Después de varias horas manejando, finalmente Alex y Alondra llegan a su destino, un lugar sumamente hermoso, una mansión gigantesca de historias de fantasía
Es impresionante las vistas que pueden apreciar, en verdad se ve como un lugar mágico, es como si fueran de la realeza, apreciaban una bella mansión y un jardín sumamente lindo. Tanto Alex como Alondra estaban de acuerdo que solo el jardín era el triple de grande que su casa
Estaban tan perplejos que se sobresaltaron cuando escucharon una voz, proveniente de un aparato que les invitaba a entrar
Automáticamente salieron de su fantasía e hicieron lo pedido, cuando las rejas se abrieron, el auto se encaminó hacia la mansión
Les tomo llegar a la gran puerta unos varios minutos, estacionaron el coche en una parte libre en la que no molestará y al bajar notaron que un chico los espera
Dylan
Bienvenidos
Alondra
¡Hola! *Corre hacía él* ¿Eres un trabajador de la Abuela? *Sonríe de esa manera tan adorable como solo ella puede hacerlo -según Alex-*
Alex
Al, déjalo *Se coloca a la par de ellos* ¿Cómo está la abuela, Dylan? *Muy preocupado, no puede evitar ocultar su nerviosismo*
Dylan
El Doctor dice que no le queda mucho tiempo *Sin expresión*
Alex
*Su corazón se acelera al escuchar aquello* ¿Puedo... Ir con ella?
Dylan
Los llevaré *Camina hacía dentro, pero de pronto se detiene* enviaré a alguien por su equipaje *Sigue caminando*
Dylan los guío hacia una habitación en el segundo piso, al parecer la más grande de todas
Al abrir la puerta, a Alex se le apretó el corazón de la escena que veía: Su abuela está postrada en una cama con varias máquinas que la mantienen viva, se ve tan débil, tan demacrada
Inmediatamente Alex corre hacia la mujer postrada
Alex
¡Abuela!
Tanto su voz entrecortada y sus ojos abiertos con lágrimas cayendo de ellos, le dan la imagen de una persona que sabe que perderá algo que ama, cómo una niña a un perro que muere frente a sus ojos, vilmente atropellado
Cisili
A, A, Alex hijo mío *Su voz es muy débil y parece que le cuesta hablar* Si viniste *Sonríe, sintiendo la calidez de la mano de su nieto con la suya*
Alex
Estoy aquí abuela... Estoy aquí... *Aprieta levemente la mano*
Cisili
Has crecido mucho Alex, mira que guapo
Alex
*Le da una leve sonrisa*
Cisili
La última vez que te vi, eras un niño de 15 añitos, que rápido pasa el tiempo... *Sonríe melancólica, recordando momentos vividos*
Alex
han pasado 5 años...
Cisili
Ah-ah *Gime de dolor* e-es verdad... Ahora tienes ¿20? Mi niño... Cof cof *tose descontroladamente, aprieta con fuerza la mano de Alex*
Alex
¡Abuela! *Muy preocupado* Estás muy débil, descansa un poco ¿si?
Cisili
N-no, quiero estar contigo mi niño... ¡Cof cof cof!
Alex
Debes descansar abuela, cuando te sientas mejor estaré aquí contigo... *Sonríe tratando de calmarla, pero realmente esta por romper en llanto, de nuevo*
Cisili
*Sonríe triste* Está bien mi niño...
Alex
Descansa...
En poco tiempo Cisili se queda totalmente dormida, se ve tan tranquila, sin color casi como un cadáver, lo único que da señales de vida es la calidez de su piel y su respiración casi imperceptible
Dylan
Dejemos que descanse *Señala la puerta*
Alex
*Asiente, dejá la mano de su abuela con sumo cuidado y antes de salir besa su frente*
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