Lligoriana
Capítulo uno
"Rita"
Empieza un nuevo día, voy a comprar al almacén como siempre, tienen encendida la pantalla holográfica principal y veo que en las noticias anuncian que van a enfrentarse al ejército del clan Riaganna, que los civiles se deben resguardar en sus domicilios.
Maldición, otra vez- Me digo entre dientes-¿Cuándo va a terminar todo esto?-digo en voz alta, el almacenero se sorprende y me dice:
-Es complicado, pero mientras sigamos en este estado, vamos a tener que adaptarnos; eres recién llegada ¿Viniste buscando refugio?
Yo le cuento que llegué hace dos semanas y ¡Ya son tres veces que debemos ocultarnos!
Almacenero-Jajaja, vas a tener que acostumbrarte, aunque sería lindo que ya se acabara todo.
Le observo el rostro y veo su indignación, la misma mirada que tienen todos; vuelvo a la casa, está apartada de la ciudad y delante de un bosque montañoso; es de un ambiente, con baño pequeño; lo renté vendiendo una reliquia familiar; tengo una mesa redonda, una silla, un sillón, un futón donde duermo y una cocina pequeña, cierro las cortinas de la ventana y voy a revisar mi caja personal, aún me queda algo de dinero, lo suficiente para vivir tranquila un año:
-Debo hacer algo, o me quedaré sin recursos pronto (se sienta en la silla del comedor, se retira la remera y tiene un brazo amputado falso, dejando a la vista una pinza de cangrejo verde) ¡Auch! me duele mucho (trata de acomodar su brazo) es difícil ocultarla por mucho tiempo (la mueve de un lado a otro y la abre y cierra)...aquí en Llitoga todos tienen manos simples, si llegan a ver mi pinza me llevarán a las autoridades y me torturarán, como pasó al descubrirme en Riaganna hace algunos años, ; afortunadamente en un motín logré escapar.
Es el año 10300, los humanos mutaron a consecuencia de experimentos biológicos, desarrollando, Máscaras oxigenadoras reemplazando la boca y nariz, que tienen cuatro filtros de aire, dos en cada lado y una abertura en la parte baja de la máscara, específica para consumir alimentos, también mimetización de camaleón en la naturaleza, y un filtro solar girs en los ojos; una parte de la sociedad desarrolló pinzas de cangrejos, la otra no, el cabello generalmente es ondulado hasta los hombros.
Es de noche y afuera de la casa escucho ruidos, me levanto de la cama, me pongo una bata y observo por la ventana lo que pasa.
Hay un sujeto, persiguiendo a una chica, ella tropieza y choca contra un árbol detrás de mi casa, el sujeto se le acerca y la forcejea, logra rasgar un poco sus ropas, salgo corriendo y por detrás, lo tomo por el cuello con mi pinza, y agarrando con la mano un cuchillo, lo corto desde su espalda baja hasta su hombro, abro mi pinza y lo dejo caer desangrándose, guardo el cuchillo en mi bolsillo, escondí mi pinza bajo la bata y extiendo mi mano ensangrentada hacia la chica; la miro fijamente y lo más suave y tierno posible le digo:
-No tengas miedo, ven a mi casa, él no te molestará más-
Su cuerpo le tiembla, temerosa toma mi mano, la llevo hacia mi pecho y la abrazo fuertemente:
-Tranquila, no te voy a hacer nada; Sígueme -
Camina a mi lado lento, es de la mitad de mi tamaño, no debe tener más de una década y media de edad, tiene toda su ropa rasgada y se le nota hambrienta y deshidratada. Miro hacia atrás y veo como los coyotes se llevan el cuerpo al bosque profundo -Que lo disfruten- digo sonriendo placenteramente, me dí una idea de lo que pudo haberle hecho a esta niña.
La llevo a mi casa y la dejo sentada en el sillón, mientras preparo el baño para ella; se rehúsa a que le ayude a bañar y le dejo un toallón -Ve a la habitación a cambiarte cuando termines; te dejé allí un traje ajustable, yo voy a preparar algo caliente para que comas- le digo y me voy a la cocina.
Cuando termino de servir la cena, ella sale del cuarto cambiada, con el toallón enrollado en su cabeza, se sienta en la mesa y empieza a comer, la observo y le digo- Soy Rita, ¿Cómo te llamas?
Ella me responde- Soy Liro, gracias por salvarme de ese hombre-
Yo le pregunto si quiere contarme que le ocurrió, pero ella rompe en llanto, me levanto y la vuelvo a abrazar, la dejo desahogarse hasta que se queda dormida, la llevo al dormitorio y la acuesto en el futón, asique yo me voy a dormir en el sillón del comedor, luego de lavar mi bata.
Es de mañana, me levanto, voy al baño, al salir me acerco a la puerta de la habitación, ella sigue durmiendo. Entro despacio busco un cambio de ropa y vuelvo a la cocina, preparo el desayuno, antes de servirlo, me visto con el brazo falso y voy a despertar a Liro:
-Oye despierta, el desayuno se enfría -
Ella abre los ojos y me mira asustada.
-Soy Rita, anoche te salvé de ese sujeto que te iba a lastimar-
Se levanta, se sienta en la mesa y se pone a desayunar observándome detalladamente.
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