Los días pasaron, y cada vez más personas se unían a las filas del ejército, y comenzaban a entrenar. Aunque los ciudadanos no sabían como manejar un espada, pudieron adaptarse rápidamente a la formación de batalla, gracias a eso pudimos defendernos de los ataques de los bárbaros.
Había pasado un par más de día y no se podía escuchar noticias de refuerzos enviados por mi tío o las ciudades cercanas, pero no me importa, lo único que me interesaba por el momento son noticias sobre Juan.
Los días seguían pasando y los bárbaros seguían siendo derrotados tras cada batalla.
Blandiendo mi espada corto la garganta del bárbaro, mientras esté cae muerto.
Había pasado tanto en el campo de batalla que ver peronas muerta casi no me afectaba en nada.
-Misión cumplida
Todas las estadísticas +5
Ya había llegado a matar a 250 bárbaros, gracias al manejo de de espada que aprendí y la cual logre subir a Rango B+.
Aunque también trate de mejorar mi magia, solo logro subir un rango más. Pero mis estadísticas solo se pueden subir completando misiones lo cual me limitaba un poco.
-Estado
Nombre: Jonat Courtier Edad: 20
Fuerza: 34 ki: 26
Defensa: 30 Agilidad: 35
Mana: 38
Habilidades.
Magia elemental Rango E
Manejo de espada Rango B+
Magia de fuego Rango C
Personalid.
-Etiqueta
-Orgulloso.
-Temerario
-Calmado
Con estas estadísticas sería considerado fuerte, pero en el campo de batalla estaría al nivel de un capitán, estoy muy por detrás de mi padre que estaba al nivel de un general.
Perdido en mis pensamientos, me despierta un voz.
-Joven amo se encuentra bien.
Es Pablo quien se acerca a mi.
-Si tranquilo, solo estoy pensando, gracias por su trabajo en detener a los bárbaros.
-No joven amo, gracias a usted, los soldados se sienten motivado cada vez que lo ven luchar.
-¿ enserió?
-Si joven amo, todos hablan de como usted se parace al patriarca que en paz descanse, cuando era joven.
La noticia de la muerte de mi padre se extendió por todo el territorio. Mucha gente fue al funeral excepto yo quien me quedé luchando en frontera.
Aunque los soldados de mi padre se sienten motivados y pelean con todas sus fuerzas. No solo ellos se merecen el crédito, los ciudadanos que se unieron al ejercito luchan ferozmente para proteger su ciudad y seres queridos, que no tienen ningún otro lugar a donde ir. Gracias a eso el número del ejército llego a ser de 1300 hombres. Lo suficiente para mantener a los bárbaros a raya.
Viendo como los soldados limpian el campo de batalla y como los bárbaros huyen, un sonrisa apareció en mi rostro.
-Bien la pelea terminó, dale a los soldados una buena comida y licor para celebrar se lo merecen.
-Como ordene señor.
Pablo se retiro, mientras yo camino hacia la ciudad. Tras cada batalla veía como la gente comenzó a regresar a la ciudad, volviendo a confiar en los soldados que protegen el fuerte, la cuidad volvió hacer lo que era antes.
Llegando a la entrada de la mansión, una sirvienta me estaba esperando en la puerta.
-Bienvenido joven maestro.
-No a habido ninguna novedad.
-Si joven maestro, le llegaron dos cartas, estas están en la oficina, uno de los mensajeros espera su orden, mientras el otro se fue al entregar la carta.
-Esta bien.
Cambiandome de ropa, me dirijo a la oficina y veo las dos cartas sobre la mesa, una de las cartas es de Juan y la otra sabia que mi tío la había enviado, ya que tenia el sello del patriarca. Abro la carta de mi tío y empizo a leer.
( Hola sobrino, perdón por escribir tan tarde, como sabrás ya tu padre falleció y no quería molestarte mientras protegía la frontera. Acabo de tomar el puesto del patriarca y e estado muy ocupado, la familia esta pasando por un momento difícil así que se me hará difícil seguir envido recursos a la frontera, pero se que encontrarás la solución. Me despido sobrino, cuídate.)
Quiero destruir la carta, pero me aguanto la ganas, solo leer esta carta llena de hipocresía me llena de nausea, pero se que esta carta me va a servir más adelante. Ese bastardo se entero que estaba reuniendo un ejército y quiere frenar mis avances cortando los recursos que por ley tienen que ser enviando, como todos los nobles de alto rango tengo el derecho de formar mi propio ejército personal y esa es la única manera de evitar que yo los construya, pero no me importa, el dinero no hace falta por el momento.
Después de guardar la carta, abro la carta de Juan y empiezo a leer.
( Buenas joven maestro, aquí su sirviente lo saluda, las cartas han sido enviadas y lo que pidió que investigamos esta casi terminado, todo será enviado dentro de una semana. Espero sus órdenes joven amo.)
Al terminar de leer no aguante la felicidad y empizo a reír.
-Solo espera maldito bastardo, me las pagaras.
De repente la voz del sistema, corta mi risa.
-Mision de historia.
Los bárbaros tienen muchas bajas y están debilitados, aprovecha y ataca da un golpe fatal.
Elimina al general de los bárbaros.
Recompensa:
Todas las estadísticas +5
Habilidad con el piano A
Magia de Rayo C
Al ver la notificación lo primero en que me fijo es en la habilidad de piado.
-De que mierda me sirve esa habilidad, me estas jodiendo maldito sistema.
Pero como voy a luchar contra alguien que tiene el nivel de un general.
Si te gustó el capítulo comenta, también puedes leer El mata demonio y Lucha a muerte a cambio de un deseo.
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Comments
Marina Hinostroza
Pues si están debilitados debe hacer una incursión de manera oculta y atacar a los bárbaros.
2024-05-15
0
Luz
toda habilidad por mas mediocre que parezca siempre ayuda y nunca hay que despreciar lo que nos dan o otorgan al final puede ser de ayuda 😁
2023-11-04
1
Monika Pilar Altamirano Caisedo
mmm es para engatusar a los enemigos inteligente jajajaj
No jajja como todo noble debe saber tocar un instrumento son habilidades de la aristocracia🙄🙄
2023-10-29
2