El precio de los sueños

El sol se filtraba débilmente a través de las cortinas cuando Alex abrió los ojos. Todo su cuerpo estaba pesado, como si cada fibra de su ser hubiera sido drenada durante la noche. Intentó levantarse, pero le costó un esfuerzo enorme. Un dolor sordo se había instalado en sus músculos, y su mente estaba envuelta en una niebla que lo hacía sentir desconectado de la realidad.

Se sentó en el borde de la cama, mirando sus manos temblorosas. Lo primero que notó fue el cambio en sus ojos al mirar el espejo frente a él. El tono dorado que había brillado con fuerza la noche anterior se había desvanecido, dejando atrás el habitual marrón oscuro. Pero esta vez, sus ojos parecían más apagados, como si hubieran perdido algo más que color.

Caminó tambaleándose hacia la cocina, donde Marcos ya estaba preparando el desayuno.

—¿Tú otra vez amaneces como un muerto? —bromeó Marcos, sin levantar la vista de la sartén.

Alex intentó reírse, pero el sonido que salió fue apenas un murmullo. Se dejó caer en una silla, apoyando los codos sobre la mesa y las manos en la cara. Marcos lo miró de reojo, notando la expresión inusualmente sombría de Alex.

—Oye, ¿estás bien? Pareces… diferente.

Alex levantó la cabeza y le ofreció una sonrisa débil.

—Solo estoy cansado, eso es todo.

Marcos notó de inmediato que algo le pasaba, dejó el sartén y se acercó, cruzando los brazos.

—No es solo cansancio. Te ves… apagado, como si hubieras corrido un maratón o algo así.

Alex apartó la mirada, incapaz de sostener el escrutinio de Marcos. Sabía que tenía que ocultar la verdad. No quería explicar lo que había pasado la noche anterior, ni el precio que había pagado por su viaje en sueños. Definitivamente, él pudo lograr moverse a través del mundo de los sueños, iba más allá que los sueños lúcidos.

—Estoy bien, de verdad —insistió Alex, aunque su voz carecía de convicción.

Marcos lo miró un momento más antes de encogerse de hombros y volver a la cocina.

Durante el resto del día, Alex trató de recuperar su energía, pero nada parecía funcionar. Su habitual alegría había sido reemplazada por una sensación de melancolía que lo arrastraba como una corriente invisible. Cada paso, cada movimiento, requería un esfuerzo monumental.

Sabía lo que esto significaba. Usar sus habilidades tenía un costo, y esta vez, el precio había sido demasiado alto. Recordó las palabras de su abuela cuando era niño: "No abuses de lo que tienes, Alex. Hay cosas que no deberían usarse a la ligera."

Sin embargo, no podía evitarlo. Sabía que su abuela lo necesitaba. Pero ahora entendía que cada vez que cruzaba ese umbral, no solo dejaba una parte de sí mismo, sino que también se sumergía más en un estado de vacío que lo debilitaba.

Esa noche, mientras se miraba en el espejo del baño, Alex apretó los puños. Sus ojos seguían oscuros, pero había algo más: un cansancio que no era solo físico. Una necesidad que no quería admitir.

Poco a poco, a través de los contactos con otros compañeros de su facultad o algunos ligues, descubrió que podía "recargar" su energía, precisamente necesitaba de la energía masculina, cuanto más intimo el contacto más rápido recuperaba esa energía, al final sospechó que una relación sexual completa, tal vez lo volvería a su estado natura.

Se sentó en el borde de la bañera, hundiendo la cabeza entre las manos.¿ Pero, qué le diría a Marcos? ¿Cómo podría explicar algo tan extraño, tan íntimo? No quería asustarlo, que él necesitaba de hombres para recargarse. Lo vería como un monstruo.

Esa noche, salió del departamento sin decir nada. Caminó por las calles de la ciudad, buscando el bullicio, los bares llenos, los lugares donde pudiera perderse entre las multitudes y encontrar a alguien con quien conectarse. Con su atractivo físico, rápidamente encontró lo que buscaba en un club nocturno. Era solo una idea que el tenía. Ahora estaba seguro.

Horas después, regresó al departamento sintiéndose un poco más ligero. Sus ojos habían recuperado un matiz más cálido, y el cansancio ya no era tan abrumador. Cuando entró, encontró a Marcos en el sofá, leyendo un libro sobre dietas para deportistas. Levantó la vista al oír la puerta.

—¿Saliste? —preguntó.

—Sí, necesitaba despejarme un poco —respondió Alex con una sonrisa forzada.

Marcos lo observó por un momento antes de volver a su libro.

—Deberías cuidarte más. No sé qué te pasa últimamente, pero no pareces tú.

Alex se quedó en silencio, la culpa revolviéndose en su estómago. No podía decirle la verdad. Todo lo que podía hacer era intentar controlarlo, limitar el uso de sus habilidades y evitar que Marcos se diera cuenta de lo que realmente estaba ocurriendo.

Sin embargo, en el fondo, Alex sabía que no podría ocultarlo para siempre.

La tarde avanzaba lentamente, y Alex seguía sintiéndose un poco débil a pesar de sus intentos de distraerse. Estaba sentado en el sofá, mirando su taza de té como si pudiera encontrar respuestas en el fondo. Marcos, que había estado observándolo desde la cocina, finalmente decidió hablar.

—Oye, Alex, te vi bastante agotado esta mañana. Me preocupo por ti. ¿Estás seguro de que todo está bien? —preguntó mientras se acercaba con una botella de agua en la mano.

Alex levantó la mirada, sorprendido por la sinceridad en su tono.

—Sí, estoy bien. Solo... no dormí bien anoche. Fue una de esas noches raras —respondió, tratando de sonar casual.

Marcos frunció el ceño, como si no terminara de creerle.

—Bueno, tal vez necesites distraerte un poco. ¿Qué te parece si vemos algo juntos?

Alex parpadeó, intrigado por el cambio de tema.

—¿Qué tienes en mente?

—Dark —respondió Marcos con una sonrisa maliciosa—. Es perfecta: compleja, llena de paradojas temporales, y lo suficientemente loca como para mantenerte despierto.

Alex se rió suavemente, aunque la idea le pareció extrañamente atractiva.

—¿En serio crees que tengo energía para seguir una trama como esa? —preguntó con una ceja levantada.

—Confío en ti. Además, si la entiendes a la primera, serás oficialmente mi héroe. Nadie más lo ha hecho —bromeó Marcos, encendiendo la televisión y buscando la serie.

A medida que los episodios avanzaban, Alex comenzó a sentirse más relajado. La trama intrincada de Dark y las constantes discusiones con Marcos sobre las paradojas temporales lo distraían de sus preocupaciones. Ambos se reían cada vez que uno trataba de explicar algo que el otro no había captado del todo.

—Espera, espera —dijo Alex, levantando una mano mientras pausaba el episodio—. Entonces, si Jonas viajó al pasado para evitar el apocalipsis, pero eso lo causa, ¿no significa que estaba destinado a hacerlo de todos modos?

Marcos se llevó las manos a la cabeza, fingiendo desesperación.

—¡Exacto! Esa es la paradoja. Todo está conectado, pero nada tiene sentido.

Ambos estallaron en carcajadas, riendo de lo absurda que era la situación. Por un momento, Alex olvidó el peso que llevaba sobre sus hombros y se permitió disfrutar de la compañía de Marcos.

Para cuando terminaron la temporada, ambos estaban recostados en el sofá. Marcos había terminado con la cabeza apoyada en el brazo del mueble, mientras Alex estaba ligeramente inclinado hacia él. Sus hombros se tocaban, y el calor del contacto era reconfortante, aunque Alex no quería admitirlo.

El cansancio finalmente los venció, y ambos se quedaron dormidos allí, con la televisión todavía encendida. Fue Marcos quien despertó primero, notando la cercanía entre ellos. Su mirada se posó en Alex, cuya expresión relajada contrastaba con su usual energía inquieta. Había algo en ese momento que lo hizo sonreír, pero no dijo nada.

Alex despertó poco después, sintiendo el peso de la mirada de Marcos. Al darse cuenta de lo cerca que estaban, su corazón se aceleró, y de inmediato se apartó, sentándose en el borde del sofá.

—Lo siento, no me di cuenta… —dijo Alex rápidamente, evitando el contacto visual.

Marcos se incorporó, mirándolo con calma.

—Tranquilo, no pasa nada. Fue un buen final para un maratón de paradojas temporales, ¿no crees? —respondió con una sonrisa.

Alex intentó devolverle la sonrisa, pero había algo en su interior que lo detenía. Temía lo que una conexión emocional con Marcos podría significar. Si se acercaba demasiado, si dejaba que las cosas fluyeran, sabía que podría acabar drenándolo como a los demás. Esa posibilidad lo aterraba. Prefería tenerlo como amigo, que perderlo para siempre.

—Sí, fue divertido. Gracias por invitarme —dijo finalmente, levantándose del sofá.

—Gracias a ti por aguantar toda la temporada. Créeme, nadie lo había logrado antes —bromeó Marcos, intentando aliviar la tensión.

Alex asintió y se dirigió a su habitación, cerrando la puerta detrás de él. Una vez dentro, apoyó la espalda contra la puerta y dejó escapar un suspiro tembloroso. El contacto con Marcos, aunque breve, había despertado algo en él, su cuerpo se sentía tan masculino, tan fuerte, su perfume lo embriagaba, definitivamente era de su tipo.

Se miró en el espejo de la habitación. Sus ojos seguían del marrón oscuro habitual.. "No puedo dejar que esto pase," pensó.

Esa noche, Alex juró mantener cierta distancia emocional. Pero en el fondo, sabía que sería más fácil decirlo que hacerlo.

Capítulos
1 Encuentro entre dos mundos
2 Descubriendo conexiones
3 El Destello en los Ojos
4 El precio de los sueños
5 Bajo el Velo del Tiempo
6 Reflejos Ocultos
7 Puentes invisibles
8 La Noche de los Secretos
9 El peso de la verdad
10 Alex revela su secreto
11 El vínculo oculto
12 El sueño de Alex
13 El miedo y la confrontación
14 La incertidumbre del corazón
15 ¿Qué somos?
16 La advertencia de Alex
17 Decisiones y contradicciones
18 La cita y la revelación
19 Sueño desconcertante
20 Un muro entre ellos
21 La realidad golpea
22 La confesión y el momento inevitable
23 Revelaciones
24 Conexiones
25 Un nuevo comienzo
26 El Encuentro con la Súcubo
27 Dulces y Demonios
28 No hay vuelta atrás
29 Solo Era Cuestión de Tiempo
30 Pactos y equilibrio perdido
31 El nombre
32 El Descubrimiento de Gabriela
33 Una Presencia en las Sombras
34 La Calma Antes de la Tormenta
35 Un comentario desafortunado
36 El enfrentamiento inevitable
37 Magia negra
38 La Grieta
39 El amuleto
40 Ecos de la oscuridad
41 La dimensión de los sueños
42 El Cambio de Alex: Poder y Peligro
43 El peso del cambio
44 El libro de Salomón
45 El ritual en el mundo de los sueños
46 El ente vigila
47 El misterio del manuscrito
48 La transformación de Alex
49 Arkhan
50 ¡Cuidado con el libro!
51 El misterio de los símbolos
52 La advertencia
53 El cumpleaños de Naara
54 El plan del ente
55 Naara y la grieta
56 Aceite caliente
57 El tiempo se acaba
58 La búsqueda del Sello de Salomón
59 La última traición
60 El Canto de la Luz
61 FIN: Un nuevo comienzo
62 Epílogo
Capítulos

Updated 62 Episodes

1
Encuentro entre dos mundos
2
Descubriendo conexiones
3
El Destello en los Ojos
4
El precio de los sueños
5
Bajo el Velo del Tiempo
6
Reflejos Ocultos
7
Puentes invisibles
8
La Noche de los Secretos
9
El peso de la verdad
10
Alex revela su secreto
11
El vínculo oculto
12
El sueño de Alex
13
El miedo y la confrontación
14
La incertidumbre del corazón
15
¿Qué somos?
16
La advertencia de Alex
17
Decisiones y contradicciones
18
La cita y la revelación
19
Sueño desconcertante
20
Un muro entre ellos
21
La realidad golpea
22
La confesión y el momento inevitable
23
Revelaciones
24
Conexiones
25
Un nuevo comienzo
26
El Encuentro con la Súcubo
27
Dulces y Demonios
28
No hay vuelta atrás
29
Solo Era Cuestión de Tiempo
30
Pactos y equilibrio perdido
31
El nombre
32
El Descubrimiento de Gabriela
33
Una Presencia en las Sombras
34
La Calma Antes de la Tormenta
35
Un comentario desafortunado
36
El enfrentamiento inevitable
37
Magia negra
38
La Grieta
39
El amuleto
40
Ecos de la oscuridad
41
La dimensión de los sueños
42
El Cambio de Alex: Poder y Peligro
43
El peso del cambio
44
El libro de Salomón
45
El ritual en el mundo de los sueños
46
El ente vigila
47
El misterio del manuscrito
48
La transformación de Alex
49
Arkhan
50
¡Cuidado con el libro!
51
El misterio de los símbolos
52
La advertencia
53
El cumpleaños de Naara
54
El plan del ente
55
Naara y la grieta
56
Aceite caliente
57
El tiempo se acaba
58
La búsqueda del Sello de Salomón
59
La última traición
60
El Canto de la Luz
61
FIN: Un nuevo comienzo
62
Epílogo

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play