Revelaciones

No pude adaptarme, creo que estaba enloqueciendo, mi madre¿quién era mi madre? ¿Quién es esa mujer que dice ser mi abuela? ¿Por qué me han traído aquí? Tengo demasiadas dudas, estoy asustada, cansada y muy dolida, hace días que no duermo, hace días que no me siento bien, todos aquí sin vampiros me miran como si de un bicho maloliente se tratase, me juzgan, otros solo planean devorarme lo sé con verlos a sus ojos, en cierto punto mi aspecto me haría pasar desapercibida, mi piel pálida y mis ojos rojos son algo muy común aquí, pero Zaffder no siempre tiene sus ojos rojos, solo cuando nos atacó los tuvo de ese color aquí siempre son grises o tal vez morados, ya no sé, ni siquiera puedo distinguir bien los colores.

Entre tanta locura, Athanasia llegó, tenía puesto un hermoso vestido rojo, pero se me hacía algo retorcido que ella se viera incluso más joven que mi madre, su cabello plateado brillante y muy sedoso robó mi atención por un momento, hasta que finalmente ella rompió el silencio.

_ ¿Por qué me miras tanto? Sé que no es la vida aburrida que Planeabas tener, pero aquí tendrás que ganarte tu lugar, no puedes hacer lo que te dé la gana porque eso afectará mi reputación, la única razón por la que estás aquí es porque te pareces un poco a ella, no hagas preguntas ni te enfrentes a ninguno, si alguno de ellos desea beber tu sangre debes permitirle hacerlo, son jóvenes su instinto es más alocado.

_ No entiendo por qué actúa de esta manera¿acaso tuvo que ver con la muerte de __mi madre? ¡Asesina! - No podía contenerme, cada vez que veo a esas bestias deseo despedazarlos, aún no creo que mi madre perteneciera a su especie.

_ Te llevaste una mala impresión, claro que me importaba mi hija, por esa razón la protegía, siempre la cuidé tú no sabes nada de mi, aunque seas mi nieta puedo echarte de aquí, Ecaterina era mi hermoso tesoro, mi amada hija, incluso bestias como nosotros sentimos conexión con nuestros hijos, aunque no en todos los casos, no investigues más, quédate con esto que tienes ahora...no te hundas porque ese pozo no tiene fondo .

_ Sí me ocultas la verdad, yo misma la encontraré, no necesito la ayuda de un asqueroso vampiro, tú ¡asesinaste a mi madre!- Fue demasiado para mi, escucharla, verla tan tranquila sin derramar ni una lágrima sin lamentarse un poco me hacía odiarla, no quería verla , creo que lo notó y se sentó en el sillón de la habitación.

_ Tú madre sufrió mucho por mi culpa, por eso tuve que mantenerme lejos de ella, creció prácticamente sola, ya que su padre murió cuando apenas cumplió 8 años, mí hija es un híbrido, cuando cayó en mis manos sufrió las consecuencias de ser la hija de un "Lord", la señalaban, la maltrataban pero yo no podía hacer nada o nuestro rey nos exterminaria, tú madre pudo irse porque logró controlar sus poderes a su antojo, su fuerza su destreza, era una mujer increíble, se había ganado el respeto de todos en la academia, aunque yo jamás se lo dije, ni la felicité por eso, como era una aventurera fue enviada a cazar, así es como ocurrió su desgracia,fue encontrada por ese grupo de cazavampiros, esos malditos la tomaron y la torturaron por mucho tiempo, pero hubo uno que no deseaba lastimarla, extrañamente Adam sintió empatía por mi hija, la protegió, le ayudó a curar sus heridas y escaparon juntos, él era el lider de la órden santa, cuando me enteré quería quemarlo vivo, lo odiaba, lo odiaba demasiado por robarse el corazón de mí amada hija, la crié como una vampira altiva, me alejé para que no creará vínculos con alguien cómo yo y aún así tú patético padre apareció, eso desató una guerra, pero también se formó un pacto, el pacto de coexistencia, que en más de un milenio jamás se había pensado, me culpé a mí misma por las decisiones de mi hija y dejé de hablarle ¿quién era yo para juzgarla? Si después de todo su padre también era un humano... Tu madre era mi debilidad y odio ser débil, soy Athanasia hago parte de la corte, los hombres que asesinaron a mi hija hacen parte de otra comunidad de vampiros, los conozco muy bien, esa camándula era de tu padre y ese anillo se lo regalé a tu madre cuando se graduó, son los tesoros de tu familia debes protegerlos y sobrevivir Lilith, tú debes vivir, eres la más fuerte de tu familia . ¡Entren por favor!

Estaba muy nerviosa por la actitud de la abuela, pero ella se mantuvo serena, unas mujeres trajeron una mesa con dos platos de lo que parecía ser comida.

_ Elige una, pequeña Lilith.

Confundida elegí la charola dorada, la mujer se puso un guante y la abrió, entonces grité horrorizada, era la cabeza del vampiro de cabello dorado.

_¿Te gustó mi regalo?

No me salían las palabras ella se veía muy contenta, pero yo estaba en shock por lo que no pude hablar, pude ver la decepción en sus ojos, entonces pidió que retiraran todo y se marchó, la noche se volvió larga y tenebrosa, temblaba de miedo por todo lo que estaba ocurriendo, nuevamente eran las dos de la mañana y aún no podía dormir.

_ ¡Escuché lo que hizo tu abuela hoy, es una mujer increíble, esos dos eran guerreros muy fuertes, acabó con ellos sin mucho esfuerzo, pero tu eres humana y ella no entiende demasiado a los humanos, aunque no lo admita esa fue la razón de su divorcio - dijo burlándose.

_ Vienes a mi cuarto para chismear Zaffder?

_ Vine porque quiero beber un poco de tu sangre, dame de tu sangre Lilith.

No creí que sería tan directo, pero accedí, de otra forma solo lo haría de manera agresiva y terminaría asesinándome, sus ojos se pusieron rojos, se acercó a mi cuello y lo mordió, pero no me dolió, eso me sorprendió, mis ojos comenzaron a cerrarse finalmente caí dormida.

_ Dulces sueños Lilith - fue lo último que escuché que dijo Zaffder, durante toda la noche pude sentir su presencia, pero al despertar ya se había ido, fue como un sueño muy lúcido.

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