capitulo 4

Sandra entro lo más silenciosa posible para no despertar a Tamara ya que era tarde e imaginaba que ella estaría durmiendo, pero cuando paso por el living una luz se prendió y dio un salto del susto mientas escuchaba que una voz le decía:

-Tú a donde crees que te vas sin contarme todos los detalles -dijo Tamara bajo una luz tenue la la alumbraba

-Te voy a matar, casi muero del susto cuando prendiste la luz, pareces mi papá cuando nos esperaba para retarnos cuando nos escapábamos a bailar cuando, éramos adolescentes! -dijo Sandra tomándose el pecho y tratando de recuperarse del susto

-Ven ya aquí y me cuentas todo -dijo mientras palmeaba el asiento del sofa- que fue ese beso que mis ojos vieron!

-Me es estabas espiando! -pregunto ella mientras se sacaba los zapatos

-No si llevo aquí toda la noche  de adorno al lado de la ventana! - dijo mientras miraba por la ventana hacia abajo

-eres terrible – dijo mientras reía

Sandra le comento todo a su amiga con lujo de detalles, lujo tomo una ducha y se fueron a dormir al día siguiente ninguna de las dos trabajaba así que se levantaron tarde, mas bien dicho como las diez de la mañana las despertó el timbre, Tamara se levanto atender la puerta y se encontró con un enorme ramo de rosas era tan grande que no se podía ver quien estaba detrás, ella lo recibió y así vio al mensajero le firmo la entrega le dio propina y el mensajero se retiro.

-quien toca el timbre a estas horas de la madrugada -dijo Sandra mientras bajaba las escalera refregándose los ojos

-no sé dime tú quien nos despertó! – decía mientras sostenía el ramo de rosas

-wow y quien te mando esas rosas están divinas - dijo sorprendida

-no si no son mías, son tuyas! - respondió con gracia Tamara

-mías!? – pregunto asombrada

-Aquí llegaron estas rosas a tu nombre, lee la tarjeta -dijo emocionada

- espero que esto que acaba de comenzar no termine nunca\, gracias por la oportunidad -debe creer que vivo aquí  dijo después de leer la tarjeta…

-Del otro lado tiene algo más escrito - dijo Tamara con curiosidad

- se que esta no es tu casa pero sabía que hoy podía encontrarte aquí\, te dejo mi numero de celular personal para que me llames cuando lo desees -de donde saco tanta información -dijo asombrada

-cuando a un hombre le interesa alguien averigua hasta que talle de zapatos usa mi linda inocente – dijo con sarcasmo

-están muy lindas -dijo mientras contemplaba las rosas con cara de enamorada

-Cuéntame tu como te sientes con todo esto hace mucho que no estabas con nadie- dijo Tamara

-la verdad no se bien como me siento por un lado si me hace ilusión de volver a empezar a pesar de que me había jurado no volver a tener nada serio con nadie… y por otro lado siento como una cierta desconfianza algo de él que no me termina de convencer….- respondió Sandra con un poco de ilusión y un poco de intriga

-Si es difícil volver a confiar después de que entregaste todo y te fallaron de esa forma, pero esa desconfianza que sientes por Gabriel debe ser eso mismo el miedo a que te vuelvan a traicionar - Tamara trato de darle ánimos

-si eso mismo pensé, la verdad anoche hablamos mucho y le deje bien claro que yo quiero ir despacio no tengo apuro a nada.- aclaro ella

-me parece muy bien que dejes las cosas desde el principio, pero mas me gusta que te des una nueva oportunidad no todos los hombres son una mierda… muchos si, pero uno que otro perdido por ahí vale la pena amiga! – la abrazo fuerte y dijo -vamos a desayunar que muero de hambre

-si por favor - dijo sobándose la panza del hambre

Pasaron el día juntas fueron de compras luego almorzaron en un restaurante de un centro comercial, después fueron a la peluquería y Tamara acompaño a Sandra a la casa de sus padres ya que hacía mucho que nos los veía. Ellas habían ido juntas a la escuela desde la primaria y la secundaria, después eligieron distintas carreras

pero nunca se dejaron de visitar, Tamara era hija única y cuando tenia veinte años sus padres fallecieron en un accidente de tránsito, la familia de  Sandra la cuido como una hija mas y cuando Tamara ya tuvo suficiente dinero se fue a vivir sola ella nunca se sintió cómoda viviendo con la familia de Sandra a  pesar de que la trataban como una hija.

-Buenas noche -dijo Sandra al entrar a su casa

-como que buenas noches, te fuiste ayer a trabajar y recién a estas horas estas volviendo – dijo Roberto el hermano mayor de Sandra

-ya apareció DON CELOS! Hola hermanita como estas como te fue!? – dijo Tamara con sarcasmo

-Hola mis niñas como están?-saludo Juana

-Hola como les ha ido, tanto tiempo Tamarita que no te veía - dijo en tono alegre, mientras le daba un abrazo

-hola como están? Si ya no puedo ni venir por tanto trabajo por eso que ahora estaba libre vine acompañar a Sandra - se excuso Tamara

-ósea que ustedes andan juntas desde ayer, mmmm vaya a saber donde han andado las dos -dijo Roberto con tono  enojado

-En ningún lado mal pensado, tu hermana fue a una cena de trabajo y esta mañana nos fuimos de compras. Ha por cierto les traje esto para ustedes – dijo Tamara entregándoles una bolsa a cada uno de los padres de Sandra

-hay muchas gracias no te hubieras molestado -agradeció Juana

-no es molestia usted sabe que yo estaré en deuda toda la vida con ustedes -dijo Tamara

-No Tamarita nosotros hicimos lo que creíamos correcto y por eso te cuidamos como a una hija mas -objeto Patricio padre de Sandra

-si y así les paga, llevándose de joda a su otra hija - dijo Roberto en tono de queja, a quien nadie escuchaba

-Hay no seas celoso la próxima vez te llevo de joda a vos! – dijo Tamara mientras se reía y lo abrazaba.

Ellos siempre se llevaban así tirándose palos unos con el otro, Tamara se quedo a cenar y después de un rato llegaron las otras hermanas de Sandra con sus hijos y esposos y Roberto fue a buscar a su esposa y a sus mellizos la familia era enorme cuando todos se juntaban y la pasaban muy bien los niños corrían para

todos lados jugando los grandes mientras conversaban algunos cocinaban y otros ponían la mesa en esos momentos era cuando más se sentía en familia y que no estaba tan sola en el mundo, todos la querían como una hermana más y los niños la llamaban tía. Así pasaron la noche entre risas brindis y charlas.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***