capítulo 3

Cuando tuve por primera vez una fotografía de la mujer que mi hermano ocultaba su relación no le presté la atención necesaria para mí no era alguien relevante, cuando su nombre volvió a aparecer, pero segunda vez tampoco me interesó, pero cuando la tuve frente a mí en aquel espectacular vestido no aparte mi mirada de ella, tenía algo singular muy característico que antes había encontrado en mí "el miedo "esa detestable emoción que puede hacerte cometer las mayores locuras y lo pude comprobar con mis propios ojos algo demasiado doloroso había pasado con ella, por lo ahora sentía en realidad lo necesitaba, descubrir aquello quizás solo era porque compartíamos algo en común heridas invisibles que seguía haciéndonos daño.

Cuando regrese por la tarde a la mansión me serví un vaso de whisky, me odiaba a mi mismo al pensar que fui quien causó un doloroso recuerdo para esa mujer entonces tome el vaso y tire hacia la pared al caer se hizo pedazos.

Alguien tocó la puerta era Octavio mi amigo y mano derecha.

-Mi amigo te ves de muy mal humor.

-como no estarlo la cague, creoo realmente asuste a esa chica. Pero dime encontraste algo más.

— Absolutamente, nada o Quinn sabe muy ocultar todo puertas adentro o realmente no pasa nada allí.

-sabes quién tan bien era bueno ocultado cosas mi padre.

-Es cierto ,revisaré mejor.

Le di una corta mirada a Octavio y él salió de mi oficina.

Tomé mi teléfono y llamé a mi secretario

-quiero que le digas a Samuel Quinn que aceptaré trabajar con ellos.

Mi secretario Al escuchar las órdenes y bacilo al otro lado de la línea, pero enseguida contestó afirmativamente.

Subí las escaleras hacia mi habitación para tomar un baño necesitaba refrescar mis ideas, camine a mi armario y tomé un traje gris oscuro, mee coloque mi perfume habitual y unos lentes oscuros y salí otra vez una idea obsesiva surgió en mi mente quería comprobar que esa mujer estuviera a bien, noo no en que carajos estaba pensando no me interesa no quiero involucrarme con una mujer, sinn darme cuenta ya había llegado allí donde sabía que vivía espere un poco y la vi llegar,,, pero frente a su departamento la esperaban, su madre supongo le replicaba algo y ella solo asentía odiaba ver su cobardía como dejaba que la pisoteen y no decía nada al respecto ya no lo toleraba cuando su madre se marchó ella e dejó caer en la entrada del edificio parecía estar llorando iba a salir de mi coche, pero mi hermano aparecio se acercó a ella y la levantó y la llevó dentro.

Acelere mi coche y me aleje.

Una semana después acordamos otra reunión y la volví a ver de cerca se veía desanimada, sin vida quería hablar con ella, pero no me atreví, pero me sorprendió mucho verla esperando en estacionamiento, apoyada cerca de su coche su mirada seria se fijó en mí.

-Que hizo que cambiara de opinión?

-ha escuchado el refrán "no hay que juzgar un libro por su portada "me base en ello para decidirme en esta ocasión.

-No le creo, alguien como usted no se toma ese tipo de cosas a la ligera.

-tiene razón en ello,, pero la impresión que tiene de mí está bastante alejada de la realidad.

-Que impresión piensa que tengo de usted.

-Me cree una persona insensible, Egocéntrico y altruista.

-como sabe...

-No necesito saberlo puedo adivinarlo por como me míra y puedo demostrar cuán equivocada está.

Coloco un mechón dorado detrás de su oreja, ella solo mira hacia un lado

-y yo quiero recordarle la relación que establecí con su hermano.

-No necesitas recordármelo, yo soy quien vela por su seguridad y estoy al tanto de las personas que le rodean.

-Entonces no debería permitirse mirarme de la forma en que lo hace.

-Será interesante trabajar con usted srita Quinn hasta luego.

subí a mi coche, mientras ella me observaba regrese a mi casa y me encerré en mi despach, saque del cajón de mi escritorio la fotografía de mi padre mientras la observaba tome varios tragos.

-Brindo por ti Papá me convertiste en la infeliz criatura que soy ahora ojalá que Ardas en el infierno.

En algún momento me quedé completamente dormido por la ebriedad el sonido de un suave golpe me sacó del sueño desde la puerta una de las empleadas me llamaba suavemente me acerqué y abrí la puerta

-Que quieres?

-siento molestarlo señor es que la Sra Débora está aquí.

-Que se largue.

-Así que no piensas recibir a tu madre.

-Tú no eres mi madre,Yo no tengo madre

-niégalo cuanto quieras cariño soy tu madre y nada va a cambiar eso.

-porque estás aquí, estás buscando dinero.

-Me ofende que tengas ese concepto de mí, cariño quiero pasar tiempo con mís hijos.

-Escúchamee quiero que te largues no te necesitamos y Jackson no necesita saber que alguien como tú fue quien lo dio a luz.

Nuestra madre está muerta para él.

-Saquen a esta mujer de mi casa que vuélva a aparecer y van a saber las consecuencias.

Saque mi teléfono y llame a Octavio

-Escúchame que vigilen a Jackson, nuestra querida madre está de vuelta, no quiero que ella se acerque a el.

-descuida haré lo necesario

Jamás iba a permitir que ella regrese a nuestras vidas nos abandonó cuando éramos solo unos niños por una aventura con un tipo que la dejó poco después, cuando intento regresar mi padre le dio una golpiza que casi la mata, entonces se fue otra vez.

Me senté sobre el suelo intentando calmarme estaba furioso, pero no funcionó me levanté y rompí varios objetos, la Sra. Ruth quien llevaba tiempo trabajando con nosotros era única que podía ver como figura materna se acercó a mí y me abrazó cálidamente, quien curaba mis heridas y contenía mis ataques de ira era aquella mujer.

-Mi muchacho ya no hagas esto solo te haces daño, me preocupo mucho por ti que pasara contigo y mi Jack cuando ya no esté, quien cuidara de ustedes.

-Pues ojalá no te vayas pronto, porque no voy a saber que hacer si no estás.

-Tal vez sea tiempo que busques una compañera, compartir la vida con alguien.

-No creo en esas tonterías, Ruth el matrimonio solo es un contrato de interés, solo un beneficio.

-Pues como una feliz mujer casada te digo no todo es interés y beneficio, el amor también existe y deseo que tú también lo experimentes alguna vez.

-No deseo amor, solo mencionar tal sentimiento me repugna.

Ruth me miro tranquila, me dio una palmada en mi hombro y fue.

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