Jeremy

Ella, salió de la oficina de Cristian sin antes decirle.

Esos papeles deben de estar firmados, en un rato más que pase Chantal. ¡Por ellos, no querrás que mi padre se entere de esto.! Dijo Ella, saliendo de la oficina de Cristián nerviosa por lo que acababa de hacer.

Cristián, por primera vez se sintió nerviosos por lo que acababa de pasar que realmente había sido nada.

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Ella tomó su bolsa y salió de la empresa y fue directamente a la casa que le había regalado su padre, ya que la estaba esperando Jazmín.

¿Hola, bebé, cómo estás.? — preguntó Jazmín, abrazándola.

¡Pues te puedo decir que estar en esa empresa con Cristián es como estar en el infierno, pero vamos a entrar para ver la casa.! —dijo Ella.

Amabas entraron a la casa. Era realmente grande y no había en ella nada de muebles, solo una nota de su madre que decía:"Decórala con tus sueños y metas".

Es bellísima, Ella.—dijo Jazmín mirando todo.

Mis papás, son un ángel en verdad.!_ dijo Ella.

Después de ver la casa un poco de tiempo y de platicar Yazmin y Ella, se fueron.

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Había pasado un par de días, y Ella estaba muy ocupada con el proyecto. Cristián la había estado evitando para comprender por qué se había sentido de esa forma con tan solo tocarlo, cuando...

Tocó toc toc.

¡Pasa.! —dijo ella.

¡Hola! —dijo jeremías, entrando a su oficina con una sonrisa.

Jeremías, hola, ¿qué haces aquí? —dijo ella con una sonrisa, para pararse a saludarlo de un beso en la mejilla.

¡Bueno, vine a acompañar a mi madre, para comprar algunas máquinas que necesita para la nueva fábrica que abrirá, así que viene a buscarte para preguntarte si quieres ir a comer.! —dijo jeremías, sonriente, mirando a Ella.

¡Sí, claro, vamos.! —dijo Ella tomando su bolsa para salir de su oficina y mientras hablaban miró a Cristián bajar del elevador.

Los ojos de Cristián se fijaron en ambos.

Al verlo, Ella no podía evitar sentirse nerviosa.

Ella caminaba al lado de Cristián como si no lo conociera mientras jeremías, estaba a su lado.

Cristian apretó los dientes y no dijo nada, no por qué no quisiera, sino porque qué no quería hacer notar su interés.

Ella y Jeremy subieron al elevador y enseguida Cristián le habló a Chantal.

¿¡En qué lo puedo ayudar, señor.! —dijo Chantal.

¿Quién es el hombre que acompaña a ella, acaso tiene algo que ver con el proyecto?—preguntó Cristián.

¡El joven Jeremy , señor, es amigo de la señorita, al parecer el joven llegó de sorpresa y la invito a comer, pues canceló todas sus citas incluidas las de mañana temprano y dijo que llegaría tarde mañana, eso quiere decir que se la pasarán increíble.!_ dijo Chantal, sonriendo, pues, jeremías era un hombre guapo.