicidándose por empezar así, o mejor, te presento a alguno, de los que puedan a hablar claro, porque la mayoría, se van al otro mundo o quedan tan mal que no saben ni su nombre”. --El tono con el que me lo dice me da escalofríos. Me quedo callado. Me devuelve la naranja y le dice a Sofi que si vuelve a pasar que avise, sin peros. Y se marcha.

Nadie dice nada. Me quedo mirando la naranja. A los arañazos. Joder… si no como, va a notar que estoy nervioso; y si como…

Me pongo a comer, ella va de un lado a otro. Mira su teléfono. Sale a fuera de la habitación. Entra. Parece que lo haga a posta para ponerme peor. Levanto la cabeza, la miro enfadado. Ella para de moverse. Se me pasa por la cabeza que se le va ha hacer muy difícil estar con alguien como yo. Solo hay que verla, no sabe si hablarme o no, estarse quieta o moverse. Me entra la risa floja.

- “No te preocupes, no soy de los que le hagan daño a los demás. Puedes preguntarle al psiquiatra”. --Sigo con la naranja hasta que llega Mula.

- “Morgan, como van esos nervios? “. --Esa pregunta me irrita, y mucho.

- “Mal”. --Ahorro una charla. Medicación y a otra cosa.

- “Te ha dado de repente, como la otra vez? “. --Dudo en responder. Ha sido por hablar con ella. Que hago, la acuso y me acusarán de buscar una excusa? Me callo y asumo mi culpa porque total, es culpa mía?.

- “Oiga, sí, supongo......, y yo que se”. --Mira a Sofi, ella niega con la cabeza.

- “No, verá estábamos hablando y.......".

- "Y nada, que me ha dado y ya... he empezado a temblar y que quería fumar. He bajado, me he fumado un cigarro y el resto ya sabe por la enfermera”. --Silencio. Solo se escucha como cojo unos gajos de la naranja.

- “Vale, a ver esa tensión “. -- De nuevo el aparejo ese con esa malla que se infla y se desinfla. -- “La tienes muy alta”. --Guau guau. A este paso, el lunes no salgo de aquí.

- “Mire, antes de que estuviera aquí, inconsciente me bebía unas 4 o 5 cervezas, algún chupito, drogas alguna vez y fumaba bastante. Ahora de todo eso nada. Que espera?”. --Por una vez, las charlas que escuché en el instituto valen para algo.... Sí, para que Mula me mire y remire.

- “Sería una de las razones, pero no valen ahora. La enfermera te ha dicho que biene luego ha hacerte un análisis, verdad? Pues te tomaran la tensión otra vez. Sino ha bajado, ya sabes lo que hay. El domingo, ya veremos”.

- “Que quiere decir con eso? “.

- “Que saldrías el lunes pero en las condiciones en las que estabas, no peor”. --Eso me irrita, me estoy empezando a enfadar de verdad.

- “Joder, que pasa, que no me puedo enfadar porque me sube la tensión? Que soy, un palo sin vida? Pues nada, me quedaré callado, como una roca y así, ni subirá la tensión, ni me pondré nervioso ni nada! “. -- Mula me agarra las manos. Veo sus brazos temblar.

- “Una cosa es ponerse nervioso y otra Ésta”. -- Mierda, porque me toca, no quiero que me toque, pero no puedo decírselo, no me salen las palabras. -- “No dices nada? “. --Esas palabras me hieren, se me clavan….

...- - No dices nada ahora puta!! - - -...

- “He, mírame soy Mula!!.". --Le miro, pero no me suelta, tiemblo, mí cabeza duele, mi garganta está anudada. No, no, otra vez no. Quiero irme de aquí, pero, pero.....

Hago por soltarme de Mula, el me agarra más fuerte, no me gusta, hace frío.

...- - - - jajaja puta, intentas soltarte pero no puedes - - -....

Joder, mierda, esa habitación fría está en mí mente otra vez.

- “Me ves Morgan?". --Paso un rato mirándolo, pero no me puedo mover porque mí cuerpo no puede moverse, solo pasan recuerdos por mí cabeza de esa noche. No quiero, no más, estoy cansado, harto, debí haber muerto esa noche, pero no, ahora tengo este castigo, el recuerdo doloroso de aquella noche no me deja tranquilo.

Noto menos fuerza en mis manos. El sudor frío empieza a pararse, los temblores cesan, el nudo de la garganta se afloja.

- “Lo ha visto con claridad, Sofi?”. --A qué viene eso.

- “Sí, sí,..". --Porque habla tan afligida?

- “Esto es lo que le pasará más de una vez. Aún quieren que este chico vaya con ustedes?”. --Los miro, me cuesta seguirlos, no entiendo lo que hablan.

- “Seguro que con nosotros, viendo que está en lugar seguro, se le irá pasando”. --Mula me mira. Saca una pastilla, abre mi boca y a tragar.

- “Esto es solo la punta del iceberg de lo que le queda. Hablaré con el psiquiatra. Si fuera por mí, solo lo dejaría ir a casa durante unas horas y, hablen de lo que hablen, por favor, que no se ponga nervioso. Nos vemos mañana sino hay complicaciones. Buenas tardes ”. --No he dicho nada. Mierda,….

Sofi me mira, se acerca. Está escrito en su mirada que no se atreve a abrir la boca.

- “Déjalo, ya me ha quedado todo claro”.

- “Escúchame yo, en serio, no me refería a eso antes”. --Ni su tono ni volumen de voz me importan mucho.

- “En serio, déjalo. Ya he tenido bastante por hoy, quiero acabar de comerme la naranja y no te preocupes, es hacer un buen papel y listo. Y sino, al centro de menores”. --Ella me mira con asombro.

- “A qué sale el tema del centro de menores ahora?". --Suspiro… Estoy cansado y harto de todo.

- “A qué es donde tendría que haber ido de buen principio. Me acabo de dar cuenta, que me he convertido en todo un reto para vosotros y estoy harto de ser usado”.

- “Escucha, eso no es así! “. --Intenta cogerme la mano. La rechazo.

- “En serio Sofi, solo quiero comerme la naranja”. --Se hace el silencio. Ella no se mueve de mí lado.

- “Ahora llegará French”. --Joder, que parte no ha entendido?.

- “Ok”. --Me da lo mismo si regresa o no, total, hace las cosas como le da la gana y luego soy yo el que lo malinterpretar todo.

Noto que me mira, pero paso, no quiero oír nada más.

No se que pastilla es la que me han dado ahora, pero me ha tranquilizado y no tengo sueño, bueno casi.

Llega le enfermera por enésima vez. Solo saluda. Me toma la tensión.

- “Ahora si está bien”. --Pues vale. Sofi la despide con un gracias. Pero al salir choca con alguien.

-;“OH, disculpe”. --Vaya, French hace su aparición.

Nos saluda, pero nota el ambiente tenso.

- “Que tal Morgan”. --Le devuelvo el saludo pero sin levantar la mirada. Le voy a contestar mal y no quiero más problemas.

- “Sofi,.... qué tal?”. --Ahora a ver cuanto tiempo tarda en decirle algo.

-;“Bien, te estábamos esperando “. --Doña educación al ataque.

Solo suspiro y me recuesto. No voy a decir nada. Paso.

- “Vaya, huele a naranja”. --Buen intento de sacar un tema para hablar.

Nadie dice nada. Eso me molesta. Se lo que pasará. Sofi le contará las cosas y luego que soy yo el que lo malinterpreta. Como lo de la carpeta.

- “Va a decir alguno que pasa o jugamos a las adivinanzas”.

- “Nada French, cosas que pasan y ya”. -- Ahora soy una cosa que pasa y ya.

- “Tienes un cigarro, por favor? “. --Quiero salir un rato, esa pastilla no ha sido suficiente.

- “Sí, pero, no sé, parece que te fueras a dormir”. --Saca un cigarro y un mechero. Lo cojo y me dispongo a irme a saltitos.

- “Te acompañó y hablamos un rato". --Ah no, paso.

- “Habla con Sofi, yo no tengo ganas”. --Salgo de la habitación. Me para la enfermera borde. Joder, ahora si que no salgo.

- “Solo voy a fumar. La pastilla ha hecho efecto pero no tengo ganas de charlas de mis educadores sociales, tutores legales o lo que sea”.

-;“Te acompaño, sino nada”. --Joder. Tengo que bajar con ella mirándome de reojo y al salir, me siento mejor. Pero presiento que me dará una charla.

- “Adelante deme la charla, no se corte”. --Ella suspira. Pues si que será seria.

- “Chico, eres joven, solo ten paciencia”. --Que bonitas palabras.

- “Ya, mire, no se ofenda, pero tanto cambio no me va, ni tantas mentiras, trapos sucios tampoco”. --Se me está acabando el cigarro. Ella saca otro.

- “Es mi rato de descanso”. --Vaya,.. Me ofrece otro. Y parece que quiere seguir hablando.

- “Cuando alguien está perdido, intenta inconscientemente encontrar un guía o alguien que lo ayude a seguir. No es fácil, porque las costumbres son así, pero uno puede cambiar y seguir hacia delante”. --Esas palabras no me llenan.

- “Los que eran mis guías.... uno era un monstruo borracho y drogata, mi madre una sumisa cobardíca. Después , otra persona quedó decepcionada de mí porque acabé metido con la policía y juzgados de menores porque mi madre mató al monstruo. Y ya bueno, más mierda encima, porque yo que se….... Oiga mire, la cuestión es que no puedo confiar en nadie porque todo lo que parece bonito y bien, encuentro algo malo....".

- “Todos tenemos nuestras cosas, creeme.... Ellos si están aquí es por su trabajo, otra cosa es que hayan querido hacerlas de una manera más personal, pero,... sea por la razón que sea, tómatelo para bien no para mal”. --Se ha acabado el cigarro y hora de volver.

-;“Claro claro”. --Ésta charla me ha dejado igual a como estaba, pero bueno.

Me lleva a la habitación. Ahí están ellos hablando, como no, se callan cuando llego. Decido poner la televisión, queda un buen rato hasta que sea hora de cenar y me saquen sangre.

Miro la mesita en busca del mando. Y algo falta. Si, el papel con el número de teléfono del chico ese.

- “Te falta algo Morgan? “. --Pufff... está serio, vamos mal.

- “Si, un papel que había aquí. Había apuntado un número de teléfono. No me importa el número, pero si que el papel lo tenga cualquiera”. --No tengo ganas de discutir más, a ver si así me deja este también en paz.

- “Oh sea, que si ahora mismo rompieran ese papel no te importaría? “.

- “No, no me Importaría, qué pasa? “. --Saca de su bolsillo el papel. Ahora a pensar de qué tipo he cogido el número.

- "Y bien? “.

- " ....... Un chico me lo ha dado por si quería quedar con él algún día y ya. Lo he dejado ahí y punto".

- “Vale, si es así, toma: rompelo”. --Hay que joderse. Lo cojo, lo rompo, re rompo y se lo doy.

- “Contento? Hasta con estas ropas hay quién ve algo más “. --Pongo la televisión, por fin. Pero aún no han acabado.

- “Voy para casa, quieres que le diga algo a Shila? “. -- Por fin te vas a ir, Sofi.

- “Que la hecho de menos y que la veré pronto”.

- “Vale, que descanses”. --Hace un intento por tocar mí mano, pero se contiene. Veo que no le gusta contenerse. Joder,…

- “A ti te gusta que te toquen siempre?". --A ver si así zanjamos el tema de una vez.

- “No, la verdad es que no”.

- “Pues eso me pasa a mi “. -- Ufff.

- “Tienes razón. Le diré eso a Shila, hasta mañana”. --Se va con una cara más suya, normal, sin estar tensa ni nada.

French se sienta a mi lado. Pero no estoy de humor para tener a nadie cerca.

- “Que ha pasado? “.

- “Nada, una discusión con Sofi, me puse nervioso, luego más nervioso, recordé cosas, y ya. Mula ya lo sabe, ha estado aquí “. --Sonríe. Eso me pone a la defensiva. --- “Qué te hace sonreír? “. --Porque yo no le veo la gracia.

- “Veo que Sofi ve el carácter tan fuerte que tienes”. --El listo que todo lo sabe.

- “Oye mira, tu tienes un horario laboral? “. --Ahora me acuerdo porque empezó todo, y no fue por mí ataque de nervios.

- “En teoría sí, pero a veces, como a Sofi, surgen imprevistos “. --Lo mismo que ella, parece un guión.

- “Estoy pensando, quiero ir a casa, pero no creo que podáis hacer lo que decís “.

- “A ver, a ver, se más claro. Porque no entiendo nada". --Vaya, Sofi no le ha dicho nada.

- “Me puede pasar en cualquier momento que me de un ataque de pánico, de nervios o lo que sea. Que voy ha hacer cuando salga de aquí? Todos tenéis cosas que hacer, me quedo en casa solo, entonces?".

- “Solo porqué? Si mayormente tengo papeleo que hacer del inspector y Sofi está en el centro, casi al lado de casa, ya lo has visto”.

-;“OH venga, que bonito se ve. Y si tenéis que salir? “. --En serio, después de ver que me araño, a saber sino me da por cortarme las venas.

- “Aix… como Shila, en serio, déjanos enseñarte como van a ir las cosas y no te martirizes. Cuando hablaste con Shila, parecía que estaba bien?". --Una pregunta trampa, lo sé.

- “Sí, no la noté mal”.

- “Pues ella pensó lo mismo que tú y ya ves. Danos una oportunidad, aunque sea”. --Mierda, este hombre me puede.

- “Acabaréis en el loquero conmigo”.

- “Jajajajajs, no creo, ya hago sesiones. Y todo bien, tranquilo, que el día que se me vaya la cabeza, os avisaran”. --Será lo que me contó Sofi…

- “Así que vas a un psicólogo? “.

- “Ya lo creo y más al trabajar con menores y en los juzgados. Imagínate que un pedófilo acaba trabajando en el centro de menores, un problemon y de los grandes “. --Se sigue riendo y me cuenta más o menos lo mismo que Sofi, aunque no le pregunto sobre si puede tener relaciones con alguno de sus clientes menores y tal.

Pasamos así el rato hasta que llega la enfermera a sacarme sangre. No es la borde, bueno, ya no tan borde. Es otra. Imagino que su turno habrá acabado.

Lo hace rápido. Y me avisa de que me van a traer ya la cena, para darme la medicación y así poder levantarme temprano. Me harán un tag o una resonancia de no sé que para verme la Cabeza.

Eso me deja dudoso. French sale a por algo de comer y cenar conmigo pero se lo hace saber a la enfermera.

Qué es eso del tag y la resonancia esa? Joder, joder, a qué el lunes aún sigo aquí.

Me llega la cena. Bueno, algo variado, sopa de fideos, pescado al horno creo y pera. Aquí deben de hacerles descuentos en frutas. Bush, las de Gregorio si estaban buenas, lástima que no creo que las vuelva a comer.

Espero que esté bien, tenía la espalda adolorida. No me es de extrañar, ese hombre hacía más trabajo que 10 personas de mí edad juntas.

Llega French. Que rápido. Un bocadillo, una cola y ya.

- “Cuidado, que vas a engordar con eso”. --Le doy la pera, este come peor que comía yo.

- “Vaya, te has informado en nutrición? “. --Tiene hambre, porque va directo a comerse el bocadillo sin pestañear.

- “Un bocata para cenar hasta un niño pequeño sabe que no es muy…. Recomendable “.

- “De vez en cuando no está mal”.

- “Ya,… tu has comido hoy, porque no veas si tienes hambre? “. --Se ríe, pero no contesta. Nada, mejor, a cenar callados.La sopa está.... bueno, aprobado justito. El pescado…. Lo dejo en que me lo como pero no lo volvería a comer, no me hace gracia.El agua igual que siempre.Me acuerdo de la carpeta, pero no se sí preguntar. Pero, seguro que un ataque de los míos se lo hecho en cara. Tal vez, mejor, se lo suelto ahora y ya. Total, me quedaré dormido en nada. -- “Miré tu carpeta, soy como un gato, curioso, porque lo has denunciado personalmente? “.

Así, directo, sin más.

French, acaba su bocata. No se si para pensar bien su respuesta, o controlar su enfado o por tener a un fisgón.

-;“Porque quiero ver a esos hijos de puta pudrirse en la cárcel “. --Me deja sin habla. El chico pijo con traje y chaqueta sabe utilizar tacos.

- “Ah…. Pensé que esperarías a que yo decidiera hacer algo”. --Le va a parecer mal, lo presiento.

- “Tú lo has dicho ahora, eres como un gato, los animales no muerden las manos que les dan de comer”. --Oh, no, filosofía ahora no.

- “En otras palabras”. --En serio, no tengo ganas de pensar.

- “Dudo que te atrevas a hacerlo, sinceramente, así que doy el paso por ti. Has estado demasiado tiempo allí metido cuando eran tus padres los que tenían que velar por ti. Lo que tu has entendido como familia, amigos e incluso cariño no tiene nada que ver con lo que es en realidad. No dudo que no hayas hecho buenas migas con algún chico o chica de tú, por así decirlo, trabajo, pero las cosas no funcionan así “. --Se pone a comer la pera. Esperaba una charla ruda, alguna mala cara, pero no lo ha hecho.

- “Porqué no te enfadas? He .... yo he tocado tus cosas". --Me irrita, actúa como si nada.

- “Porque en parte, me has hecho un favor. Te lo tenía que decir de todas maneras así que bueno, ya está hecho. Pero otra vez no seas tan curioso, gatito”. --Sonríe, está muy guapo cuando lo hace.

Bostezo. De repente, tengo ganas de dormir.

-;“Duérmete, me quedaré aquí y, en serio, pregunta antes de sacar conclusiones y no te tomes todo como si fuéramos en contra ti”.

- “Eso va por Sofi?”.

- “Sí. No se que ha pasado, ella estaba preocupada por el ataque de pánico que te ha dado y los arañazos que te has hecho sin enterarte..... y.... Ou, y sobre qué lo que hacemos es porque nos interesa..... pues personalmente sí, tengo una buena excusa para no ir a reuniones aburridas de abogacía, tener que estar de aquí para allá por que un pariente no se que otro que no se cuantos… y ah, me he librado de buscar una mujer para que fuera madre de mis hijos, acabar divorciados porque no estaríamos bien y venga batalla por la custodia y tal. Tengo a unos niños adolescentes que me harán la vida muy entretenida”. --Menudo discurso. Pero eso de que tiene a dos niños me ha dejado cabizbajo.

- “Los niños crecen”. -+Creo que ha notado mi decepción.

- “Sí, pero el tiempo que pasas con ellos puede ser infinito”. -- Pone cara pícara?

- “ Jejej, ya veo”. --Buena manera de arreglarlo.

Se coloca en el sillón, bebe agua y se acerca. Me agarra la mano, dudo pero me aguanto. Me gusta demasiado.

- “Deja que las cosas sigan su curso y listo”. --Claro, como un río, pero el, con lo que ha dicho, parece que no lo pueda alcanzar más allá de la mano.

El sueño me puede. Así que me dejo llevar, pero digo buenas noches.

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