#1

Narrador
Narrador
El sol estaba en su punto más alto cuando Nerea ajustó su gorra y lanzó un suspiro decidido. Su equipo necesitaba jugadoras, y no cualquier jugadora: alguien con fuerza, con ganas, con pasión. Había recorrido medio barrio con una hoja de inscripción arrugada bajo el brazo, enfrentando más negativas que sonrisas. Pero algo en su interior le decía que no podía rendirse.
Narrador
Narrador
En una de las esquinas más solitarias del parque, la encontró. Sentada en el borde de un banco descascarado, estaba Jazmín, con la mirada perdida y las manos entrelazadas como si estuviera sosteniendo los pedazos de algo que se había roto dentro de ella. Su cabello despeinado caía como un velo que intentaba ocultar la tristeza en sus ojos, pero la intensidad de su presencia era innegable, como una llama que aún ardía a pesar del viento.
Narrador
Narrador
Nerea dudó por un instante. Había oído los rumores: Jazmín, la chica que había perdido todo. Sus padres, su hogar, incluso su risa. Pero algo en esa soledad desafiante la hizo acercarse.
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Oye, ¿juegas fútbol?
Narrador
Narrador
Jazmín levantó la cabeza lentamente, sus ojos azules cargados de una mezcla de sorpresa y desconfianza. La respuesta que dio no fue inmediata, pero en ese breve instante, Nerea supo que había encontrado a alguien especial.
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
Sí... ¿Por?
Narrador
Narrador
Nerea sonrió, emocionada al escuchar la respuesta, aunque el tono de Jazmín fuera seco y sin compromiso. Aun así, no dejó que eso la desanimara. Se sentó en el banco a su lado, dejando la hoja de inscripción entre ambas, como un puente entre different world.
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Porque necesito a alguien como tú en mi equipo
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Dirijo un club, "Vista alta", y estamos buscando jugadoras con garras, con esa chispa que hace falta para cambiar el juego
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Porque estás aquí, sola, pero con la cabeza en alto. Porque sé lo que es perderlo todo y aun así seguir adelante, aunque no lo parezca.
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Y porque creo que el fútbol puede ser más que un deporte, puede ser una forma de empezar de nuevo.
Narrador
Narrador
Jazmín no respondió de inmediato. Miró la hoja arrugada, luego a Nerea, y finalmente al suelo. Había algo en esas palabras que resonaba en su interior, algo que le recordaba la lucha diaria en la que estaba atrapada.
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
Y si no soy tan buena como crees
Nerea (beta)
Nerea (beta)
No se trata de ser perfecta
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Se trata de intentarlo
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Vente a probar, no pierdes nada
Narrador
Narrador
Por primera vez en mucho tiempo, Jazmín sintió que alguien le tendía la mano, no por lástima, sino porque creía en ella. Después de unos segundos que parecieron una eternidad, asintió con un leve movimiento de cabeza.
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
Está bien, lo intentaré
Narrador
Narrador
Nerea sonrió, sabiendo que acababa de fichar a alguien que, más allá de cualquier habilidad técnica, tenía una historia que podía transformar al equipo.
Narrador
Narrador
Nerea sonrió ampliamente al escuchar la respuesta de Jazmín. Sacó un bolígrafo de su bolsillo y escribió algo en una esquina de la hoja de inscripción antes de ofrecérsela.
Nerea (beta)
Nerea (beta)
los entrenamientos son mañana a las 6 de la tarde
Nerea (beta)
Nerea (beta)
En el campo municipal, "Vista Alta", cuando llegues busca a alguien llamado Santiago, dile que vas de mi parte
Narrador
Narrador
Jazmín tomó la hoja con cierto recelo, mirando las palabras escritas y luego a Nerea
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
¿Santiago? ¿Como lo reconozco?
Nerea (beta)
Nerea (beta)
No te preocupes, no es difícil no reconocerlo
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Alto, con barba, siempre lleva una gorra
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Parece más un explorador que un entrenador, pero sabe lo que hace
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Confía en mi te va a caer bien
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
mañana a las 6, entonces
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Mañana a las 6
Nerea (beta)
Nerea (beta)
Ah!, y no llegues tarde, Santiago odia esperar
Narrador
Narrador
Por primera vez, Jazmín esbozó una pequeña sonrisa, casi imperceptible, mientras veía a Nerea alejarse. A pesar de todo, algo en su interior se sentía un poco más ligero.
Narrador
Narrador
Jazmín regresó a la habitación que ahora llamaba su hogar, un pequeño espacio en una pensión que apenas tenía lo esencial. Cerró la puerta detrás de sí y dejó escapar un suspiro profundo, mirando la hoja que Nerea le había dado. Mañana a las 6. Era extraño tener algo por lo que esperar después de tanto tiempo.
Narrador
Narrador
Sin perder más tiempo, se puso ropa deportiva que había guardado desde antes de que todo en su vida se derrumbara. Aunque estaban algo desgastadas, le recordaban días en los que aún tenía esperanza. Ató sus zapatillas con determinación y miró su reflejo en el pequeño espejo de la pared.
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
Bueno, jazmín es hora de intentarlo
Narrador
Narrador
Salió al parque cercano, el mismo donde había conocido a Nerea. Miró el espacio vacío y se obligó a empezar con algo simple: correr. Comenzó con pasos lentos, pero poco a poco aceleró, sintiendo cómo el aire fresco le golpeaba el rostro y llenaba sus pulmones. No recordaba la última vez que había corrido, ni la última vez que se había sentido tan viva.
Narrador
Narrador
Tras varias vueltas, se detuvo para recuperar el aliento y empezó a hacer ejercicios básicos: flexiones, sentadillas, estiramientos. Su cuerpo protestaba, desacostumbrado al esfuerzo, pero no se rindió. Cada gota de sudor era un recordatorio de que estaba luchando, de que estaba dando un paso más lejos de la soledad que la había atrapado.
Narrador
Narrador
De regreso en su habitación, agotada pero satisfecha, revisó su mochila para asegurarse de que todo estuviera listo. Una botella de agua, una toalla vieja, y las mismas zapatillas que había usado esa tarde.
Narrador
Narrador
Antes de dormir, miró al techo y dejó que una pequeña sonrisa se formara en su rostro. Por primera vez en mucho tiempo, sentía que tenía un propósito, algo por lo que levantarse al día siguiente.
Narrador
Narrador
Cuando Jazmín despertó aquella mañana, la luz del sol entraba tímidamente por la ventana de su habitación. Se quedó un momento mirando al techo, intentando recordar por qué sentía esa mezcla de emoción y nervios en el pecho. Entonces, la hoja arrugada sobre la mesita le devolvió la memoria: el entrenamiento.
Flashback
Padre de Jazmín
Padre de Jazmín
Mira hija, llegamos
Jazmín (pequeña)
Jazmín (pequeña)
Que es esto papi
Padre de Jazmín
Padre de Jazmín
Aquí es donde entrena nuestro equipo de fútbol mixto "Los halcones"
Narrador
Narrador
Cuando entran se escuchan gritos dentro del partido de parte del entrenador
Entrenador
Entrenador
¡más rápido, torres!
Entrenador
Entrenador
¿Eres una tortuga o que?
Entrenador
Entrenador
¡Así nunca vamos a ganar!
Narrador
Narrador
De niña, Jazmín nunca entendió cómo los jugadores soportaban esa presión. Se preguntaba si el entrenador realmente los odiaba o si esa era su forma de mostrarles que le importaba. Su padre siempre reía y le decía:
Padre de Jazmín
Padre de Jazmín
Es pasión Jazmín, no te lo tomes tan enserio, así son los deportes
Narrador
Narrador
Pero Jazmín no podía evitar sentir miedo de ese mundo. Esa energía agresiva no era para ella, o al menos eso creía. Por eso, aunque su padre intentó convencerla de unirse al equipo infantil, ella siempre encontraba una excusa para no hacerlo.
Narrador
Narrador
Mientras se levantaba de la cama, la mente se le lleno de dudas
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
💭 ¿Y si Santiago era igual? ¿podría soportarlo? 💭
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
Tal vez no sea como aquel entrenador....
Jazmín (Sigma)
Jazmín (Sigma)
Tal vez sea diferente
Fin del capítulo
Capítulos

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play