A la mañana siguiente, Camila estaba en su casa, envuelta en las sábanas, luchando contra el sueño. Mientras tanto, Diego estaba en su trabajo, ocupado con sus responsabilidades diarias.
Suena el reloj
Camila
Mmmm, quiero quedarme un poco más en la cama... Camila se acurrucó bajo la sábana, disfrutando de la calidez y la comodidad.
Después de unas horas, Camila, con su espíritu de ayuda, ya estaba preparando su bolso para salir y buscar a alguien que necesitara ayuda, esperando que su generosidad le permitiera conseguir algo de dinero.
Camila
"Ah, me falta la llave", dijo Camila, buscando en su bolso. Abrió la puerta y cerró el portón con cuidado, justo cuando se encontró con Esteban, quien la esperaba afuera con una sonrisa.
Esteban
"Hola Camila, gracias por ayudarme anoche. ¿Te vas al trabajo? ¿Te acompaño o...?" le preguntó Esteban, con un gesto de agradecimiento y preocupación.
Camila
"No, gracias, iré en bus. ¿Necesitas algo con Daniel o...? ", preguntó Camila, un poco apurada, mirando al bebé con una sonrisa.
Esteban
"Ah, no, solo quería saber si necesitabas algo", respondió Esteban, sonriendo con un poco de vergüenza.
Camila
"Entonces chao, me tengo que ir. Ahí está mi bus", dijo Camila, señalando con la cabeza hacia la calle.
Esteban
"Voy contigo, voy a comprar leche en polvo, porque ya no me queda", dijo Esteban, sonriendo con alivio.
Camila
"Ok", dijo Camila, un poco incómoda, pero con una sonrisa cortés.
Subieron al bus y se sentaron juntos. Camila le sonreía a Esteban, un poco incómoda por la situación, pero sin que él lo notara.
Esteban
"Y vas al trabajo, ¿no? ¿No es un poco tarde para trabajar, o vas a comer con tu novio?" preguntó Esteban, un poco curioso.
Camila
"Yo... no tengo trabajo, pero ayudo a las personas que lo necesitan. Y si quieren me pagan, si no, no. Así es todo mi día", respondió Camila, con una sonrisa un poco triste.
Esteban
"Entonces, te tengo que pagar por ayudarme con Daniel esa noche", dijo Esteban, con una sonrisa cálida y genuina.
Camila
"No es necesario que me pagues, realmente fue lindo verte ayudando con Dani y Diego. No es mi novio, es mi compañero de casa, nos ayudamos mutuamente con el dinero para pagar la luz y el agua y cosas para la casa", respondió Camila, con una sonrisa sincera.
Esteban
"Ah, entiendo. Entonces, te tengo una propuesta. ¿Qué tal si me cuidas a Daniel y yo trabajo? Así no te estaré dando dinero que no te guste y además me estarías haciendo un pequeño favor", dijo Esteban, con una sonrisa esperanzada.
El conductor del bus, con voz fuerte, anunció: "¡Al centro, Miss Teodoro!".
Camila
"Amm, mira, es mi paradero. Lo siento, me tengo que ir. Hasta luego, Esteban", dijo Camila, con una sonrisa un poco apenada.
Esteban
"Ah, pero y lo que te dije... no me has dado una respuesta", dijo Esteban, un poco decepcionado.
Camila
"Amm... chao", dijo Camila, sonriendo un poco nerviosa y bajando del autobús.
...
Espero que te estés divirtiendo con esta historia tanto como yo la estoy creando poco a poco. nos vemos
Comments
Arabelle Arinne
Tu escritura es tan fluida que he devorado tu novela en un solo día. 📚👀
2024-11-18
0