Descansa en paz, madre. —dijo y dejo la flor blanca encima del ataúd.
Para luego ser enterrado bajo tierra, se fueron del cementerio, Karina noto que su padre estaba sumamente nervioso durante el camino a casa, quizás era porque lo descubrió siendo un alevoso.
Su madre fue atacada por dos hombres obsesionados con ella, ellos mismos lo confesaron, Liliana era una actriz espectacular y amable, Karina miro por la ventana durante todo el viaje a casa, se durmió. Alfred la despierta, necesitaba dormir, se bajó del carro, entro a la gran casa seguida de su padre.
Karina LaRusso
—Se quita la gorra—Padre, ¿por qué lo hiciste? —le pregunta sentándose en el sillón de madera qué estaba en la sala.
Alfrend LaRusso
—intranquilo—Karina, yo en serio me siento muy mal por haberle faltado el respeto a tu madre.
Karina LaRusso
Das asco, padre. —Dice placidez —Vete... —Mando.
Alfrend LaRusso
Espero algún día me perdones hija—fue lo último que dijo antes de salir de aquella casa solitaria.
Habían pasado ya cinco años desde la muerte de Liliana, las empresas iban bien, algunas veces su padre la llegaba a visitar. Cuando Karina supo que su padre le fue infiel una serie de veces a su madre no se sintió ni mal ni bien, ni por la muerte de su madre.
Alfred había hecho un trato con los Rosenthal, unió sus empresas, las ventas subieron a un 100%, estos se iban a repartir el 30% de las ganancias dejándolos satisfechos a ambos.
El Señor Damianos cayó enfermo dejó bajo la responsabilidad de la empresa a su hija menor.
Alfrend LaRusso
¿Así que usted debe ser la Señora Valencia?
Valencia Rosenthal
Así es, Señor LaRusso. —Le extendió su mano, siendo aceptada por Alfred.
Alfrend LaRusso
—Mira a Karina—Hija ella será la encargada, Valencia te presento a mi hija, Karina dueña de la empresa.
Karina LaRusso
Un gusto... —ambas se dan un apretón de manos.
Valencia Rosenthal
—Sonríe—El placer es mío.
Alfrend LaRusso
Espero se lleven bien... —dijo su padre, salió de la oficina de su hija.
Valencia Rosenthal
Linda oficina, ¿esta casada? —pregunta.
Karina LaRusso
No, no tengo tiempo para amoríos. —ordena unos papeles para luego dárselos a Valencia—Espero haga bien su trabajo.
Valencia Rosenthal
No la decepcionaré, Señora Karina. —dijo con una pequeña sonrisa de lado—¿Es Alpha?
Karina LaRusso
Sí, ahora puede hacerme el favor de retirarse por favor. —pide, no le gustaba que le preguntasen tantas cosas.
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Helen
De ve que es buna
2024-02-07
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