Querido Edgardo:
Soy la señora Elena esposa
de tu hermano
El nunca me permitió acercarme a ninguno de ustedes
Si lo estoy haciendo ahora es porque Cristóbal ha muerto de la manera más extraña e inexplicable que te puedas imaginar,
Las puertas de la finca están abiertas para ti y toda la familia que quieran acompañarme en esta desgracia.
También si usted me lo permite quisiera recibir alguna invitación para que mis hijos conozcan el viñedo
Y a toda la familia
Me despido de usted con el alma destrozada Yo amaba a su hermano con toda el alma nunca tuve valor de contradecirlo
Y ahora ya es muy tarde para tomar caminos que nos lleven a diferentes finales.
Edgardo se quedó clavado en la silla.
Leyó y releyó en voz alta la carta para creer lo que leía.
Mando a llamar al peón para ver si podía explicar lo que había pasado.
José el peon----Antier el día de la tormenta,
Desde que amaneció el patrón actuaba raro siempre es raro,
pero ese día estaba peor, salió muy temprano,
Pero caminando no pidió montura.
La tarde oscureció y no llego.
La patrona nos enviaba al portón cada cinco minutos.
Quizás llegara y no lo escucháramos decía muy nerviosa
Pero no llego
Dieron las doce y nada que llego
La tormenta se calmó reunió diez hombres para ir a buscar al patrón
Elena----iría yo misma
Pero si me pasa algo que pasaría con mis hijos
Búsquenlo vayan a la hacienda a lo mejor allá lo agarro lo atormenta y allá está
Montamos nuestros caballos,
Te juro Juan que cuando pasamos por la hacienda no había nada ni nadie
Llevábamos quinquenales
y el cielo se había despejado saliendo la luna llena, alumbrando el camino.
Recorrimos la hacienda y sus alrededores
Y nos dispusimos a regresar íbamos callados pensativos
Que razón íbamos a darle a la patrona
cuando miramos en el camino en sentido contrario
Hacia nosotros una muy vieja carreta llevada por un enorme caballo negro,
lo más increíble que una anciana llevaba las riendas de aquel caballo.
Parece una aparición dijo Ismael persignándose,
Buenas noches, dije tontamente
buenas noches me contesto una voz chillona. Pues eso siguió su camino y nosotros también el nuestro rezando
Con escalofríos recorriéndonos la espalda cuál sería nuestra sorpresa nuestro horror
Encontrarnos con esa escena de
Mirar al patrón allí clavado de lado con todo y caballo en aquel Bieldo negro que dijeron había matado por igual a su papá
Señor Edgardo
Lo más extraño es que no conocemos al caballo solo sabemos que era muy viejo,
El patrón y yo nos quedamos viendo pálidos todo color había huido de nuestro rostro nosotros conocíamos la historia,
De seguro que era el capitán patrón.
Tuvo que pasar rato para que volviéramos hablar
Precisamente ese día se cumplían dos años de la la muerte del patrón,
Por eso estaba tan intranquilo,
la conciencia.
Juan-----Yo pienso que fue a la hacienda a sentirse que había ganado que era suya a sentirse el todopoderoso
Pero a que costo
El de su alma,
paso la lluvia y los caballos siempre regresan al establo más con una noche como esta
Vio el caballo vio el bieldo negro.
¡Para qué lo conservamos patrón .!,?
Juan----Este fierro se dijo me lo llevo como trofeo a mi casa. Charcos de agua terreno difícil.
Cristóbal llevaba de seguro El Bieldo con los dientes para arriba
Cristóbal borracho ,el caballo viejo ya casi ciego ha de ver pisado un hoyo se ladeó
Juan----Hay van los dos sobre el bieldo que ha de ver quedado parado y solos se ensartaron .
Su hermano tuvo un solo defecto
Ser arrebatado,
No pensar.
Yo creo que eso pasó.
¿Y qué va a hacer?
Edgardo ----Vamos a platicarlo con la familia.
Todos quedaron alterados con la noticia,
Juan---- pero la justicia de Dios existe
Él ya había hecho mucho daño.
Llegamos todos a la finca y Elena en persona nos recibió se alegró de que hayan aceptado apoyarla.
Juan----El patrón y yo nos miramos a los ojos vamos patrón a ver que paso.
Llegamos hasta el lugar de los hechos y en efecto allí donde se miraba que había ocurrido el accidente había una zanja de agua que se va formando naturalmente.
Pues eso fue se cayó y ya sabemos lo que paso .
Juan----Allí estuvimos dos días hasta que entregaron el cuerpo y la autoridad dijo lo mismo que iba demasiado tomado que llevaba el Bieldo que no era robo porque la hacienda le pertenecía.
Elena como decía que le dijéramos lo enterró junto a su abuelo y tíos en una ceremonia sencilla,Abajo de aquel árbol
Y sacando la promesa de que pronto iría a los viñedos.
Y nosotros reiterándole la invitación. Partimos.
Yo acompañé a la familia al viñedo.
Pero Edgardo tuvo nostalgia porque dijo que era muy difícil poder volver a ver la casa decidió conmigo dar un último adiós a lo que un día fue su hogar
A tantos recuerdos al lado de su padre pasando por el establo noto que el portón estaba abierto de par en par ,
Vamos Juan te acompaño a ver quien anda allí ,
Juan----Nos acercamos despacio y no había nadie. Entramos y tanto el cómo yo volteamos a ver el lugar del Bieldo negro
Ambos miramos con horror que allí estaba ,muy limpio sin rastros de nada ,acomodado en su lugar.
Ya mejor vámonos dijo Edgardo con un hilo de voz que apenas escuche
Caminando hacia el coche la tarde empezó a caer.
Juan---Yo regresé a la Hacienda ese era mi sitio
Aquí he estado por los últimos veinte años hoy precisamente se cumplen veinte y dos de la muerte del patrón y veinte de la Cristóbal
Juan---Ya mis hijos están grandes ,tuve cinco para que hicieran ruido.
Juan----Y eso es lo que estoy escuchando ruido camino unos pasos y siento un abrazo.
Pedro ---Juan que paso,
Es Pedro Rodríguez Alférez el último hijo de Elena y Cristóbal
Juan---Muchacho que andas haciendo por acá
Pedro---pues vengo a informarte que ya no vas a estar solo,
Voy a casarme y mi madre me regalo la hacienda "El Águila Plateada".
La voy a renovar,
pero no va a cambiar vamos a basarnos en la construcción original que mi abuelo hizo con sus manos ,
Vamos a hacer un potrero cerca del límite de la finca ,
grandes jardines y un enorme salón porque sabes vamos a dedicarnos cien por ciento a los caballos
le vamos a dar a la hacienda su antiguo esplendor.
Juan---Yo, voltee inconscientemente al establo
al Bieldo Negro colgado en su lugar.
Pedro ----Crees que no me se la historia,
Cuando daba mucha lata empezaban a contar esta historia yo me quedaba quiete cito como para no despertar los malos espíritus.
Pedro ---Pero ahora ya no voy a hacer eso vamos a tirar este establo y vamos a hacer una capilla a la dolorosa en la base del altar de consagrar
Vamos a enterrar ese fierro para ocultarlo de mal.
Y cada día de hoy en esta fecha vamos a hacer una gran subasta
Ya tengo el nombre Isidoro y Pedro Rodríguez Alférez lo invitan a la
Hacienda " El Águila Plateada".........
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 32 Episodes
Comments