Nunca le gusto la lluvia, prefería un día soleado, pero en esta ocasión, le agrado la lluvia, sentía la mirada de su madre Alpha detrás de él, mirándole con decepción, nunca debía llorar, o eso era lo que le decía, agradecía a cualquier dios que lo escuchará, agradecía que estaba lloviendo,la lluvia se mezclaba con sus lágrimas y las desaparecía.
Frente a la tumba de su padre Omega yacía un pequeño rubio de no más de siete años mientras su madre Alpha estaba inexpresiva a una distancia significativa del rubio.
Hace días que esperaba esto, pero su hijo lo está arruinando con su llanto.
Kushina Uzumaki
Tenemos que irnos, comenzará a llover pronto.
Menciono la pelirroja mientras se acercaba a su hijo que aún lloraba frente a esa tumba sin color y que, por supuesto, nunca volverá a ver.
La pelirroja no tuvo más opción que ir por él y llevarlo lejos de la tumba donde está la persona que alguna vez amo. El rubio cabizbajo, siguió a la Alpha, ella caminaba delante de él.
El camino a casa se hizo eterno y nostálgico. Naruto salio del auto y se paro en el porche de la casa, dudo en entrar, no queria entrar a un lugar en donde su padre omega paso los últimos días de su vida en agonía. La pelirroja lo empujó en el hombro para que comenzará a caminar y ambos entraron a la casa.
El rubio miro las fotografías en los portarretratos que adornaban la estancia, su madre Alpha al notar la acción puso boca abajo las fotografías evitando que el niño las vea.
Kushina Uzumaki
Ve a dormir, mañana tienes escuela.
Kushina Uzumaki
Tus calificaciones no son las mejores, esfuérzate más.
Solto con frialdad esas palabras que se marcaron en la mente del pequeño a la vez que se dirigia de nuevo a la puerta con intensiones de salir. Lo hizo, dejo solo a su pequeño niño.
El pequeño subio a su habitación, sabia hacia donde se dirige su madre Alpha. Va con esa Omega.
Quiere dormir pues al día siguiente tendrá que asistir a la escuela; kushina siempre le exigía buenas notas a pesar de pasar poco tiempo con él.
El pequeño rubio sabe que su madre Alpha tiene una amante, un día ella fue por él a la escuela junto con esa mujer y ambas se besaron aún cuando el rubio estaba frente a ellas.
Se puso la pijama y se metio a la cama, aún las lágrimas amenazaban con salir, pero sabia que no podia pues al día siguiente iria a la escuela y no queria que sus ojos se vieran hinchados.
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Al día siguiente el pequeño rubio se despertó a las seis de la mañana, lavo su rostro, se colocó el uniforme y los zapatos, busco a su madre Alpha en la habitacion principal, pero no estaba, no había llegado en toda la noche, no podía sentir el aroma de su madre en ninguna parte.
Sin más, bajo al primer piso y abrió la nevera, buscando algo para desayunar antes de irse a la escuela, encontró un yogurt de los que le gustaban a su padre Omega.
Mientras comía el yogurt, estaba llorando, observo el reloj que su padre Omega le regalo y vio que aún faltaban treinta minutos para que iniciara la escuela, pero considerando que no había nadie que lo llevará tendría que ir solo y caminando, pues no tenía dinero para tomar un autobús.
Salió de la casa y después camino hacia la izquierda, por donde su padre Omega lo llevaba a la escuela, recordaba el camino, más o menos, tenía que pasar por su puesto favorito de ramen y después por el parque y luego a... ¿A donde? Si no llega a la escuela su madre Alpha se decepcionará de él.
No lo recuerda, solo recuerda hasta llegar al parque, vio nuevamente el reloj y vio que quedaban diez minutos para que entrara a la escuela y no sabía a dónde ir.
Comenzó a desesperarse y camino hacia una dirección al azar, había autos, edificios, no tenía idea de dónde estaba, había muchas personas pasando por su propio camino y no lo veían, pasaban por su lado, pero era demasiado pequeño como para que lo vieran, se sentía inseguro y con ganas de llorar nuevamente.
Comments
Lili Yuli
me encanta nueva novela favorita agregada a mi colección
2024-06-13
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