Capitulo#13

...«Narra Gabriela»...

Por fin había llegado el día del baile así que después de haber pasado casi todo el día en mi habitación arreglándome me coloque el vestido que me había diseñado madame Cecilia y el cual me había sido entregado está mañana y al terminar Carmen me elogió yo le regale una sonrisa y luego salí de mi habitación

Baje las escaleras y enseguida me encontré con las tres personas que me han hecho feliz estos últimos años

Ellos al verme se asombraron, pero luego sonrieron y la primera en acercarse fue mi madre la cual me beso las mejillas

– Estás muy hermosa mi niña

– Gracias madre aunque tú también estás muy hermosa con ese vestido

Mi madre al escuchar lo que dije solo se sonrojo y mi padre que se había acercado coloco su brazo alrededor del hombro de ella

– Hija tu sabes que todo lo que se coloque tu madre la hará ver más bella de lo que ya es, aunque tú no te quedas atrás con ese vestido te ves muy linda

– Concuerdo con ellos dos te ves hermosa y yo creo que tendremos que llevar algo para recoger la baba de los hombres que estén ahí

– Bueno gracias a todos por sus palabras pero creo que ya es hora de que salgamos

Ellos asintieron ante lo que dije y enseguida salimos de la mansión, esa noche más de veinte soldados del ducado iban con nosotros al llegar al palacio mi padre ordenó que cinco de ellos entrarán con nosotros mientras que a los otros 15 los mando a regarse por todo el palacio principal

Que él movilizará a los soldados de esa manera me extrañaba así que decidí preguntar que pasaba

– Tú sabes hija que después de lo que pasó hace dos días en el ducado el principe quedó muy resentido contigo así que podría hacerte daño

– Padre sabes muy bien que yo me se proteger

– Si puede que sepas protegerte pero en algún momento necesitarás ayuda así que deja de protestar y entremos ya

Al cabo de unos minutos caminamos hacia una gran puerta y en la cual un hombre estaba parado él al vernos inclino la cabeza y luego abrió la puerta del gran salón

– Con ustedes el duque Samuel Valentine junto a su esposa la duquesa Laurel de Valentine y sus hijos Marcos Valentine y Gabriela Valentine

Después de ese anuncio baje las escaleras junto a Marcos con el cual había entrelazado mi brazo al terminar de bajar las escaleras los nobles de rango bajo hicieron una reverencia frente a nosotros

Mi padre asintió y luego caminamos hacia un extremo del salón, luego de un rato los socios de mi padre se acercaron para hablar con él y mi madre que es como su mano derecha se unió a la conversación mientras que nosotros fuimos a la zona de bocadillos

– Marcos ¿tu sabes si es verdad eso de que él principe ya está aquí y que hoy se presentará?

Marcos se estaba comiendo una galleta cuando le hice la pregunta así que la dejo y me miró con el ceño fruncido

– ¿Y tú para que quieres saber eso?

– Pues porque si, además ya te dije lo que pienso hacer Marcos

– Y yo te dije que no estoy de acuerdo

Iba a seguir discutiendo cuando se escucho como la puerta del salón se abría así que mire para ver quién venía pero no podía ver nada hasta que él mismo tipo que nos anuncio hablo

– Con ustedes el Sol de éste imperio el emperador Saúl Vincent junto a él la madre y Luna de este imperio la emperatriz Melany de Vincent y junto a ellos dos nuestros dos pequeños soles el principe heredero Naun Y el principe Alexandriu

Después de ese anuncio tan largo cada una de las personas presente en el lugar hizo una reverencia y cuando levanté mi mirada ví como bajaban los cuatros miembros de la familia imperial pero mi mirada no era hacía los otros tres miembros si no al príncipe heredero

El hombre es tal y como lo describe la autora del libro el cabello negro, piel blanca, labios rosados y carnosos tanto que me provoca morder los en este instante y su altura debe ser como uno dos metros y su cuerpo es de infarto

Y como estaba tan concentrada mirando a ese hombre no me di cuenta que Marcos me hablaba hasta que él me pellizco en el brazo

– Auch eso me dolió

– Y bien que lo tienes merecido, yo hablándote y tu comiéndote al príncipe con la mirada

– Bueno, pero es que no lo pude evitar porque ese hombre está como para comérselo

– Hay deja de decir eso y vayamos a dónde están nuestros padres

Yo solo asentí a lo que dijo Marcos así que nos reunimos con nuestros padres y luego fuimos a dar nuestras felicitaciones a la emperatriz

al estar frente a ellos hicimos una reverencia para toda la familia y luego mi padre hablo

– Felicidades majestad por su cumpleaños y espero que tenga una larga vida

– Muchas gracias duque Valentine por sus palabras aunque quisiera hablar con usted y con Lady Gabriela

– Claro majestad (Ella asintió y luego mi padre me miró) Gabriela por favor entrega el regalo de su majestad

Tome el regalo de las manos de mi madre y me acerque a la emperatriz para darle su regalo

– Muchas felicidades para usted majestad

– Gracias querida

Luego de darle su regalo a la emperatriz mire en dirección a los príncipes, uno me miraba con rabia por lo que le había pasado y el otro me miraba de manera curiosa yo solo hice una reverencia con la cabeza y luego regrese al lado de mi familia

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