Capítulo 20: La Oscura Obsesión

En otro momento, mientras viajaban en el auto ya un poco lejos de la mansión de james, Gerson sonrió ampliamente a Marcela. "Muy bien hecho, Marcela", dijo con satisfacción. "No te dejaste sucumbir ante ellos. Has mejorado mucho."

Marcela asintió con una sonrisa gentil, agradecida por el apoyo que Gerson le estaba brindando en su búsqueda de venganza. "Tú sabes que nuestro bebé lleva tu sangre, y ni siquiera si no fuera así, no nos dejaría solos", respondió con confianza, sucumbida en su ferviente deseo de venganza.

Gerson sonrió, pero por dentro, su mente estaba obsesionada con su plan maestro. Seguía convencido de que el bebé era suyo, sus genes habían sido más fuertes que los de james, y esa creencia alimentaba su deseo de venganza contra James y su obsesión con Olivia. La idea de que su hijo fuera parte de su plan le daba aún más motivación para continuar.

Marcela, por su parte, estaba completamente enamorada de Gerson y confiaba plenamente en él. No tenía idea de que él la veía solo como una herramienta en su retorcido plan para destruir a James y reclamar a Olivia. Continuaba creyendo en el amor que compartían, sin sospechar que Gerson la utilizaba para sus propios fines.

Mientras conducían, Gerson seguía maquinando en su mente oscura y retorcida. Su obsesión por Olivia se había vuelto más intensa con el tiempo, y cada día que pasaba, su deseo de poseerla se hacía más fuerte, llegaban pequeñas escenas de la vez que James lo obligó a mirar mientras tenían relaciones. Imaginaba un futuro en el que pudiera meterla en una jaula de cristal, rodeada de lujos, y tenerla solo para satisfacer sus necesidades más lujuriosas ver sus expresiones mientras le daba placer a ese cuerpo curvilineo.

El llanto del bebé lo sacó de su trance momentáneamente, pero no logró sacarlo de su inquietante lujuria controlada por su locura y obsesión por Olivia. Continuaba planeando cada uno de sus movimientos con precisión, decidido a destruir a James y reclamar a Olivia como su trofeo.

Finalmente, llegaron a su destino, y Marcela cuidadosamente cargó al bebé en sus brazos. Ella seguía confiando en Gerson y agradeciéndole por su apoyo en su búsqueda de venganza, sin sospechar que él era el maestro detrás de todo este oscuro juego.

Gerson no aguanto más las ganas y dejo ver una gran erección palpitante a Marcela que no dijo nada y se quitó el hermoso vestido para dar luz a su cuerpo desnudo, la excitación ferviente de Marcela era pensar que lo había hecho tan bien que le estaba dando un premio.

Lo que no tenía en mente era que esa fuerte erección era por Olivia, ya que todo el camino había recordado su cuerpo desnudo no obstante iba a calmar sus deseos más lujuriosos con Marcela ahí mismo en el piso de la sala, la hizo suya más de unos minutos paso a terminar su ferviente encuentro en la habitación dejando cansada a Marcela tendida en la cama dormida.

La trama retorcida de amor, engaño y traición estaba alcanzando su punto máximo, y las vidas de los personajes estaban enredadas en un tejido de mentiras y obsesiones.

La oscura obsesión de Gerson por Olivia y su deseo de venganza se habían vuelto inquebrantables, y estaba dispuesto a hacer cualquier cosa para lograr sus objetivos. El futuro estaba lleno de incertidumbre y peligro, y las consecuencias de sus acciones afectarían a todos los involucrados.

Continuará...

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