Cp. Uno.

Era una noche lluviosa...

Alexander había llegado temprano casa y sostenía a Lyon en sus brazos, su piel caliente y sus besos prolongados lo dejaron algo enamorado. Pero momentos después, una ola de enojo surgió, agitando el despreció en su corazón.

 Alexander lo soltó y fue al baño a ducharse. Se había ido solo por un momento cuando el celular en la mesita de noche comenzó a sonar, y Lyon lo cogió por él. Una delicada voz de Omega salió del teléfono.

_ Alex, ¿le dijiste a Lyon sobre nosotros?.

Lyon se congeló en el lugar, su mente se puso en blanco por un momento. Sabía a quién pertenecía la voz... Yonathan Lamer

_ Alex... está tronando afuera, tengo un poco de miedo, ¿puedes venir y acompañarme? Solías acompañarme así, ¿por qué no viniste hoy, Alex, Alex?.

Quizás al darse cuenta de que la persona que contestó el celular no era Alexander, el Omega del otro lado rápidamente colgó el teléfono.

Lyon volvió a colocar rígidamente el celular de Alexander en su lugar original y se recostó en la cama.

Un momento después, Alexander salió de la ducha. Sin embargo, no se metió en la cama para seguir durmiendo, sino que se sentó en el sofá a su lado y lo llamó con voz suave.

_ Lyon.

_ Hmmm.

_ ¡Vamos a divorciarnos!.

En la penumbra, las lágrimas de Lyon cayeron, pero su voz tenía un toque de calma anticipada.

_ ¿Por qué?.

_ Yonathan está embarazado, el niño es mío.

Solo siete palabras, y todas las defensas de Lyon colapsaron.

Entonces, ¡lo que Yonathan quiso decir con "nosotros" fue esto!

Se sintió como si alguien lo hubiera apuñalado en el fondo del corazón con un cuchillo; el dolor lo hizo temblar.

_ ¿Cuándo sucedió esto?.

_ En febrero.

Lyon trató de reprimir sus sollozos.

_ ¿Desde cuándo me engañas? ¿Cuánto lleva de embarazo?.

Una ola de emoción apareció en el hermoso e indiferente rostro de Alexander.

_ Este es mi asunto; solo dame el divorcio.

_ ¿Por qué no puedo preguntar?. Te acostaste con él, ¿crees que no he estado a la altura de él? ¿Te atreves a hacerlo, pero no puedes soportar que quiera saber desde cuándo?.

La mirada de Alexander era increíblemente aguda.

_ ¡Cállate! ¡No es como piensas!. Tiene 3 meses.

_ Entonces, ¿cómo es? nos casamos en enero, te acostaste con él en febrero y ahora solo es mayo y quieres el divorcio. ¿No crees que eres un desvergonzado?.

_ ¡Dije que no es como piensas! Si soy desvergonzado, ¿dónde te deja eso? ¡No creas que no sé lo que buscabas cuando te casaste conmigo!.

Lyon estaba lleno de tristeza y pena.

 _ ¿Qué buscaba?.

_ ¡Estabas apuntando a la riqueza de mi familia y como llenarte los bolsillos de dinero para dárselos a tu amante, tratando de usar nuestro dinero para comprar lujos a tu amante!

_ ¿Es esto lo que piensas de mí?

El tono de Alexander era frío y burlón.

_ ¿O qué? ¿Estás enamorado de mí?

Lyon se sintió provocado por su tono, fingió que no le importaba y dijo enojado.

_ ¿Cómo podría ser posible? Tienes razón, me casé contigo por el dinero. En cuanto a ti personalmente, no hay nada que amar, tu físico está bien y eres solo un Alfa de herramienta que puede calentar mi cama. Cuánto llevamos de casado y no pasas de besos calientes. ¿Eres un Alfa impotente?

Alexander, un Alfa prodigio, fue menospreciado por primera vez con tanta dureza por un Omega.

¿Solo es bueno para mantener caliente la cama de un Omega? ¿impotente?. Le advirtió con frialdad.

_ ¡No vayas demasiado lejos, Lyon.

_ Tú eres el que ha ido demasiado lejos, Alexander, durmiendo con él cuando te casaste conmigo. ¿Tienes conciencia en absoluto?.

_ ¡No es tu lugar como cazafortunas darme sermones sobre conciencia!.

_ Soy tu esposo ahora mismo. Cuando tuviste una aventura y engendraste un hijo, me dio derecho a regañarte.

_ ¡No por mucho más tiempo!.

Mientras discutían, el celular de Alexander volvió a sonar.

Miró el identificador de llamadas y suavizó su actitud brusca para responder la llamada.

 _ Yonathan, ¿qué pasa? Está bien, voy en camino _ Después de colgar, Alexander se alejó sin mirar atrás.

Lyon se quedó solo en la habitación. Se metió entre las mantas y comenzó a llorar.

Se preguntó si él podría verlo alguna vez, sin importar cuánto intentara amarlo o cuánto intentara convertirse en un esposo virtuoso y gentil. Solo se acostó con él hacen tres meses y fue por el celo. Cuando amaneció, Lyon ya estaba en otra habitación y Alexander jamás le hablo del tema.

Lyon pensó que no era necesario hablarlo, ya que eran esposos era normal, habrían muchas noches que seguirían haciéndolo, pero se dió cuenta que Alexander no pasaba de besos calientes y se detenía enojado cuando llegara el momento de llegar más lejos.

¿Él piensa que él es un cazafortunas y tiene amantes? ¿Él piensa que él está detrás de la propiedad y fortuna de su familia? Cuando... ¿alguna vez le pidió un centavo?

...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...

Cuando Alexander llegó a la villa de Yonathan estaba acurrucado en el sofá, tapándose los oídos, temblando.

Cuando lo vio, los ojos de Yonathan se iluminaron.

_ Alexander, estoy tan feliz de que hayas venido. Contigo aquí, no tengo miedo de los truenos afuera.

Alexander asintió.

_ Es tarde. Sube a la cama.

La voz de Yonathan se suavizó.

_ Alexander, ¿no me acompañas arriba? Todavía tengo miedo de dormir solo.

Alexander lo miró por un rato, y finalmente dijo.

_ Estaba extremadamente borracho y cometí un error ese día. No volverá a suceder _ Yonathan comenzó a llorar _ Pero no quise decir nada con eso. Estoy realmente asustado. Le tengo miedo a las tormenta. Siempre me acompañaban mis padres. Alexander…

Alexander sabía que realmente le tenía miedo a los truenos. Apretó el puño y asintió.

_ Está bien, vayamos arriba.

Yonathan estaba eufórico, se secó las lágrimas y extendió la mano para tomar la mano de Alexander.

_ ¡Sabía que eras muy amable conmigo, Alexander!

Alexander evitó su mano, solo recordándole.

 _ Cuidado con tus pasos.

Yonathan se sorprendió. Se cubrió el vientre y dijo.

_ Alexander, apóyame. Tengo miedo de caerme.

Alexander cerró los ojos brevemente antes de dar un paso adelante para sostener su brazo.

Una vez en el dormitorio, Yonathan se acostó, mientras Alexander se sentó en el sofá cercano, vigilándolo.

En la penumbra, preguntó.

_ Yonathan, esa noche, ¿notaste quién puso algo en nuestras bebidas?.

_ No me di cuenta. Yo también fui una víctima, Alexander _ La voz de Yonathan estaba llena de quejas _ ¿Podemos no hablar de eso? No deseo recordarlo.

_ Está bien, no lo mencionaré. Deberías dormir.

Fuera de la ventana, la tormenta estaba furiosa, con truenos y relámpagos cayendo repetidamente, como si estuvieran castigando a alguien.

Alexander abrió el celular, reviso sus mensajes y se concentró en el último mensaje de voz.

Había escuchado este mensaje tantas veces que no necesitaba reproducirlo. Podía recordar la voz intermitente del desconocido y había grabado el rostro de la foto enviada.

—Alexander, probablemente no lo sabes, pero tu Omega tiene un amante. La única persona por la que él se preocupa es por este Alfa. Todo tu dinero es para él, tu esposo quiere tus propiedades y tu empresa.

En la foto estaba Lyon abrazado de un Alfa. Esto fue enviado un día después de la boda.

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